«Mundo Atómico», un modelo de país que apostaba a la ciencia

0

Un excelente proyecto de universidades del conurbano bonaerense: recuperación y digitalización de la colección de revistas Mundo Atómico.

Mundo Atómico fue una revista de ciencia y tecnología editada por Haynes, que se publicó entre 1950 y 1955 con una atractiva propuesta gráfica y contenido nacional y popular. Como su perfil editorial era marcadamente peronista, su difusión se interrumpió con la Revolución Libertadora. El grupo Conusur, conformado por seis universidades nacionales, recuperó la colección con el objetivo de rescatar algunas de sus ideas. La revista –23 números de 100 páginas cada uno– es una joya de época. Una publicación que propone la idea de una “ciencia para el pueblo” y de un Estado interventor y rector de la política científica.

A menudo se suele citar a Bernardo Houssay como el único artífice de la consolidación de la ciencia en Argentina. Como desde su perspectiva la ciencia no necesariamente debía estar conectada con las necesidades del país, usualmente confrontó con las aspiraciones del gobierno peronista. En esa disputa, conforme transcurrió el tiempo, el debate quedó saldado en favor del Nobel. Cómo resultado, a menudo se olvida el enfoque que el gobierno de Juan Perón tuvo con respecto a la producción de conocimiento del país.

La antropóloga Alejandra Roca, profesora de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA y de la Universidad Nacional de José C. Paz, es una de las impulsoras del proyecto Mundo Atómico. La revista era desconocida. Estaba invisibilizada, nadie sabía nada», destaca en diálogo con Página/12. De hecho, quienes nos formamos en política científica, solemos aprender que el Conicet lo creó Houssay y que el peronismo directamente no había tenido política científica. Mundo Atómico sirve, precisamente, para demostrar una direccionalidad muy clara del gobierno de Perón para con la política en el sector”. Las revistas también están disponibles en Ahira: el Archivo Histórico de Revistas Argentinas ahira.com.ar/revistas/mundo-atomico

Roca desarrolla una hipótesis que podría explicar el olvido por parte de la comunidad de científicos y científicas de esta publicación. “Quizás nunca se le prestó demasiada atención porque era inaceptable para la comunidad científica que Perón tuviera grandes ideas para la ciencia. Durante su gestión se crearon o gestaron los organismos científicos que llegan hasta nuestros días”, observa. De hecho, durante la administración peronista se fundan las empresas públicas de petróleo, gas y transporte, y se crean organismos para investigar problemas concretos. 

Diego Hurtado, investigador del Conicet, físico e historiador de la ciencia y la tecnología, estudió el tema en profundidad. “La revista destinaba espacio a la fabricación nacional de instrumentos científicos. Había una industria nacional pujante, a partir de los planes quinquenales peronistas, que es retratada en la publicación”. Oceanografía, Antártida, ciencias biomédicas y deporte, ciencias de la tierra y recursos naturales: todo vinculado al modelo de país. Y agrega: “La idea de ciencia y tecnología para el pueblo; eso era Mundo Atómico, realmente una revista asombrosa”.

Entre 1950 y 1955, Mundo Atómico publicó 23 ejemplares de 100 páginas cada uno. Conusur, un consorcio de colaboración universitaria de ciencia, arte, tecnología, innovación y saberes del sur, se las ingenió para rearmar el rompecabezas. El espacio colaborativo, integrado por seis universidades conurbanas (José C. Paz, Quilmes, Hurlingham, Arturo Jauretche, Moreno y Avellaneda) adquirió la colección completa y creó un repositorio digital. La revista, que tenía una existencia fragmentada y sus números aparecían de manera desordenada en las bibliotecas de quienes resistían luego del 55, ahora es accesible.

Sobre el contenido, Roca destaca: “La revista disputa sentido con una academia que por aquel entonces era completamente eurocéntrica, elitista, encerrada en los problemas foráneos y no conectados con las demandas del país”. Y remata: “Es un ejemplo que deja en claro cuál era la mirada científica del peronismo. El Instituto Antártico fue el primero en el mundo, fuimos pioneros en un montón de sentidos y no lo tenemos tan en claro como deberíamos”.

El peronismo y la ciencia

“Uno tiende a pensar que el peronismo era reactivo a eventos científicos, congresos y simposios internacionales que se realizaban en el país. Y en verdad fue todo lo contrario. El propio Houssay en una correspondencia privada que pude ver decía: ‘Resulta extraña la cantidad de eventos internacionales que promueve este gobierno’. Mundo Atómico realiza crónicas de estos acontecimientos, que en general tienen alguna foto que muestra la presencia y el discurso de Perón o Evita”, detalla Hurtado.

Hay muchas declaraciones explícitas acerca de cómo el segundo plan quinquenal pensaba el rol del peronismo en el desarrollo de la universidad, en la matriz productiva del país. Sin ir tan lejos, destaca la creación de facultades al interior de la UBA y de la Universidad Obrera Nacional (más tarde devenida en la Universidad Tecnológica Nacional), con el propósito de conectar la producción de conocimiento con el modelo productivo de país. La evolución de la matrícula y de la inversión en el rubro a partir de la gratuidad (en 1949) es notable: si en 1940 a la UBA asistían 20 mil estudiantes, para 1952 ya eran 56 mil.

En uno de los números más recordados se muestra al avión Pulqui (el primero de Latinoamérica en su tipo), un emblema por aquel entonces de la industria nacional que se estaba desarrollando. Ilustraciones futuristas que permiten mirar desde un punto de vista peronista cómo serían las sociedades del porvenir atravesadas por ciencia y tecnología. “La tecnología era el símbolo de la entrada en el mundo moderno. Un proyecto de país que en el fondo disputa con el modelo agroexportador”, subraya Roca.

Mundo atómico es una joya de época. Una publicación que habla de política científica, cuando parecía que todavía no se había inaugurado el tiempo de discusiones de política científica. Tiempo después, a partir de los 60, con figuras como Bernardo Houssay y los debates acerca del modelo de ciencia y de país, que sostenía con referentes como Rolando García u Oscar Varsavsky, se daría un nuevo tono a las discusiones al respecto.

Interés nuclear

Se llama Mundo Atómico, en parte, porque tuvo mucho que ver con la creación de la Comisión Nacional de Energía Atómica (1950) y el empuje de la energía nuclear. Fue una herramienta de divulgación del clima de época, marcado por los grandes proyectos gubernamentales. En el mundo despuntaba una gran inversión de los Estados que veían la necesidad de apostar a la producción del conocimiento científico. A inicios de la Guerra Fría, EE.UU. y la URSS continuaban su enfrentamiento en el terreno científico. La carrera espacial, por ejemplo, fue un territorio de disputa fundamental para ambos bloques.

“La revista aparece unos años después de las bombas de Hiroshima y Nagasaki. Es natural que lo poco que conocía el mundo sobre la energía nuclear fuera su poder destructivo. Por eso, en cada número la publicación hizo énfasis en las aplicaciones pacíficas de la energía”, advierte Roca. Un esfuerzo por educar en las chances de aplicaciones valiosas para la energía atómica en el campo de la salud, la química y los alimentos. Discusiones de aquel entonces que también se reflotan en el presente. 

En 1955, Naciones Unidas desarrolló en Ginebra la Conferencia de usos pacíficos de la energía atómica y Argentina concurrió a ese encuentro con una delegación de casi 40 científicos, en un momento en que muy pocos países sabían de qué se trataba el asunto. Hurtado aclara: “No se llamó Mundo Atómico porque solo se dedicara a la energía atómica, sino por el sentido de futuro, por la promesa que traía el campo. Había notas escritas por los propios científicos o tecnólogos. Recuerdo un artículo de José Balseiro sobre rayos cósmicos, pero en general eran escritas por periodistas, especialistas en comunicación”.

