Es la obra pública anunciada más importante que sigue en pie: 500 millones de dólares en 4 años. Es la construcción de tres turbinas Kaplan y los generadores que sumarán 276 MW de capacidad instalada a la central eléctrica, más las obras civiles sobre el vertedero del Brazo Añá Cuá.
Y aunque, como informó ayer AgendAR, la Entidad Binacional ya preseleccionó a cinco consorcios de empresas internacionales, las polémicas siguen a través de los medios. Será difícil que se acallen, con la historia de Yaciretá.
Entre las empresas preseleccionadas, figuran algunas tan conocidas como Techint (de Paolo Rocca), y SACDE (ex IECSA, actualmente de Marcelo Mindlin y anterior compañía de Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri).
Por su parte, Juan Carlos Fernández Morici, CEO de IMPSA, había pedido públicamente que la EBY valore que su propuesta tiene un 70% de contenido local y dará más trabajo a argentinos y paraguayos, además del pago de impuestos en estos territorios.
(El pliego de la licitación preveía que las empresas que tienen más de un 60% de contenido local tengan una ventaja de un 10% en la comparación de ofertas económicas).
IMPSA, asociado a Power China y la paraguaya CIE, propuso u$s 116.379.881, mientras que la alemana Voith Hydro, a través de su subsidiaria en Brasil, ofertó u$s 99.689.577,84. Pese a la diferencia de precios de casi un 17%, Fernández comentó que esos números «son de abril de 2018», previos a la devaluación del peso argentino. «Si eso se trae a precios de hoy, como nuestra oferta está en un 63% en moneda nacional (pesos argentinos y guaraníes), el precio en dólares sería mucho más bajo y, por lejos, el más conveniente», aseguró el ejecutivo. «Esto puede dar mano de obra a argentinos y paraguayos. Trabajan más de 100 pymes con nosotros. ¿O la EBY preferirá darle trabajo a chinos y alemanes?», se preguntó el CEO de IMPSA.
De Voith Hydro Brasil desmitieron estas declaraciones. De acuerdo con su versión, IMPSA no tiene solvencia económica para construir las turbinas y sus socios, la paraguaya CIE y Power China, no presentaron una carta de solidaridad. A su vez, cuestionaron la oferta 17% más cara que la de Voith Hydro, que es constante en dólares pese a su alto contenido nacional, y avisaron que ellos también darán trabajo a argentinos y paraguayos, ya que no les resultaría económico construir en el exterior las turbinas.
La adjudicación de la obra no tiene fecha, pero sigue sumando polémicas. Días antes de la apertura de sobres, la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) descalificó a la empresa china Gezhouba, por contratar para asesoramiento a una empresa canadiense que había realizado los pliegos.