A casi 80 años de su llegada al país, por primera vez Coca-Cola venderá una bebida con alcohol en el mercado argentino. Se trata de Topo Chico, una marca de la nueva categoría hard seltzer, que desembarcó sin hacer grandes anuncios en las góndolas de los comercios locales.
Topo Chico es una marca de origen mexicano, que cuenta con más de cien años de trayectoria. Originalmente, nació como una línea de agua mineral y el año pasado empezó a incursionar en la categoría de los hard seltzer. El lanzamiento en la Argentina forma parte de un desembarco a nivel regional y la bebida es fabricada en el país.
El lanzamiento de Topo Chico representa un hito para Coca-Cola Argentina que históricamente se resistió a incursionar en el negocio de las bebidas alcohólicas a nivel local, por más que sus principales embotelladores locales sí participan en este mercado. Es el caso de Femsa, la firma mexicana que en su país de origen es uno de los principales jugadores en el negocio de la cerveza.
“No hay mucho misterio. Todas las empresas de bebidas necesitan ajustar sus costos logísticos incorporando la distribución de nuevos productos, con lo cual es inevitable que de acá en más veamos muchos de este tipo de lanzamientos y alianzas entre empresas”, explicó el director de una compañía del rubro bebidas.
Categoría en ascenso
Los hard seltzer combinan agua con gas, jugo de frutas y alcohol, con una graduación menor al 5%. Un dato que puede mover la aguja para muchos: se trata de un producto light en todas las versiones disponibles, solo tiene 100 calorías por lata. Llega para competir con otras bebidas que frecuentemente se toman como refresco, como pueden ser las cervezas o los aperitivos. Incluso, algunos se animan a decir que puede batallar con las aguas tónicas.
Este producto nació en los Estados Unidos en 2013, y desde entonces crece a triple dígito anual (128%, interanual el último año), según la consultora Nielsen. Cada año se venden más de 100 millones de cajas: cada una representa 9 litros.
A nivel local, se trata de una categoría muy nueva y en la que participan dos grandes jugadores: la cervecera multinacional CCU (dueña de Heineken, Schneider) con la marca Hard Fresh y la empresa local Cepas, que lanzó Meet.