“Apuesta a audiencias amplias, a diferencia de Ciencia e Investigación, revista editada por la Asociación Argentina para el Progreso de las Ciencias, que era muy dura y no era muy de divulgación que digamos”, compara el físico. En Ciencia e Investigación participaban Houssay y compañía. La grieta estaba planteada y los debates, por aquel entonces, también se expresaban en forma de revista. 

Trabajo de detectives

La colección entera no estaba en ningún lado; formaba parte de todos esos objetos materiales del peronismo que, después del golpe del 55, la gente prendía fuego, escondía, enterraba. Hubo una destrucción sistemática de esa memoria; de hecho, los militares al frente del gobierno de facto cambiaron el nombre a muchas instituciones científicas para que Perón no se llevara el crédito.

En este marco, Roca cuenta: “Fue un trabajo casi de detectives reunir los 23 números: colegas, maridos, gente entusiasmada que nos ayudó a recopilar todo. Hubo una búsqueda frenética, loca; estábamos muy tercos porque sabíamos que había un patrimonio que debíamos recuperar”. “La digitalización en alta calidad de todo el material fue un trabajo impresionante; es un archivo abierto”, destaca.

En la actualidad, cualquier usuario puede recorrer la colección. Aunque está accesible a cualquier persona, resulta de especial relevancia para los investigadores que quieran investigar el período, como una fuente de consulta autorizada. Ayuda a pensar, básicamente, que si a partir de los 60 las instituciones científicas adquirieron un lugar de creciente relevancia en la vida pública, fue gracias al caldo de cultivo que lo motorizó todo. 

Ese caldo de cultivo que habilitó el derecho a la ciencia fue el peronismo. 

Pablo Esteban

Una oportunidad estratégica que los aranceles de Trump abren para Argentina

Las decisiones que redefinen el lugar de una Nación en el mundo no siempre vienen anunciadas por los consensos, sino por las coyunturas inesperadas.

Hoy, una medida tomada por un país ajeno -el alza indiscriminada de aranceles impulsada por Donald Trump- afecta severamente a Japón, y sin proponérselo, crea una ventana estratégica para Argentina. Este nuevo contexto global obliga a Japón a diversificar mercados, acelerar su búsqueda de aliados confiables, y garantizar el abastecimiento seguro de alimentos, energía y minerales críticos.

La Argentina, está obligada a la redefinición de su modelo productivo y su inserción internacional, puede y debe ocupar ese espacio, no solo como proveedor, sino como socio tecnológico y estratégico. La historia no suele dar segundas oportunidades. Esta lo es. Esta propuesta no es un paper: es una hoja de ruta para actuar ya.

Abstract

La relación entre Japón y Argentina presenta una oportunidad estratégica única en un contexto global signado por la reconfiguración de las cadenas de valor y el resurgimiento del proteccionismo. Este artículo examina las complementariedades estructurales entre ambas naciones y propone una lectura actualizada de su vínculo, a la luz de los recientes cambios en la política comercial estadounidense bajo el liderazgo de Donald Trump. La suba de aranceles a las importaciones hacia Estados Unidos afecta particularmente a Japón y abre una ventana inesperada para redefinir alianzas económicas. Se plantea que Argentina, con su dotación de recursos naturales y necesidad de modernización tecnológica, puede ser un socio clave para Japón, mientras que la nación asiática puede convertirse en un inversor estratégico con capacidad de transferencia tecnológica. El texto propone una agenda bilateral proactiva basada en la cooperación soberana, la complementariedad productiva y la sustentabilidad.

Introducción

A lo largo del último siglo, la relación entre Argentina y Japón ha tenido momentos de acercamiento y distanciamiento, marcados por coyunturas políticas, económicas y culturales. Más allá de las fluctuaciones, ambas naciones comparten elementos de fondo que invitan a una articulación estratégica más profunda. Este artículo propone una lectura actualizada de las posibilidades de cooperación entre ambos países, subrayando la existencia de una oportunidad que surge de una coyuntura global inesperada: el giro proteccionista de los Estados Unidos bajo la presidencia de Donald Trump.

Complementariedades estructurales: más allá de los estereotipos

Argentina y Japón presentan economías no competitivas entre sí, sino complementarias. Japón requiere alimentos, energía y materias primas que Argentina posee en abundancia, mientras que Argentina necesita tecnología, innovación y financiamiento, todos ellos atributos presentes en el aparato productivo japonés. A esto se suma una afinidad cultural inesperada: el respeto por la naturaleza, el valor del trabajo y la apreciación por los vínculos afectivos son valores compartidos que pueden facilitar una cooperación de largo plazo.

Desde una perspectiva productiva, la combinación de la biotecnología agrícola argentina con la robótica japonesa ofrece un horizonte de innovación agroindustrial con impacto global. Lo mismo puede decirse del sector salud, donde la experiencia japonesa en longevidad saludable y tecnología médica puede aportar soluciones concretas a los desafíos del sistema de salud argentino.

Barreras históricas y desafíos compartidos

La distancia geográfica y la falta de una política de Estado sostenida han sido históricamente dos obstáculos para el desarrollo de una relación más intensa. A ello se suma una mirada occidentalizada de la política exterior argentina, que ha privilegiado su vínculo con Europa y Estados Unidos en detrimento de alianzas con Asia. En el caso japonés, su estrategia internacional ha estado centrada en Estados Unidos como socio comercial prioritario, lo que limitó su proyección hacia América Latina.

Sin embargo, el cambio en las dinámicas globales y el avance del multilateralismo, impulsado por las nuevas potencias emergentes, exige repensar las alianzas en clave de beneficio mutuo y complementariedad estructural.

Una oportunidad inesperada: el nuevo proteccionismo global y la ventana estratégica para Japón y Argentina

El escenario internacional actual ofrece, sin que haya sido su propósito original, una oportunidad inesperada para la profundización de los vínculos económicos y estratégicos entre Japón y Argentina. La reciente política arancelaria impulsada por Donald Trump, caracterizada por una suba generalizada de aranceles a las importaciones hacia los Estados Unidos -sin distinción entre aliados o competidores comerciales- afecta de forma directa a Japón, uno de los principales exportadores industriales del mundo. Esta redefinición proteccionista del comercio global impulsa a los países afectados a buscar alternativas en sus alianzas internacionales, reposicionando así a actores que tradicionalmente estuvieron en la periferia de sus estrategias de inserción global.

En este contexto, Argentina emerge como un socio potencial para Japón por múltiples motivos: la complementariedad estructural de ambas economías, la necesidad japonesa de diversificar sus destinos de exportación y abastecimiento de insumos estratégicos, y la capacidad argentina de ofrecer recursos alimentarios, energéticos y naturales en un contexto de creciente incertidumbre global.

Japón, al verse parcialmente excluido del mercado norteamericano, necesita activar nuevas rutas de comercialización y cooperación. Argentina, por su parte, requiere avanzar en un proceso de transformación productiva que incorpore tecnologías de última generación, cadenas de valor sustentables y un modelo de desarrollo menos dependiente de la exportación primaria sin agregación de valor. En este nuevo tablero geoeconómico, las inversiones japonesas pueden encontrar espacio en sectores clave de la economía argentina: minería sustentable, energías renovables, salud, movilidad eléctrica y agroindustria inteligente.

