Desde hace más de 50 años, la familia Querol se dedica a la fabricación de cuadros de bicicletas de hierro en Remedios de Escalada, Lanús. Leandro Querol fue el fundador de esta Pyme, luego se sumó su hijo Agustín y más tarde, sus nietos Aníbal y su hermana. En plena pandemia, Aníbal, que se crió entre los rodados, comenzó a crear una mezcla de cinta para caminar con bicicleta. Después de muchas pruebas logró patentar la Bicintacleta.
Nunca antes habían hecho bicicletas para vender al público. Alguna que otra vez realizaron algún modelo para vecinos o amigos, pero con los valores de los insumos importados es costoso fabricarlas. La Pyme sigue los vaivenes del país, por eso en 2018, Aníbal tuvo que buscarse otro trabajo en un centro deportivo para trabajar a la tarde y llegar a fin de mes. En pandemia, por siete meses su trabajo estuvo cerrado, y como Aníbal se aburría, empezó a pensar en inventar algo.
“Primero pensé en un monopatín que me había regalado mi viejo cuando era chico, pero quería algo novedoso y pensé en sumarle una cinta de caminar. En junio del 2020 empecé a probar. Me costó mucho poder hacer la Bicintacleta, fue difícil el tema de los engranajes, con el peso era costoso que arranque al no tener un motor de asistencia. En diciembre, ya tenía el prototipo que permitía caminar y transportarse”, contó Aníbal Querol.
Comenzó a subirla a redes como Tik Tok y a recibir elogios. Cuando decidió registrarla se enteró que en Holanda había algo similar pero era eléctrica, no manual. Le hizo mejoras a su prototipo y pudo patentarla.
El creador contó: “Permite caminar o correr e ir rodando como si se pedaleara una bicicleta. Se puede alcanzar los 30 kilómetros por hora, si se va corriendo. Mide 1,75 centímetros de largo y 35 centímetros de ancho, adelante tiene una rueda rodado 28 y atrás una rodado 20. Con las mejoras, ahora es más angosta que las primeras y pesa 30 kilos. El precio es de $155.000 en efectivo. Las primeras las vendí a amigos y vecinos y ahora las comercializo a través de las redes sociales”.
La Bicintacleta
Se vende en todos los colores y se puede utiliza para fitness, cardio y rehabilitación. “Cuando salgo con la Bicintacleta a la calle la gente me felicita, se para, la prueba, la verdad que me da mucha satisfacción. Hubo muchos procesos de frustración, trabajo de cuatro o cinco días y luego no poderla hacerla funcionar. Mi idea es poder venderla también en negocios, por ahora, la hago en la planta de mi papá. Tengo capacidad para hacer 25 a 30 por semana”, contó el inventor.