Todos los alumnos, a partir de primer grado, deberán usar un barbijo casero, que tape la nariz, la boca y el mentón. Será obligatorio adentro y afuera del aula. El distanciamiento social obligatorio será de 1,5 metros, sin excepción. No se podrán hacer actos, reuniones ni eventos, y, en el caso de confirmarse un caso positivo dentro de la escuela, se cerrará el establecimiento por un día para una exhaustiva desinfección. La cantidad de alumnos dentro del aula estará limitada por la relación entre su superficie y el metro y medio de separación obligatorio entre pupitres. Y para lograr una mejor dinámica en las clases, se propone el modelo de las aulas burbujas, con la idea de formar pequeños grupos de 2, 3 o 4 estudiantes, rompiendo con el esquema tradicional del salón con los alumnos sentados en fila y mirando al frente.
Esas son algunas de las pautas y recomendaciones que figuran en el protocolo nacional para el regreso presencial a las aulas, que presentó ayer el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta. El Consejo Asesor creado para tal fin fue el responsable de la redacción de las casi 70 páginas que tiene el documento, que será debatido para ser aprobado por el Consejo Federal de Educación en los próximos días, a más tardar la semana próxima: Normas y sugerencias en relación con la salud, la higiene y la seguridad.
También incluye posibles cambios en la arquitectura escolar, el funcionamiento de las universidades y de otros ámbitos como la ruralidad, la educación técnico profesional, las escuelas especiales y la actividad física, que fueron redactadas y consensuadas por un gran número de expertos y distintas organizaciones.
Se trata, según Trotta, de un piso mínimo y obligatorio que todos los establecimientos educativos deberán cumplir, a los que luego se le sumarán los protocolos particulares de cada provincia, jurisdicción y de las propias escuelas. «Desde hace más de un mes venimos pensando en el regreso a las aulas bajo la premisa del cuidado de la salud, y de la construcción de consensos. Para eso creamos el Consejo Asesor [a través de la resolución 423], en el que participan representantes de todos los sectores de la educación», señaló Trotta al inicio de la conferencia.
Lo acompañó durante las dos horas que duró el encuentro virtual el biólogo Diego Golombek, director del INET y responsable del consejo asesor. Los protocolos, según el científico, conforman un trabajo con lineamientos detallados y exhaustivos. Señalan, por ejemplo, la concentración y el porcentaje de lavandina que debe diluirse para desinfectar las superficies, y sugieren ideas como la de «dejar la puerta principal de acceso al baño siempre abierta, para que los chicos no tengan que tocar el picaportes en cada ocasión que van», dijo Golombek.
El documento prevé dos instancias: una previa a la apertura de los establecimientos, para garantizar las condiciones sanitarias, y otra que contempla el accionar cuando las escuelas estén en funcionamiento, siempre y cuando la situación epidemiológica de cada región lo permita. «Es un trabajo amplio, consensuado por los más diversos especialistas, plural, que busca derribar los lógicos temores y generar una conciencia colectiva de cuidados para disminuir las posibilidades de contagio», dijo Trotta. Y agregó: «Capacitar a los docentes, al personal docente y preparar a las familias para la vuelta a una escuela que no será la misma que en marzo requiere de cuidados específicos y normas nacionales. El sistema educativo moviliza a más de 15 millones de personas por lo que resulta definitorio el nivel de circulación del virus en cada lugar previo al regreso».
Por su parte, Golombek, señaló que es fundamental hacer la distinción entre protocolos que son obligatorios y recomendaciones, que serán adaptadas a cada jurisdicción. «También estamos trabajando en protocolos para aplicar en el transporte público y el escolar. La idea es retrasar un poco el horario de ingreso a la escuela para que no coincida con el pico laboral», explicó Trotta. «Además estamos analizando con el Ministerio de Salud para promover una campaña de vacunación contra la gripe en docentes y chicos, y elaboramos recomendaciones especiales para modalidades educativas específicas como la artística, educación técnico profesional (ETP), educación física, educación especial, en contextos de encierro y facultades de salud».
(Entre los participantes en la conferencia virtual se observó una aparente contradicción entre el nivel actual de contagios, que obliga a endurecer la cuarentena, y este protocolo para volver a las aulas. Desde AgendAR señalamos que el «pico» se registra, sobre todo, en el Área Metropolitana. El resto del país debe empezar a encarar este tema, sin apresuramientos.