Lejos de representar un obstáculo, la imposición de barreras arancelarias por parte de Estados Unidos puede habilitar, paradójicamente, una dinámica de reconfiguración de alianzas estratégicas Sur-Sur y Este-Sur, que rescate la experiencia histórica compartida entre Japón y Argentina, pero que la proyecte hacia los desafíos del siglo XXI. Esta vez, sin tutelajes ni dependencias, sino en un esquema de cooperación soberana, tecnológica y sustentable.

Epílogo

La relación entre Japón y Argentina, anclada en una historia común de respeto mutuo y complementariedad productiva, enfrenta hoy una coyuntura global que puede convertirse en catalizadora de una nueva etapa. El giro proteccionista estadounidense, aunque adverso en principio, abre la posibilidad de pensar alianzas bilaterales que se inscriban en un nuevo paradigma geoeconómico. Aprovechar esta oportunidad requiere visión estratégica, voluntad política y capacidad de ejecución. Argentina y Japón tienen, en este cruce de caminos, la posibilidad de trazar una hoja de ruta conjunta hacia un desarrollo inclusivo, tecnológico y sustentable. El tiempo para actuar es ahora.

Argentina necesita dólares, inversión, tecnología, empleo exportador y previsibilidad. Japón necesita mercados seguros, acceso a alimentos y minerales estratégicos, y socios confiables en un mundo que se repliega.

La oportunidad está servidaFalta el actor que la tome con visión de Estado.

Esta es una propuesta para pasar de las relaciones protocolares a la estrategia binacional de desarrollo mutuo. No hay necesidad de inventar lo que ya existe: solo falta liderazgo.

Pablo Tigani

Director de Fundación Esperanza. Profesor de Posgrado en UBA y universidades privadas. Máster en Política Económica Internacional, Doctor en Ciencia Política, autor de seis libros.

ARC Energy construirá una nave industrial en el predio de IMPSA en Mendoza

0

La nave industrial, que fabricará equipamientopara la industria petrolera y energética, estará ubicada en el predio de IMPSA en Mendoza. Es el primer movimiento estratégico de ARC Energy tras adquirir la empresa mendocina en febrero. “El potencial de IMPSA como proveedor estratégico del sector del Oil & Gas es invaluable en todo el continente», dijo el presidente de ARC Enegy, Jason Arceneaux.

La empresa estadounidense ARC Energy anunciará un acuerdo con IMPSA para construir una nueva nave industrial en la provincia de Mendoza que será destinada principalmente a la fabricación de equipamiento para la industria del petróleo y gas. El presidente de ARC Enegy y director de IMPSA, Jason Arceneaux, había destacado en el Foro Económico Internacional de las Américas (IEFA) la importancia que tiene el desarrollo de Vaca Muerta en los planes de la compañía.

ARC Energy e IMPSA rubricarán una alianza estratégica para desarrollar una nueva nave industrial destinada a la fabricación de equipamientos y componentes para la industria petrolera y energética. La nave estará ubicada en el Centro de Desarrollo Tecnológico que IMPSA posee en Mendoza.

El acuerdo contempla una inversión conjunta que expandirá las capacidades fabriles de IMPSA en su predio en Mendoza, donde actualmente realiza trabajos para diversos actores de la industria petrolera, como YPF, para quien está desarrollando un horno especial de 178 toneladas destinado a la conversión de petróleo en gasoil.

Estrategia regional

El anuncio será el primer movimiento estratégico de ARC Energy tras la adquisición de IMPSA en febrero pasado, dentro de una estrategia más amplia que está implementando para fortalecer su posicionamiento en la región mediante alianzas y asociaciones estratégicas con actores regionales de primer nivel.

“El potencial de IMPSA como proveedor estratégico del sector del Oil & Gas es invaluable en todo el continente. Esta alianza estratégica será un catalizador para el crecimiento de ARC Energy en Argentina y en toda la región”, destacó Arceneaux.

“El capital humano con el que cuenta IMPSA en su Centro de Desarrollo Tecnológico en Mendoza posee una capacitación y especialización únicas en la región. Este será un diferencial clave al momento de proyectar esta alianza estratégica hacia nuevos mercados”, agregó.

Para desarrollar la estrategia en la Argentina, IMPSA acaba de designar a Pablo Magistocchi como Country Manager. Magistocchi es un ingeniero industrial de la Universidad Nacional de Cuyo y posee estudios de posgrado en Australia y Estados Unidos, donde recientemente culminó una maestría en Chief Sustainability Officer en el MIT.

«IMPSA es hidro»

Ademas de los planes en oil&gas, ARC Energy realizará una apuesta fuerte por el negocio hidroeléctrico. Arceneaux destaco en el foro IEFA las capacidades de IMPSA en la fabricacion de turbinas hidroelectricas. «Para mi, IMPSA es hidro, es top tres mundial», dijo.

Uno de los objetivos de ARC Energy es reactivar los contratos para la instalacion de turbinas en la represa de Tocoma en Venezuela y analizar las eventuales oportunidades en la Argentina.

«No soy experto en exportación hidroeléctrica, pero sin duda hay 6, 8, 10 o 12 proyectos hidroeléctricos que estan en renovaciones, y creo que muchos de ellos utilizan productos de IMPSA, así que estamos entusiasmados. Queremos involucrarnos a fondo», analizó.

Grúas pórtico y energía nuclear

Arceneaux también brindó algunos detalles sobre la eventual fabricación de grúas portuarias con destino a los Estados Unidos. «Las grúas se van a fabricar aquí en la Argentina, aproximadamente en un 60%, luego serían enviadas a la costa oeste, a El Salvador, para empaquetarlas y enviarlas a Estados Unidos», apuntó.

Por otro lado, el presidente de ARC Energy tambien habló de la relevancia de la energía nuclear. «El presidente Milei y el presidente Trump estan promocionando la energía nuclear. Pienso que es una de las mejores formas de energía sostenible. Es energía de base», dijo.

Nicolás Deza

Las firmas que manejan las exportaciones de granos y subproductos de Argentina

0

Viterra, Cargill y COFCO lideraron las ventas al exterior, casi el 40% de las exportaciones de granos y subproductos, en la campaña 2023/24, según un reporte de la Bolsa de Comercio de Rosario.

Con el cierre de la campaña 2023/24, la Bolsa de Comercio de Rosario [BCR] dio a conocer el ranking de las diez principales empresas exportadoras de granos y subproductos. El informe se basó en los registros de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) que permiten identificar tanto los volúmenes vendidos por cultivo como las compañías que lideraron las colocaciones externas durante el último ciclo. El total exportado del ciclo 2023/2024 se ubicó en 89,82 millones de toneladas de granos y subproductos

Viterra encabezó el ranking con 13,55 millones de toneladas registradas; fue la empresa con mayor participación en las exportaciones agroindustriales del ciclo. En segundo lugar se ubicó Cargill, con 11,37 millones de toneladas, seguida por COFCO, con 10,35 millones. “Estas tres compañías explican cerca del 39% del total anotado en exportaciones de los principales productos agroindustriales del ciclo 2023/24″, detalló el informe.

El top diez de exportadores se completó con Bunge, exportó 8,72 millones de toneladas, seguida por AGD con 8,65 millones, y LDC (Louis Dreyfus Company), que despachó 8,57 millones. Más abajo en el listado aparecieron ADM, con 8,04 millonesACA con 5,65 millones de toneladasMolinos Agro con 5,15 millones de toneladas, y CHS, que completó el grupo con 1,37 millones de toneladas.

