Entre lo que dejó la gira de Sergio Massa a China pasó inadvertido un hito relevante para el desarrollo científico nacional. Argentina va a exportar tecnología de medicina nuclear al gigante asiático. Se trata del diseño del reactor de isótopos radioactivos.
La mayoría de este tipo de isótopos se producen artificialmente en reactores atómicos. La Comisión Nacional de Energía Atómica es pionera en la producción y distribución de radioisótopos utilizados en aplicaciones para la salud, que son producidos en las instalaciones del Centro Atómico Ezeiza desde hace más de 50 años.
En diciembre de 1967, el reactor RA-3 fue inaugurado con una potencia de 0,5 MW con el objetivo de cubrir la demanda nacional de radioisótopos de uso médico. A lo largo de los años fue incorporando innovaciones tecnológicas y llegó a operar regularmente con una potencia de 5 MW.
En 2003, la Autoridad Regulatoria Nuclear otorgó la licencia a la CNEA para duplicar la potencia, escalando hasta los 10 MW, lo cual permitió aumentar al doble la producción de radioisótopos hasta cubrir toda la demanda nacional de Molibdeno-99 y proveer a Brasil del mismo elemento.
Ante la escasez de países proveedores, la posibilidad de convertirnos en un importante exportador brindan una oportunidad única para asumir una posición de liderazgo en la provisión de este insumo básico para la medicina nuclear.
En paralelo, el gobierno de China presentó en 2020 un plan para identificar las capacidades y necesidades de radioisótopos para la década entrante. En este plan se fijó la necesidad de construcción de un reactor de investigación, ciclotrones y facilidades de producción de radioisótopos.
A tal fin el gobierno chino instruyó a las empresas estatales Jiangxi Nuclear Power asociada a Shangai Nuclear Engineering Research and Design Institute a que presenten una propuesta.
Fue a mediados del 2021, cuando ambas firmas se contactaron con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y a la estatal INVAP, como referentes mundiales en la materia.
Luego de varios meses, en enero del 2022 se logró un acuerdo marco de cooperación e INVAP realizó un informe conceptual sobre las instalaciones que logró la aprobación en China, y quedó seleccionado como realizador de la infraestructura.
En las negociaciones iniciales se determinó que la Argentina, mediante la CNEA y el INVAP, ofertarán las facilidades y sistemas específicos para la producción de radioisótopos y generadores de tecnecio.
El embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, destacó que «este acuerdo es un hito importante para nuestra relación, ya que en este caso es Argentina la que transfiere tecnología a China» y agregó «empresas argentinas como Nucleoeléctrica, Invap, Arsat, YPF, Inti, Nuclearis, SpaceSur están cooperando en materia científico tecnológico con contrapartes Chinas».
Luciana Glezer