Hace algo más de una semana fue publicado un estudio del Instituto de Cálculo de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA y del Conicet que indicaba que la suspensión de las clases presenciales reduce significativamente los contagios.
Como está en la tradición del debate público en nuestro país que los datos que no nos gustan deben ser falsos, este estudio fue ignorado o cuestionado. Incluso, algunos economistas y un ex ministro de Salud plantearon el hecho -obvio, por otra parte- que correlación no es causación. Es decir, que una cosa suceda al mismo tiempo que otra no demuestra que hay una relación de causa y efecto.
Pero nadie proporcionó otra hipótesis que explicara los datos. Y el aterrador aumento de contagios que vivimos hace que funcionarios y políticos le presten más atención al informe.
Reproducimos aquí en AgendAR la introducción y el acceso al informe íntegro, con sus correspondientes gráficos.
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«El presente informe, realizado por Guillermo Durán y Leonardo Boechi del Instituto de Cálculo y un grupo de investigadores del Instituto de Ciencias de la Computación, con la colaboración de colegas de diferentes instituciones universitarias y científicas del país, analiza el impacto de la presencialidad escolar sobre la pandemia en el ámbito del AMBA y consta de 3 partes:
1- Situación de la pandemia en la Provincia de Buenos Aires y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires producto de las últimas restricciones y en particular de la presencialidad o virtualidad de las clases.
En un contexto de alta cantidad de casos, la suspensión temporal de la educación presencial en el Conurbano a partir del DNU presidencial disminuyó la circulación viral comunitaria y produjo una disminución más veloz y pronunciada de la cantidad de casos confirmados en el Conurbano en comparación con CABA y el resto de la Provincia de Buenos Aires, donde se mantuvieron las clases presenciales.
2- Análisis sobre las métricas utilizadas en diferentes países para decidir la suspensión temporal de la presencialidad escolar
Se observa que la decisión de reiniciar clases presenciales con el comienzo del ciclo lectivo a fines de febrero y principios de marzo en CABA y PBA se realizó con niveles de incidencia compatibles con la escolaridad presencial según los criterios utilizados en algunos de los países analizados. En el momento del decreto presidencial que determinó la suspensión temporal de la presencialidad en CABA y el Conurbano, la incidencia se encontraba muy por encima de los niveles máximos sugeridos para escolaridad presencial en los países analizados.
3- Análisis pormenorizado de la bibliografía actualizada que analiza el impacto epidemiológico de la escolaridad presencial.
Existe evidencia científica internacional indicando que la suspensión de la presencialidad escolar puede ser una herramienta efectiva para disminuir la circulación comunitaria del virus, en particular cuando es combinada con medidas complementarias de intervención no farmacológica.
Para acceder al informe, cliquear en: Informe sobre el Impacto de la presencialidad escolar en los casos confirmados de COVID-19