El posicionamiento de cada empresa exportadora
El posicionamiento de cada empresa exportadoraBCR

Por otro lado se destacó el fuerte desempeño del complejo soja y maíz con niveles que superaron los promedios de campañas anteriores. “A partir de los registros de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE), se observa que del complejo soja se registraron 40,88 millones de toneladas, lo que representa 29% por encima del promedio de las últimas tres campañas”, precisó el informe de la BCR. En tanto, el maíz alcanzó 37,86 millones de toneladas declaradas, “superando en 16% el promedio trianual”.

La contracara fue el trigo, afectado por la sequía que golpeó la producción de la campaña 2022/23. “Con solo 3,62 millones de toneladas exportadas, las DJVE cayeron 61% respecto al ciclo previo y 70% frente al promedio de las últimas tres campañas”, señaló el informe. Esta fuerte caída también estuvo influida por la existencia de declaraciones “rolleadas” desde campañas anteriores, lo que distorsionó los registros.

La cebada se mantuvo estable, con 3,83 millones de toneladas, mientras que el girasol tuvo una mejora más marcada, alcanzando 2,37 millones de toneladas. Por último, el sorgo mostró un repunte importante con 1,26 millones de toneladas, aunque aún por debajo del promedio de las últimas tres campañas.

El informe también analizó el arranque del ciclo comercial 2024/25. Las ventas anticipadas, habituales en el sector, mostraron un ritmo más bajo que en campañas anteriores. “En comparación con las últimas cinco campañas, la proporción de ventas anticipadas para la campaña 2024/25 se encuentra en su nivel más bajo”, dijo la BCR.

Este comportamiento responde, según el análisis, a una combinación de factores: cambios en las condiciones macroeconómicas, eliminación de cupos de exportación y nuevas estrategias comerciales. “Más allá del costo financiero que implica un anote anticipado de DJVE´s, dejaron de regir los cupos de exportación que implicaban grandes distorsiones en el mercado de granos y una necesidad de asegurar cupos por parte de las empresas más allá de las decisiones en base al negocio”, indicó el documento.

Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior [DJVE] en la campaña 2023/2024
Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior [DJVE] en la campaña 2023/2024BCR

La dinámica habitual refleja que las empresas registran DJVE meses antes del inicio formal de cada campaña, aunque esto varía según el cultivo. “Específicamente, el ciclo comercial de trigo/cebada comienza en diciembre, girasol en enero, maíz/sorgo en marzo y soja en abril”, indicaron. A pesar del bajo nivel de ventas anticipadas, los registros van creciendo progresivamente a medida que se acerca cada cosecha y predominan los embarques cercanos.

La Bolsa rosarina concluyó que “los cambios en el contexto macroeconómico y de regulación terminan generando cambios en los incentivos y estrategias comerciales”, lo que explica el comportamiento más prudente de las exportadoras de cara al nuevo ciclo.

Por qué Rusia no está entre los países afectados por los aranceles de Trump. Comenta AgendAR

0

Un país que no figuró en la lista de aranceles de Donald Trump impuestos a los socios comerciales de EE.UU. fue Rusia.

El medio estadounidense Axios citó a la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, quien explicó que esto se debía a que las sanciones estadounidenses vigentes contra Rusia «impiden cualquier comercio significativo» y señaló que Cuba, Bielorrusia y Corea del Norte tampoco estaban incluidas.

Sin embargo, países con un comercio aún menor con EE.UU., como Siria, que exportó productos con valor de US$11 millones el año pasado, según datos de la ONU citados por Trading Economics, sí figuran en la lista.

EE.UU. impuso sanciones de gran escala a Rusia tras su invasión a Ucrania en 2022. Trump, en general, ha adoptado una actitud más amistosa hacia Rusia desde su regreso a la Casa Blanca.

Trump ha priorizado el fin de la guerra y un alto funcionario ruso se encuentra en Washington para reunirse con su administración, mientras continúan las negociaciones para un acuerdo.

El mes pasado, Trump amenazó con imponer un arancel del 50% a los países que compren petróleo ruso si el presidente, Vladimir Putin, no acepta un alto el fuego.

El jueves, medios rusos también afirmaron que el país no figuraba en la amplia lista de aranceles debido a las sanciones existentes.

«No se impusieron aranceles a Rusia, pero no por un trato especial. Es simplemente porque ya existen sanciones occidentales contra nuestro país», afirmó la cadena estatal Rossiya 24 TV.

Según su canal hermano, Rossiya 1, Rusia no figura en la lista «para decepción de muchos en Occidente».

TV rusa
Pie de foto,Algunos medios rusos adoptaron un tono burlón en su cobertura de las saciones de Trump.

Varios medios de comunicación controlados por el Kremlin se refirieron específicamente al secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, quien le dijo a Fox News: «No comerciamos con Rusia ni con Bielorrusia. Están sancionados».

Según la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos, el comercio entre Estados Unidos y Rusia alcanzó un valor de US$3.500 millones en 2024. Este comercio consistió principalmente en fertilizantes, combustible nuclear y algunos metales, según Trading Economics y medios rusos.

Los medios rusos adoptaron un tono burlón en su cobertura. El canal pro-Kremlin NTV afirmó que Trump trató a los aliados de Estados Unidos en Europa como «sirvientes» que solo responden «resoplando».

Muchos canales, como Zvezda TV, gestionada por el Ministerio de Defensa ruso, destacan la inclusión de las islas deshabitadas Heard y McDonald en la lista de aranceles.

«Parece que serán algunos pingüinos los que tendrán que pagar el arancel del 10%», declaró Zvezda.

Un arancel de 10% para Ucrania

aranceles de Trump
Pie de foto,El canal Rossiya 1 dijo que Rusia no figura en la lista de Trump «para decepción de muchos en Occidente».

Ucrania, mientras tanto, se enfrenta a un arancel del 10% sobre sus exportaciones a Estados Unidos.

La viceprimera ministra del país, Yulia Svyrydenko, afirmó que el nuevo arancel estadounidense afectaría principalmente a los pequeños productores.

También indicó que Ucrania estaba «trabajando para conseguir mejores condiciones».

En 2024, Ucrania exportó bienes por valor de US$874 millones a Estados Unidos e importó US$3.400 millones, según la viceprimera ministra.

«Ucrania tiene mucho que ofrecer a Estados Unidos como aliado y socio fiable», añadió. «Unos aranceles justos benefician a ambos países».

A pesar de la pequeña escala del comercio, Estados Unidos ha proporcionado un importante apoyo material en la guerra contra Rusia.

Trump ha argumentado que el país ha gastado entre US$300.000 millones y US$350.000 millones en dicha ayuda, mientras que el Departamento de Defensa estadounidense afirmó que se habían asignado US$182.800 millones —una cifra que cubre el entrenamiento militar estadounidense en Europa y la reposición de las reservas de defensa estadounidenses— para la Operación Atlantic Resolve.

Estados Unidos también ha estado intentando alcanzar un acuerdo para acceder a los minerales ucranianos como parte de las negociaciones para poner fin a la guerra.

Comentario de AgendAR:

La pregunta de la BBC se contesta fácil: el 20% del uranio enriquecido al 3,5% que queman los 94 complejos de centrales nucleares estadounidenses viene de… Rusia. La UE, Canadá, China y Japón no producen excedentes de este combustible. Por ende, no son plan B.

No hay plan B. EEUU hace tiempo que se abastece desde el extranjero, por ese verso del libre mercado de uranio enriquecido. La reserva estratégica local de uranio enriquecido a «grado central» de los EEUU puede aguantar unos meses, y después hay que empezar el «shutdown» escalonado de centrales nucleares de potencia en todo el país. Las redes eléctricas de EEUU no soportarían sin centrales: proveen el 20% de la electricidad «de base», la disponible 24x7x365.

