Ingeniería nuclear argentina para Brasil

El tanque reflextor del RA-10, fabricado por INVAP, implicó un desafío para la ingeniería nacional y es un hito para la industria nuclear argentina.

El 9 de mayo pasado, INVAP firmó un contrato con la Comisión Nacional de Energía Nuclear (CNEN) y con la Fundación PATRIA, ambos entes brasileños, por el trabajo de ingeniería para la planta de producción de radioisótopos. El contrato fue posible gracias a un acuerdo entre ambos países, firmado hace una década, para colaborar entre los dos reactores, el RMB que se construirá en San Pablo y el RA-10 que se construye en la Argentina, y ahora quedó extendido a la planta de producción de radioisótopos. Se trata de una compra directa de Brasil a INVAP sin la necesidad de hacer una licitación pública internacional, que se logró gracias a este acuerdo. El contrato tendrá una duración de casi dos años y el monto es confidencial.

El RMB es similar al RA-10 que se está construyendo en la Argentina, ya que también es un reactor multipropósito donde su función no es generar energía eléctrica, sino que produce neutrones que se usan para investigación y para producir insumos para medicina e industria. Allí también se producirá silicio dopado, que se usa para fabricar microchips o otros componentes electrónicos.

Las diferencias entre el reactor brasileño y el argentino vienen dadas por su diseño. Mientras que el de nuestro país será capaz de suplir toda la demanda nacional de medicina nuclear y deja un margen importante para la exportación, su par brasileño, aunque es de la misma potencia (30 Mw), está pensado solo para cubrir la demanda de ese país, que tiene una población cuatro veces y media mayor que la argentina.

Si bien ambos reactores podrían competir en su producción, también puedan complementarse y cubrir diferentes demandas de la región. Felipe Albornoz, gerente del Área Nuclear de INVAP, contó que “desde el comienzo queremos que se complementen ambos reactores y lo venimos pensando juntos desde hace mucho tiempo. También estamos en contacto para que cuando uno de los reactores tenga que hacer una parada programada para mantenimiento, el otro pueda reemplazar su producción. Tenemos mucha comunicación con nuestros pares brasileños y una muy buena relación. Cuando uno hace radioisótopos para medicina es muy importante mantener la continuidad de suministro porque cuando hay baches quiere decir que hay pacientes que tienen que interrumpir su tratamiento, o sus estudios, y eso afecta su salud”.

«Los recortes de presupuesto nacional en las áreas de ciencia afectan a INVAP en el sentido de que hay proyectos nacionales en los que participamos que han tenido demoras en su avance», dijo Albornoz.

El RMB tiene completa la ingeniería de detalle desde ya hace varios años y en todo este tiempo la CNEN brasileña estuvo buscando la financiación para la construcción. Hoy ya están asegurados esos fondos y por eso empiezan con la ingeniería de la planta de radioisótopos y ya han empezado las tareas de la preparación del sitio de emplazamiento y las actividades asociadas. Hoy el lugar es un descampado pero se están construyendo las rutas, alambrados, provisión de agua y todos los servicios complementarios para la instalación del reactor. También se están buscando los mecanismos legales para que INVAP pueda formar parte de la construcción del mismo.

“Es un acuerdo importante porque remarca la buena relación que tenemos con Brasil en temas nucleares y estratégicos desde la década del ’80, cuando se formó la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares (ABACC). Y en este reactor estamos vinculados desde hace más de 10 años, primero haciendo el diseño y ahora el de la planta de producción de radioisótopos. También es importante porque remarca el nivel de liderazgo de la Argentina en estos temas, sin duda en la región pero también a nivel mundial. No hay muchas empresas en el mundo que sean capaces de ofrecer esta tecnología. Parte la hicimos en INVAP pero también otra parte se acordó hacer la transferencia de tecnología con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA)”, explicó Albornoz.

El reactor RA-10 ya tiene su obra civil terminada y se han hecho avances importantes en su parte nuclear y no ha sido afectado por los recortes que afectan a otras áreas de la CNEA. Estos recortes también afectan a INVAP, que es la empresa de desarrollo de tecnología avanzada más importante del país y el principal contratista de la CNEA. Según Albornoz:  “Los recortes de presupuesto nacional en las áreas de ciencia afectan a INVAP en el sentido de que hay proyectos nacionales en los que participamos que han tenido demoras en su avance, es un impacto directo, y de manera indirecta nos impacta por la fuga de gente muy preparada, que están con dificultades para mantener sus puestos de trabajo y buscando horizontes en el exterior. Hoy quizás no nos afecta tan directamente pero a futuro, cuando necesitemos disponer de esos recursos para la evolución de esos proyectos, no los vamos a poder encontrar”.

La firma de este contrato le da aire a la empresa de Río Negro, lo que le permite transitar estos años hasta que las políticas vuelvan a orientarse hacia el desarrollo de tecnología nacional. También confirma la importancia de la empresa en el plano internacional y reafirma las buenas relaciones entre argentinos y brasileños en cooperación técnica entre niveles medios de mando, ya que hoy las relaciones entre los gobiernos no están en su mejor momento. “Lo más importante es la continuidad de la relación con Brasil y la reafirmación de INVAP y la Argentina como líder en estos temas en la región”, dijo Albornoz.

VIATSS UNSAM