Esta científica, que sigue trabajando en nuestro país, ha realizado importantes avances sobre la biología molecular de los virus de dengue y Zika, además de sus aportes en la lucha contra el nuevo coronavirus.
La Academia Estadounidense de las Artes y las Ciencias (American Academy of Arts and Sciences, AAAS) designó como flamante miembro a la doctora Andrea Gamarnik. Esta investigadora del CONICET, que trabaja en la Fundación Instituto Leloir (FIL), fue distinguida por su trayectoria y contribuciones en el área de la virología molecular.
A lo largo de los años, el laboratorio de Gamarnik ha hecho contribuciones fundamentales sobre el mecanismo de replicación de los virus del dengue y del Zika y en tiempo récord, tras la declaración de la pandemia por COVID-19, lideró al equipo de trabajo que desarrolló los primeros test serológicos argentinos para COVID-19, aprobados por ANMAT.
“Agradezco este reconocimiento a mi labor científica de muchos años. Debo destacar que este es el fruto de haber contado con una universidad pública para mi formación y de haber recibido el apoyo de instituciones como el CONICET y el Instituto Leloir que fomentaron la creación de grupos de investigación”, afirmó Gamarnik, viróloga molecular, investigadora superior del CONICET y jefa del Laboratorio de Virología Molecular puesto en marcha en la FIL en 2001.
Otros argentinos
Gamarnik fue incluida este año en una lista de 252 nuevos miembros de la AAAS entre los que también figuran dos compatriotas radicados en Estados Unidos: el doctor en Microbiología Luciano Marraffini, graduado como biotecnólogo en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y director de un laboratorio en la Universidad Rockefeller, en Nueva York, Estados Unidos, donde investiga una técnica de edición genética CRISPR-CAS que permite que las bacterias adquieran inmunidad ante los virus; y la doctora en Química Valeria Molinero, del Departamento de Química de la Universidad de Utah, quien usa simulaciones por computadora y métodos de mecánica estadística para investigar la interacción entre la estructura microscópica, la dinámica y las transformaciones de fase en materiales desordenados.
La distinción de la AAAS apunta a reconocer a “personas extraordinarias que ayudan a resolver los desafíos más urgentes del mundo, crean significado a través del arte y contribuyen al bien común desde todos los campos, disciplinas y profesiones”. En el pasado, esta organización fundada en 1780 incorporó a Charles Darwin (1874); Albert Einstein (1924), Margaret Mead (1948), Martin Luther King, Jr. (1966) y otras destacadas figuras. Entre los argentinos, el listado de quienes han sido nombrados miembros incluye a los políticos Manuel Moreno (1825), Alfredo Palacios (1945) y Rodolfo Terragno (2012); a los Premios Nobel Bernardo Houssay (1941) y Luis Federico Leloir (1961); a los escritores Jorge Luis Borges (1968) y Luisa Valenzuela (2011); al historiador Tulio Halperín Donghi; y al compositor Alberto Ginastera (1965).
Hallazgos fundamentales
Gamarnik se formó en la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA y luego de realizar un postdoctorado en la Universidad de California, San Francisco, en Estados Unidos, regresó a Argentina gracias a un programa de repatriación lanzado por FIL hace aproximadamente 20 años.
Centró sus estudios en el virus del dengue, “un problema de salud pública de gran relevancia para nuestra región. Para poder controlarlo, es necesario saber cómo funciona, cómo infecta a la célula y cómo causa enfermedad. En nuestro laboratorio estudiamos al virus a nivel molecular con el fin de conocer el sistema y poder así identificar los puntos débiles que permitan el desarrollo de antivirales y vacunas efectivas”, explicó Gamarnik. Por su trayectoria y descubrimientos sobre los mecanismos que regulan la replicación del virus del dengue, Gamarnik recibió en 2016 el Premio internacional L’Oréal-UNESCO “Por las Mujeres en la Ciencia” en representación de América Latina.
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Con la pandemia, Gamarnik lideró un grupo de trabajo multidisciplinario que, con financiamiento público en el marco de una iniciativa del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MINCyT), el CONICET y la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), produjo los kits de análisis serológico para COVID-19 “COVIDAR”. Más de un millón de estos test fueron donados a hospitales públicos y privados hasta el mes de diciembre de 2020.