Sin un piso nuclear, en EUU no hay luz, ni industria, ni Internet ni baile: se para el país en meses. Pero no sería un desastre en cámara lenta. Semanas antes, habría corrida bancaria y sálvese quien pueda. Si Putin se enoja en serio, EEUU entra en cadena de apagones, quiebras, cierres, despidos, rebeliones, saqueos y ley marcial.

No es política ficción, son sólo tres errores en cadena. El primero fue tener únicamente centrales nucleares de uranio enriquecido, y data de los años ’50. No fue un error inevitable, pero sí grave, o al menos, estúpido. Canadá, la India y Argentina siempre prefirieron el uranio natural, minado y hecho en casa, por si las moscas, como quiso el finado Jorge Sabato. Nuestras centrales con natural siempre han sido más seguras y baratas que las de enriquecido, según 7 décadas de estadísticas del Organismo Internacional de Energía Atómica de las Naciones Unidas. Pero eso no viene a cuento.

El segundo error de EEUU fue confiar, desde tiempos de Bush padre, en que el enriquecido civil, miles de toneladas/año importadas por EEUU, viniera desde afuera, siempre más barato que el local y tan asegurado por contrato como si se tratara de importar limones, bananas u otras commodities no estratégicas. Un error casi bananero, cuando hay más monos que bananas.

El tercer error fue extraordinariamente estúpido: los EEUU se metieron con el único gran proveedor de enriquecido del mercado nuclear mundial, Rusia. Rusia fue y es y será por décadas el enemigo equivocado. Lo es aunque la BBC prefiera cambiar de tema (en Inglaterra podrían tener el mismo problema que los novios de América).

Lo dicho: diga lo que digan y hayan dicho y dirán el sociólogo Julián Gadano, pope nuclear de Mauricio Macri, u hoy el Dr. Demián Reidel, el mesadinerista a cargo del Programa Nuclear Argentino, el combustible de las Atuchas y Embalse no es un commodity. Las bananas, los limones y la soja, tal vez. Y monos y mesadineristas aquí en el país hay de sobra. Pero Uranio tenemos más o menos el justo para 20 o 30 años de consumo interno.

El único sentido que tendría la exportación de su escaso uranio para la Argentina, sería venderlo con cuentagotas, enriquecido, transformado en elementos combustibles, con cuatro cifras de valor agregado encima. Y además caro, y por decisión y acción del estado argentino en los controles, terceros afuera, como en el box. Ningún canadiense o socio local dueño de Corporación América se ofenda.

Venderle caro a los EEUU lo que por al menos una década no tendrán. Elementos combustibles de uranio enriquecido hechos por CONUAR.

Eso es lo que deberíamos hacer si Trump logra enojar en serio al impasible Putin.

Daniel E. Arias

El hospital Garrahan recibió fondos internacionales para investigar sobre el cáncer de ojo infantil

0

En un contexto de ajuste brutal al Hospital Garrahan por parte del gobierno de Javier Milei, el nosocomio difundió la información sobre fondos internacionales a los que accedió para avanzar en investigación sobre el cáncer de ojo infantil.

El retinoblastoma es el tumor ocular más frecuente en pediatría. El financiamiento contribuye a profundizar las investigaciones que lleva adelante el Garrahan, uno de los principales centros pediátricos nacionales para el tratamiento de la enfermedad.

Subsidio internacional

El oftalmólogo Franco Benvenuto fue premiado con un subsidio por la Association for Research in Vision and Ophthalmology (ARVO) para llevar a cabo una innovadora investigación en el tratamiento del retinoblastoma, el tumor ocular con mayor incidencia en niños. En el mundo es de 1 caso cada 17 mil nacidos vivos y en Argentina por año se detectan entre 40 y 45 casos nuevos en menores de 15 años.

Se trata de un tumor de la retina en desarrollo, potencialmente mortal si no es diagnosticado y tratado a tiempo, pero que es altamente curable si los pacientes son diagnosticados en las primeras etapas de su desarrollo.

El subsidio adjudicado permitirá continuar los estudios de investigación traslacional que desarrolla el equipo de investigadores del Hospital hace más de dos décadas, en colaboración con investigadores de otros centros clínicos y académicos de nuestro país, Estados Unidos, España y Suiza.

El Garrahan recibió fondos para investigar el cáncer de ojo.
El retinoblastoma, uno de los tumores pediátricos más comunes.

Estudio clave

Este proyecto en particular evalúa el uso de gemcitabina, un quimioterápico utilizado actualmente para el tratamiento de otros tumores y que, según los estudios realizados en cultivos celulares tumorales en la Unidad de Tratamientos Innovadores del Garrahan, sería un agente activo contra la retinoblastoma.

El proyecto, liderado por Paula Schaiquevich, quien dirige la Unidad de Tratamientos Innovadores del Garrahan, busca evaluar la eficacia y seguridad de nuevos fármacos quimioterápicos que puedan ser administrados directamente en el ojo y que sean más eficaces y menos tóxicos que los tratamientos utilizados actualmente.

“Este subsidio es un reconocimiento al trabajo que venimos realizando en el Garrahan para mejorar la calidad de vida de los niños con cáncer”, afirmó Schaiquevich. “Estamos muy entusiasmados con este proyecto, que tiene el potencial de transformar el tratamiento del retinoblastoma y beneficiar a niños de distintos países del mundo”.

Cáncer de ojo

Benvenuto, el investigador joven del proyecto, destacó la importancia de esta investigación para los pacientes con retinoblastoma, especialmente aquellos que viven en países de bajos y medianos ingresos. “Este premio nos permitirá avanzar en el desarrollo de tratamientos más accesibles y efectivos para la enfermedad”, señaló.

El proyecto se llevará a cabo por especialistas de los servicios de Oftalmología, Unidad de Tratamientos Innovadores, Bioterio, Neurointervencionismo, Hematología-Oncología, Farmacia y Patología del Hospital, y con la colaboración externa de investigadores de la Universidad de Buenos Aires y del Hospital Jules Gonin de Suiza.

La ARVO es la organización mundial más importante en investigación ocular, cuenta con más de 10 mil profesionales de 75 países, y esta beca vincula a investigadores jóvenes de países en desarrollo con científicos expertos con el objetivo de fortalecer las capacidades de investigación oftálmica en todo el mundo.

La insólita fusión del Servicio Meteorológico y el Instituto Geográfico

0

Varios científicos y técnicos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), así como del Instituto Geográfico Nacional (IGN) y ATE SMN, advirtieron que el Ministerio de Defensa de la Nación avanza con su plan para fusionar y remover la autonomía de ambos organismos científicos.

Por su parte, el presidente del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Jorge Horacio Machuca, sostuvo que la propuesta del Gobierno de fusionar el organismo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) “adolece de serios vicios y falta de conocimiento”.

En una nota dirigida el viernes pasado al ministro de Defensa, Luis Petri; al ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger; al secretario de Transformación del Estado y Función Pública, Maximiliano Fariña; y al secretario de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa, Mario Katzenell, Machuca cuestionó que no fue consultado ni participó en la elaboración de la iniciativa, la cual rechaza enfáticamente.

El ministerio encabezado por Luis Petri habría enviado una “Propuesta de fusión” al Ministerio de Desegulación y Transformación del Estado, a cargo de Federico Sturzenegger, justificando su intención en seis puntos. Este archivo, según afirmaron trabajadores de ambas instituciones, fue enviado a toda la planta del SMN y del IGN. Este medio contactó a los dos ministerios para confirmar la existencia del documento con número 2025-32683028-APN-MD. Sin embargo, al cierre de esta nota, no recibió respuesta. Empleados de ambas instituciones aseguraron que el documento está público en el Sistema de Gestión Documental Electrónica (GDE) y que todo trabajador del Estado puede acceder a él.

