El embajador argentino en Brasil, ex vicepresidente de Néstor Kirchner, ex gobernador por dos mandatos de la provincia de Buenos Aires entre 2007 y 2015, y ex candidato presidencial en las elecciones de ese último año, Daniel Scioli, reemplazará a Matías Kulfas al frente del Ministerio de Desarrollo Productivo.
El presidente le ofreció ayer al embajador Scioli asumir ese lugar en el Gabinete, tras pedirle la renuncia a Kulfas. Scioli aceptó. Alberto Fernández acordó con el embajador que debe concluir algunas cuestiones pendientes en Brasilia. Asumirá como ministro una vez que concluya la IX Cumbre de las Américas en Los Ángeles, Estados Unidos.
Fernández tiene previsto partir hacia la reunión del foro hemisférico este martes 7, acompañado por una comitiva reducida de colaboradores y un grupo de periodistas acreditados. El presidente le tomará juramento a Scioli a su regreso.
Así concluyó una jornada que de modo imprevisto terminó con dos nuevas caras en el Gabinete: además de Scioli desembarcará Agustín Rossi en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
La labor diplomática de Scioli ha sido elogiada por argentinos y brasileños. Se empeñó en abrir puertas en el vecino país a las empresas argentinas, y construyó una relación cordial con el presidente Jair Bolsonaro, y a la vez profundizó la que ya tenía con el ex presidente y actual candidato Luiz Inácio Lula Da Silva.
Vale agregar que el viernes por la tarde, Scioli estuvo sentado en primera fila durante el acto por los 100 años de YPF que se realizó en el predio de Tecnópolis, en el que la vicepresidenta pronunció el discurso que de algún modo dio origen a la crisis que concluyó en la renuncia del ministro de Desarrollo Productivo.
En ese discurso Cristina Kirchner sugirió que existía una actitud demasiado benévola hacia el grupo Techint en la licitación para la construcción del gasoducto Néstor Kirchner.
El ministro Kulfas planteó en declaraciones radiales que habían sido funcionarios afines a la vicepresidenta quienes habían direccionado la obra a favor de Techint y que ese fue el problema de la demora. Poco después esa misma afirmación apareció en el portal Infobae, en un off the record atribuido a su ministerio.
Desde la empresa Energía Argentina (Enarsa), se rechazó las presuntas irregularidades que se objetaban en el «off» y se explicó el trasfondo que llevó a que el único oferente para la provisión de chapa laminada sea una empresa controlada por Tenaris (Techint) que importa desde una subsidiaria del mismo grupo afincada en Brasil.
La denuncia de ese «off» como un infundio anónimo impulsado por funcionarios del mismo gobierno fue avalada por la vicepresidenta, Cristina Kirchner, en su cuenta de Twitter. CFK cuestionó en duros términos a quienes habían impulsado el informe ‘en off’, a los que responsabilizó por llevar a cabo «ataques» contra otros integrantes del Frente de Todos «sin dar la cara, mintiendo y utilizando periodistas».
Poco después se sumó el propio presidente de la Nación, Alberto Fernández, y casi de inmediato se supo que el mandatario le había pedido la renuncia a Kulfas, hombre de su confianza y quien lo acompaña desde tiempos del Grupo Callao.
La larga trayectoria política de Daniel Scioli, y su estilo negociador, pueden servir para moderar los conflictos internos en el oficialismo.
El miércoles pasado, en un reportaje radial, Scioli, que aún no sabía que se sumaría al Gabinete dos días ddespués, se mostró elogioso de algunos resultados económicos como «la recuperación sostenida y la política de reindustrialización» que adjudicó a la gestión del presidente Alberto Fernández, a quien además reconoció por la baja de 7 puntos en el desempleo.
«El nuevo desafío que tenemos es la recomposición del salario», planteó.