En el transcurso de las próximas semanas, la Fábrica Argentina de Aviones entregará los nuevos Pampa III a la Fuerza Aérea. Será la primera entrega de tres aviones fabricados en la emblemática FAdeA después de diez años de no hacerlo.
En el equipo de AgendAR hemos criticado la decadencia de lo que fue un orgullo argentino. Recientemente, que cancelara la fabricación de drones diseñados por INVAP. Pero eso nos obliga también a dar la bienvenida a todos los esfuerzos por mantenerla en marcha. Compartimos con algunas reservas los párrafos relevantes de la entusiasta nota de Natasha Niebieskikwiat.
«Son naves de entrenamiento básico avanzada y de ataque liviano. Otros Pampa II ya habían sido fueron remotorizados y entregados en julio pasado. Los IA 63- Pampa III son actualmente el producto estrella de FAdeA, que viene de años duros, al menos 500 despidos desde 2016.
La fábrica, que tiene sede en Córdoba se está moviendo en medio «de un cambio de paradigma». Empresa pública con gerencia como una privada se propuso cumplir con sus compromisos con el Estado pero también generar negocios y atender la demanda del sector de la aviación privada. Hoy, la empresa tiene 870 empleados, en realidad 800 menos de los que tuvo y pretende llegar a déficit cero tras años de pérdidas.
Los Pampa III que serán entregados a la Fuerza Aérea fueron producidos en serie y son los Pampa III matrícula 1028, 1029, que están en etapa de comprobación de vuelos de alta y los 1030, en etapa final de montaje, y pintura. La semana que viene estarán haciendo vuelos funcionales que se requieren previo a la entrega y luego se van a estar pintando para terminar la etapa de montaje y empezar con sus vuelos. El Pampa III aumentó la incorporación de componentes nacionales del 3% en versiones anteriores a un 12% en la actualidad.
Estos aviones (eso dice Niebeskikwiat), están en condiciones de hacer patrullaje costero de largo alcance, custodia y control fronterizo, misiones aire-aire, aire-tierra y reconocimiento táctico ofensivo. Sin embargo el patrullaje costero y el control fronterizo suelen requerir de aviones con mucha autonomía, categoría en la que un entrenador liviano con poco combustible sólo puede caer por default, a falta de otra cosa. Cuenta con un sistema de aviónica Full Glass Cockpit-Mil 1553, funciones integradas (Nav/Com/Attack), un sistema de manejo integrado de armamento (SMS). Para la pauperizada flota aérea argentina, suma un componente de control.
Pero nuevamente, estamos hablando de entrenadores secundarios que por pura necesidad tratan de cumplir con funciones de intercepción o vigilancia que exceden su diseño. Con 2,7 millones de km2 de superficie, el octavo país del planeta en extensión, ¿qué control añaden «tres tristes Pampas»? ¡Y producidos en 3 años!