Desde el sindicato ATE SMN explicaron que de esta propuesta se enteraron anteayer. Afirmaron que ayer se reunieron al mediodía con el director del SMN, Antonio Mauad, para recibir respuestas. Según detallaron, el funcionario no solo confirmó la información enviada a Desregulación y Transformación del Estado, sino que anunció que, ante una eventual fusión, él encabezaría la nueva institución. Además, contaron que en la reunión, Mauad se mostró tranquilo y prometió que no habría despidos. “Es claro que lo que buscan es recortar presupuesto y eliminar áreas administrativas”, argumentaron desde el sindicato.

Por su parte, desde el IGN también pidieron una reunión urgente con su director, Jorge Horacio Machuca. Sin embargo, está de viaje. Esperan que el viernes próximo puedan concretar el encuentro.

El documento señalado

Salvo una, el documento no profundiza mucho en las razones de la fusión. No obstante, las desglosa en los siguientes puntos: integración de información, porque según Defensa, la información que producen es complementaria; la mejora en la optimización y eficiencia de recursos; la mejora en la coordinación y toma de decisiones; la innovación y desarrollo tecnológico, y finalmente, el fortalecimiento institucional y su posicionamiento en el mundo. La última razón, que titularon “consideraciones presupuestarias” es el punto que más desglosaron en este documento.

Desde ATE lo explicaron de la siguiente manera: “Lo hacen porque es lo que la gente quiere escuchar. Que es un recorte presupuestario. Quieren demostrar que el golpe es a la ‘casta’”.

Varios científicos que trabajan en el SMN se expresaron en contra de la medida y advirtieron que esta intención lleva ya mucho tiempo rondando los pasillos de la institución meteorológica. También ponderaron que, desde un punto de vista científico, sería una decisión insensata.

“Es como juntar a un hospital con un laboratorio de química. En lo que ahorran es en la parte de contaduría, en todo lo paralelo”, explicó un empleado del SMN en estricto off the record. “El SMN es una institución 24/7, con turnos nocturnos, urgentes pedidos del Gobierno y usuarios, mientras que el IGN trabaja como una institución normal”, añadió.

Es por eso que, según técnicos de ambas instituciones científicas, no existe duplicidad en las tareas que desempeñan, algo que en el documento se expone como una de las razones de la fusión. “Lo que ellos hacen no lo hacemos nosotros. Y lo que hacemos nosotros no lo hacen ellos. Que usemos recursos que produce el IGN no significa que haya duplicidad de información”, describió una técnica del SMN. Este punto fue también confirmado por otra trabajadora del instituto geográfico.

Por otro lado, la presunta propuesta de fusión apunta a la búsqueda de mayor institucionalidad y posicionamiento internacional. “Pero nosotros ya somos muy reconocidos de forma internacional. Nuestra exdirectora, Celeste Saulo, es la primera secretaria general mujer y sudamericana de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Somos también la cabeza del Centro Regional de Formación de la OMM, también vamos a la cabeza del Centro Regional del Clima para el Sur de América del Sur (CRC-SAS) y muchas otras cosas más”, desglosó una científica del SMN.

Desde IGN no ven sentido a fusionarse para tener una mejor posición internacional. “En ningún lugar del mundo que yo conozca, estas instituciones están juntas. No se entiende muy bien”, argumentó una técnica del instituto.

Matías Avramow y Diego Yañez Martínez

La discreta inauguración de una obra que aumentará las exportaciones de petróleo

0

En una mañana soleada, los ejecutivos petroleros se reunieron para inaugurar la obra que permitirá solucionar el principal limitante que tenía hasta ahora Vaca Muerta: la falta de capacidad de evacuación. La empresa Oldelval, de la cual las propias productoras son accionistas, terminó las ampliaciones de transporte del oleoducto que conecta la cuenca neuquina con Bahía Blanca, que pasó de tener una capacidad de 400.000 a 540.000 barriles diarios.

A diferencia de otros tiempos políticos, no hubo discursos de funcionarios nacionales ni provinciales en el acto de inauguración, pese a que la obra demandó una inversión de US$1400 millones. Fue, de hecho, la obra con financiamiento privado más importante de los últimos 20 años. Tan solo estuvo la presencia de la secretaria de Energía, María Tettamani, pero los gobernadores de Río Negro y Neuquén, Alberto Weretilneck y Rolando Figueroa, respectivamente, estuvieron ausentes, al igual que el presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, que estaban de viaje en Estados Unidos.

Pese a ser días de preocupación para la industria, ya que el precio del barril de petróleo cayó 10 dólares en la última semana, de US$75 a US$65, en el sector remarcan que miran al largo plazo. Esta obra inaugurada permitirá que la Argentina siga aumentando sus exportaciones de petróleo, que actualmente están en torno a 190.000 barriles diarios. Las proyecciones para este año muestran un crecimiento hasta 272.000 barriles por día, lo que implicará un ingreso de divisas anual de US$6875 millones, a un precio del barril de US$69, según la consultora Economía y Energía (EyE).

Si bien en cantidades habrá un crecimiento de 45%, la caída de los precios internacionales ya es de más del 12% con relación a los valores que se esperan en promedio para este año, más cerca de US$69, cuando en 2024 promediaron los US$80. Por lo tanto, el total exportado de petróleo subiría 26% este año. “De no reducirse los precios del petróleo, las exportaciones de este producto habrían alcanzado US$7936 millones en el corriente año (más de US$1061 millones por encima del escenario base)”, dijo EyE.

Oldelval comenzó con las obras de ampliación del ducto en 2023, cuando las proyecciones de producción de petróleo en Vaca Muerta sorprendieron incluso a las propias empresas por los niveles de productividad que estaban teniendo. Era un panorama totalmente opuesto a 15 años atrás, cuando no se llegaba a los volúmenes mínimos de petróleo que técnicamente se debían transportar por el ducto.

La cuenca neuquina creció a pasos acelerados en este tiempo. En 2021, se producían 280.000 barriles diarios en Vaca Muerta y para este año se espera que se alcancen los 580.000 barriles, aunque las estimaciones podrían modificarse al alza con la mayor capacidad de transporte. De ese total, se espera que por el ducto de Oldelval se transporten 450.000 barriles diarios para fin de año y se llegue a 540.000 a finales de 2026.

Desde Vaca Muerta también se exportan alrededor de 94.600 barriles diarios a Chile por el Oleoducto Trasandino (Otasa), que tiene una capacidad total de 110.000 barriles diarios. Luego están los barriles de crudo que se transportan a la refinería de YPF de Luján de Cuyo, en Mendoza.

Hasta hace unos meses, debido a la falta de capacidad de transporte, había empresas que debían transportar el petróleo de exportación por camiones desde Neuquén a Buenos Aires, lo cual era hasta seis veces más caro: costaba alrededor de US$10 el barril en camión frente a US$1,5 por el oleoducto.

Para los próximos años se espera la construcción de más kilómetros de ducto. Oldelval tiene en carpeta dos proyectos más que se acogerán al Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI). Uno se llamará Duplicar X, que demandará una inversión de US$400 millones para ampliar la capacidad de transporte de Vaca Muerta a Bahía Blanca de los actuales 540.000 barriles diarios a 670.000 para 2027, contó el CEO de la empresa, Ricardo Hösel.

