WASHINGTON.- Tras una internación de tres días, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dejó el hospital militar Walter Reed y regresó a la Casa Blanca, donde continuará con su recuperación del coronavirus. Su equipo ya comienza a afilar el «operativo regreso» a la campaña presidencial, y adelantó que Trump planea participar del segundo debate con su rival, Joe Biden, el 15 de octubre en Miami.
«¡Me siento realmente bien! No le tengan miedo a Covid. No dejen que domine su vida. Hemos desarrollado, bajo la Administración Trump, algunos medicamentos y conocimientos realmente excelentes. ¡Me siento mejor que hace 20 años!», tuiteó el mandatario, al anunciar su regreso a la Casa Blanca, que quedó doblegada y paralizada por una ola de contagios que sacudió a la administración trumpista.
Cerca del atardecer, Trump salió caminando del hospital, saludó a los periodistas que lo esperaban en la puerta y abordó el helicóptero Marine One para volar de regreso a la residencia oficial. Centenares de simpatizantes reunidos fuera del hospital celebraron su mejoría con aplausos, gritos, y con sus banderas en alto mientras el helicóptero presidencial ascendía y ganaba altura. Un pulido video de la Casa Blanca con imágenes de su retorno buscó aportarle un aura de épica al alta médica.
El polémico mensaje celebratorio de Trump para anunciar su mejoría y salida del hospital llegó cuando Estados Unidos superó las 210.000 muertes confirmadas por coronavirus, mientras el país se acerca a los más de 7 millones de contagios. En el hospital Walter Reed, Trump recibió además la mejor atención médica disponible, y fue sometido a un intenso tratamiento que incluyó un cóctel de anticuerpos experimental, el retroviral Remdesivir y un esteroide que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda solo para los casos más críticos, además de refuerzos de vitaminas y zinc para su sistema inmune.