La mayoría de los miembros del Grupo de Trabajo sobre Coronavirus de la Casa Blanca, que encabeza el vicepresidente Mike Pence, están de acuerdo en que los estadounidenses deberían comenzar a usar cubiertas para la cara en público y planean emitir pronto una orientación formal sobre el asunto.
El presidente Trump señaló que estaba abierto a la idea durante la conferencia de prensa del martes, y afirmó que se está trabajando para redactar recomendaciones sobre cómo diseñar las máscaras para evitar la propagación del virus.
La CNN dice que esos comentarios reflejan la creciente creencia de los funcionarios de que se necesita hacer más para prevenir la propagación del virus por personas infectadas que no muestran síntomas. Los expertos que los asesoran creen que una tela que cubre la nariz y la boca podría evitar que el virus llegue a otras personas.
Por su parte, la República Checa ya tomó la decisión: a través de su primer ministro, Andrej Babis, decretó la obligación de usar barbijos a todas las personas que salgan de sus casas. El gobierno lanzó una campaña bajo el eslogan #Masks4All (máscaras para todos).
En China, y en el Asia Oriental en general, no hay discusión: el uso de máscaras faciales es una costumbre socialmente aceptada. Se había extendido en las zonas urbanas, bien antes de la epidemia, debido a la contaminación del aire.
La reluctancia de la OMS para aconsejar el uso de los barbijos es atribuida a un problema de asignación de recursos: el organismo internacional teme que no haya suficientes para los médicos y el personal sanitario, que los necesitan en forma imprescindible.
Si esa es la objeción, no tiene fundamento. Los barbijos para el uso en la calle pueden hacerse en casa, en forma artesanal. Inclusive, se afirma que el plástico es mejor la tela para ese fin; menos permeable, y se desinfecta más fácil. De todas formas, la OMS agrega «solo son efectivos cuando se usan en combinación con un lavado de manos frecuente y adecuado», lo que es obvio.
En AgendAR creemos que este video, subtitulado en nuestro idioma, es de lo más claro que hemos visto. Precisamente porque el especialista coreano, el profesor Kim Woo-joo del Hospital Universitario Guro de la Universidad de Corea, presenta su caso sin énfasis, luego de mucha información relevante sobre los tratamientos para los enfermos, y está dirigido a los jóvenes y a quienes no presentan síntomas. Véanlo.