El segundo proyecto se llama Duplicar Norte, que demandará una inversión de US$300 millones y que servirá para bajar desde el norte de Neuquén a Allen, en Río Negro, la producción de los yacimientos petroleros que entrarán en desarrollo masivo en los próximos meses: Bajo del Choique (Pluspetrol), Los Toldos II Este (Tecpetrol) y La Escalonada (TotalEnergies).

La obra fue construida por las contratistas Techint-Sacde y por la neuquina OPS, que a su vez estuvo a cargo de la instalación de las ocho estaciones de bombeo; los tubos se compraron a Tenaris
La obra fue construida por las contratistas Techint-Sacde y por la neuquina OPS, que a su vez estuvo a cargo de la instalación de las ocho estaciones de bombeo; los tubos se compraron a TenarisGentileza: Oldelval

Adicionalmente, está el proyecto Vaca Muerta Oil Sur (VMOS), que conectará la formación con la terminal de exportación en Río Negro. Se espera que el oleoducto esté operativo a fines de 2026 y que comience a transportar 180.000 barriles diarios. A partir del segundo semestre de 2027, en tanto, el VMOS permitirá transportar hasta 500.000 barriles por día, con la posibilidad de incrementar la capacidad a 700.000 si fuese necesario.

La industria en su conjunto espera producir 1,5 millones de barriles diarios en Vaca Muerta para 2030, de los cuales se exportarán alrededor de un millón, lo que implicará ingresos anuales de divisas por al menos US$21.600 millones, con un precio promedio del barril de petróleo de US$60.

Obra inaugurada

La empresa Oldelval construyó un ducto nuevo en paralelo al original, que se había inaugurado hace 60 años. La obra se llama Duplicar, ya que permitió aumentar la capacidad original de transporte de 225.000 barriles diarios a los actuales 540.000.

“Duplicar fue una obra de extraordinarios desafíos que atravesó ríos, rutas y demás interferencias y que fue concretada en 24 meses, antes de lo comprometido y con excelentes índices de seguridad de las personas”, dijeron en Oldelval, de la cual son accionistas YPF (37%), Pluspetrol (33%), Chevron (14%), Pan American Energy (12%), Tecpetrol (2%) y Pampa Energía (2%).

La industria en su conjunto espera producir 1,5 millones de barriles diarios en Vaca Muerta para 2030, de los cuales se exportarán alrededor de un millón
La industria en su conjunto espera producir 1,5 millones de barriles diarios en Vaca Muerta para 2030, de los cuales se exportarán alrededor de un millón

El nuevo ducto tiene una traza de una longitud de 525 kilómetros y atraviesa las provincias de Río Negro, La Pampa y Buenos Aires. Fue construida por las contratistas Techint-Sacde y por la neuquina OPS, que a su vez estuvo a cargo de la instalación de las ocho estaciones de bombeo.

El oleoducto tiene como destino final el Puerto Rosales, que opera la empresa Oiltanking, donde tiene los tanques de almacenamiento, y al Puerto Galván, que opera Trafigura, dueña de las estaciones de servicio Puma Energy. Este último puerto se incorporó tras una inversión de US$30 millones, que financió Trafigura y que permitirá sumar otro punto de exportación en Buenos Aires.

El total de la obra costó US$1400 millones, alrededor de US$200 millones más de lo estimado inicialmente debido al encarecimiento de los costos de construcción por la apreciación cambiaria. En el proyecto se involucraron más de 2400 trabajadores directos y más de 6000 indirectos.

Sofía Diamante

China quiere construir antes de 2030 la primera central híbrida de fusión y fisión nuclear

0

China quiere construir antes de 2030 algo que nadie ha conseguido todavía: la primera central híbrida de fusión y fisión nuclear del mundo.

Su nombre es Fusion Experimental Breeder (FEB) y su meta es revolucionar la forma de generar energía nuclear. Pero, ¿qué significa «híbrida»? Esta central combinará la fusión nuclear, la reacción que hace brillar al Sol, con la fisión, la que ya usamos en las centrales actuales.

Sin embargo, no utilizará la fusión para generar electricidad, sino para producir algo incluso más valioso: neutrones de alta energía. Aquí surge la pregunta clave: ¿por qué usar fusión si todavía no está lista para generar electricidad? La respuesta es que este diseño no busca obtener energía directamente de la fusión, sino aprovechar una capacidad que sí podemos controlar ya: la producción de neutrones. Estos neutrones sirven para transformar materiales fértiles en combustibles útiles, como el plutonio-239, y además ayudan a reciclar residuos radiactivos. Así, se aprovecha una ventaja parcial de la fusión, sin depender de que esté completamente desarrollada para generar electricidad.

Estos neutrones son capaces de transformar el uranio-238, un material muy abundante pero no fisionable, en plutonio-239, que sí puede fisionar y generar energía. El proceso es sencillo: el neutrón generado por la fusión es capturado por el uranio-238, que se convierte en uranio-239. Este se transforma rápidamente en neptunio-239 y finalmente en plutonio-239, que actúa como nuevo combustible. De este modo, la central puede fabricar su propio combustible mientras genera electricidad, reduciendo a la vez la cantidad y peligrosidad de los residuos nucleares, ya que permite reciclar materiales que de otro modo serían desechos. El proyecto será desarrollado por la Southwestern Institute of Physics (SWIP) y la China National Nuclear Corporation (CNNC) en Chengdu, Sichuan. El reactor piloto tendrá una potencia de 60 MW y un presupuesto de 2760 millones de dólares. Si tiene éxito, China espera construir reactores híbridos comerciales de hasta 1000 MW a partir de 2040.

Los aranceles de Trump ya destruyeron un orden global. Exploramos su reemplazo

0

El artículo que reproducimos aquí está circulando en muchos, muchos grupos de whatsapp. Lo merece. Es un análisis inteligente y realista, de los motivos y los riesgos detrás de las medidas de Trump.

Pero… está escrito desde la percepción y los intereses de los Estados Unidos. Nosotros necesitamos leerlo desde nuestro lugar en el mapa, el «extremo Sur».

Porque desde EE.UU., la situación está clara: Donald Trump quiere reindustrializar a su país, recuperar las empresas, y los empleos industriales, que emigraron en busca de costos de producción más baratos -salarios bajos, menos cuidado del ambiente,… Una emigración que se intensificó desde los ´90 del siglo pasado.

Para conseguir eso, recurre a una herramienta tradicional: el proteccionismo, que han usado todos los países -incluso EE.UU., por supuesto- para desarrollar sus industrias. Hasta Inglaterra, cuna de la Revolución Industrial; el Acta de Navegación de Cromwell de 1651, y no es el ejemplo más antiguo.

Los aranceles, entonces, tienen una misión muy sencilla: si en otro país se producen mercaderías más baratas, el arancel las encarece para los consumidores locales. Hasta que, se espera, los productos nacionales les resulten más baratos, aunque el costo de producirlos en el propio país sea más alto.

La función proteccionista se hace más evidente al ver que la fórmula para calcular aranceles para cada país -además del universal 10%- se calcula tomando en cuenta el déficit que tiene EE.UU. en el intercambio con esa nación (al margen de bloopers burocráticos).

No. El objetivo de las «tarifas» de Trump no es geopolítico. Es comercial, es decir, proteccionista.

Por eso el promedio general de los aranceles estadounidenses se calcula ahora en un 22%, un nivel que no se alcanzaba desde 1910, cuando todavía pensaban que debían proteger su industria.

Thomas Friedman, el autor de este artículo, lo entiende perfectamente. Pero advierte que la ventaja de China ya no son los costos de producción bajos. Ahora es la tecnología, y el dinamismo de sus empresarios.

