La Organización Panamericana de la Salud informó que Brasil, Colombia, Guatemala, Honduras y Nicaragua son algunos de los países más afectados por la extensión de este virus que transmite el mosquito ‘Aedes aegyptii’, que además es vector de la fiebre amarilla, zika y chikunguña, entre otras enfermedades.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) está en alerta por la proliferación del dengue en Latinoamérica, después de que registrara más de dos millones de casos de infectados por el virus en lo que va de año. La cifra supera a las de 2017 y 2018 aunque no llega aún a los niveles de 2016, cuando se desató el último gran brote en la región.
«Es una herramienta que se utiliza en la organización para avisar a los estados miembros en la región de las Américas de cualquier enfermedad que signifique una amenaza para la salud pública», explicó el doctor Miguel Aragón, consultor de enfermedades transmisibles de la OPS.
En la última actualización del mes de agosto, la OPS contabilizó 2.029.342 casos de la enfermedad en Latinoamérica y el Caribe, de los cuales 723 desembocaron en la muerte de los enfermos, apuntó Aragón en una entrevista con la agencia española Efe en Asunción del Paraguay.
Aragón señaló que el brote de dengue afectó especialmente a los países centroamericanos, dado que esa región experimentó un período más caluroso, aunque vaticinó que el número de casos se incrementará en el Cono Sur con la llegada de la primavera y del verano.
Brasil es el país que notificó un mayor número de infectados por el virus, con un total de 1.345.994 personas, mientras que Guatemala es el estado con un mayor porcentaje de letalidad, ya que el 0,32 por ciento de los diagnosticados falleció.
Hay al menos 5 tipos de la especie viral que causa el dengue, y desde la 2da Guerra Mundial hasta hoy, y ayudada por el recalentamiento global, se han extendido a 110 países, mayormente centroamericanos, sudamericanos y asiáticos, donde causan hasta 528 millones de casos por año, y entre 10 y 20.000 muertes. Los letales de dengue suelen ocurrir por sobreinfección cruzada, cuando el portador de anticuerpos contra un tipo de virus -es decir, un paciente curado- es picado por un mosquito que tiene alguno de los otros 4 tipos virales. La reacción inmunológica subsiguiente puede ser hemorrágica: reduce la cantidad de plaquetas en sangre, y simultáneamente hace que los capilares pierdan suero. La muerte puede sobrevenir entonces por shock: un descenso catastrófico de tensión circulatoria.
El consultor de la OPS advirtió que la expansión del virus está directamente relacionada con la situación de pobreza que atraviesan algunos países, ya que el control del medioambiente, el abastecimiento de agua o la gestión de las basuras condicionan la propagación del ‘Aedes aegyptii’.