Lean la nota. Al final, algunas observaciones sobre su posible significado para Argentina.


ooooo

«El otro día en Shanghái, tenía que elegir: ¿Qué Tomorrowland visitar? ¿Echaba un vistazo al Tomorrowland falso, de diseño estadounidense, en Disneyland Shanghái, o visitaba el auténtico Tomorrowland: el enorme nuevo centro de investigación, del tamaño de aproximadamente 225 campos de fútbol, ​​construido por el gigante tecnológico chino Huawei? Fui al de Huawei.

Fue fascinante e impresionante, pero en última instancia profundamente inquietante, una vívida confirmación de lo que me dijo en Pekín un empresario estadounidense que ha trabajado en China durante varias décadas. «Hubo una época en que la gente venía a Estados Unidos para ver el futuro», dijo. «Ahora vienen aquí».

Nunca había visto un campus como este de Huawei. Construido en poco más de tres años, consta de 104 edificios de diseño individual, con jardines impecables, conectados por un monorriel al estilo Disney, que alberga laboratorios con capacidad para 35.000 científicos, ingenieros y otros trabajadores, además de 100 cafeterías, gimnasios y otras ventajas diseñadas para atraer a los mejores tecnólogos chinos y extranjeros.

El campus de I+D del lago Lianqiu es básicamente la respuesta de Huawei al intento de Estados Unidos de asfixiarlo a partir de 2019, restringiendo la exportación de tecnología estadounidense, incluidos semiconductores, a Huawei por motivos de seguridad nacional. La prohibición le causó enormes pérdidas a Huawei, pero con la ayuda del gobierno chino, la empresa buscó innovar para superarnos. Como informó el periódico surcoreano Maeil Business el año pasado, eso es precisamente lo que ha estado haciendo: «Huawei sorprendió al mundo con la presentación de la serie ‘Mate 60’, un smartphone equipado con semiconductores avanzados, el año pasado, a pesar de las sanciones estadounidenses». Huawei siguió con el primer smartphone triple plegable del mundo y presentó su propio sistema operativo móvil, Hongmeng (Harmony), para competir con los de Apple y Google.

La empresa también se dedicó a crear tecnología de IA para todo tipo de aplicaciones, desde vehículos eléctricos y coches autónomos hasta equipos de minería autónomos que pueden sustituir a los mineros humanos. Según funcionarios de Huawei, solo en 2024 se instalaron 100.000 cargadores rápidos en China para sus vehículos eléctricos. En cambio, en 2021 el Congreso estadounidense destinó 7500 millones de dólares a una red de estaciones de carga, pero en noviembre esta red solo contaba con 214 cargadores operativos en 12 estados.

Da mucho miedo verlo de cerca. El presidente Trump se centra en los equipos en los que pueden competir los atletas transgénero estadounidenses, y China se centra en transformar sus fábricas con IA para superar a todas las nuestras. La estrategia del “Día de la Liberación” de Trump consiste en redoblar los aranceles mientras desmantela nuestras instituciones científicas nacionales y la fuerza laboral que impulsan la innovación estadounidense. La estrategia de liberación de China consiste en abrir más campus de investigación y redoblar los esfuerzos en la innovación impulsada por IA para liberarse permanentemente de los aranceles de Trump.

El mensaje de Pekín a Estados Unidos: No les tenemos miedo. Ustedes no son quienes creen ser, y nosotros no somos quienes creen ser.

¿A qué me refiero? Prueba A: En 2024, The Wall Street Journal informó que las ganancias netas de Huawei aumentaron más del doble el año pasado, lo que marca una recuperación espectacular, impulsada por nuevo hardware que funciona con chips de fabricación propia. Prueba B: The Journal citó recientemente al senador republicano Josh Hawley, quien dijo sobre China: “No creo que puedan innovar mucho por sí solos, pero lo harán si seguimos compartiendo toda esta tecnología con ellos”.

Algunos de nuestros senadores necesitan salir más a la luz. Si eres legislador estadounidense y quieres atacar a China, adelante; incluso podría unirme a ti en una ronda, pero al menos investiga. Hay muy poco de eso en ambos partidos hoy en día y demasiado consenso en que el espacio políticamente seguro es atacar a Pekín, corear unas cuantas rondas de “USA, USA, USA”, decir lugares comunes como que las democracias siempre innovarán más que las autocracias y dar por terminado el asunto.

Prefiero expresar mi patriotismo siendo brutalmente honesto acerca de nuestras debilidades y fortalezas, las debilidades y fortalezas de China y por qué creo que el mejor futuro para ambos, en vísperas de la revolución de la IA, es una estrategia llamada: Hecho en Estados Unidos por trabajadores estadounidenses en asociación con capital y tecnología chinos.

Déjame explicarte.

El pensamiento mágico de Trump

Estuve de acuerdo con Trump respecto a sus aranceles a China durante su primer mandato. China estaba impidiendo el acceso a ciertos productos y servicios estadounidenses, y debíamos tratar los aranceles de Pekín de forma recíproca. Por ejemplo, China se retrasó durante años en permitir el uso de tarjetas de crédito estadounidenses en China, esperando hasta que sus propias plataformas de pago dominaron por completo el mercado y la convirtieron en una sociedad sin efectivo, donde prácticamente todos pagan todo con aplicaciones de pago móvil en sus teléfonos. Cuando fui a usar mi tarjeta Visa en una tienda en una estación de tren de Pekín la semana pasada, me dijeron que tenía que estar vinculada a una de esas aplicaciones, como Alipay o WeChat Pay de China, que, en conjunto, tienen una cuota de mercado de más del 90%.

Incluso estoy de acuerdo con Trump en que imponer aranceles adicionales —selectivos— a las puertas traseras de China hacia Estados Unidos a través de México y Vietnam podría ser útil, pero sólo como parte de una estrategia más amplia.

Una línea de producción de lentes de contacto en Lianyungang
Una línea de producción de lentes de contacto en LianyungangSTR – AFP

Mi problema es con el pensamiento mágico de Trump de que basta con levantar muros de protección alrededor de una industria (o de toda nuestra economía) y —¡listo!— en poco tiempo, las fábricas estadounidenses florecerán y producirán esos productos en Estados Unidos al mismo costo y sin ninguna carga para los consumidores estadounidenses.

Para empezar, esa perspectiva ignora por completo que prácticamente todos los productos complejos actuales —desde automóviles hasta iPhones y vacunas de ARNm— se fabrican en ecosistemas de fabricación gigantescos, complejos y globales. Por eso, esos productos mejoran y se abaratan cada vez más. Claro, si se protege la industria siderúrgica, un producto básico, nuestros aranceles podrían ser de gran ayuda. Pero si se protege la industria automotriz y se cree que con solo imponer un muro arancelario se solucionará, no se sabe nada de cómo se fabrican los automóviles. A las empresas automotrices estadounidenses les llevaría años reemplazar las cadenas de suministro globales de las que dependen y fabricar todo en Estados Unidos. Incluso Tesla tiene que importar algunas piezas.

Pero también te equivocas si piensas que China solo hizo trampa para alcanzar el dominio mundial de la manufactura. Sí que hizo trampa, copió e impuso transferencias de tecnología. Pero lo que hace tan poderoso al gigante manufacturero chino hoy en día no es solo que abarate las cosas; las hace más baratas, más rápidas, mejores, más inteligentes y cada vez más dotadas de IA.

Dentro del club de fitness de China

¿Cómo? Jörg Wuttke, expresidente durante muchos años de la Cámara de Comercio de la UE en China, lo llama “el club de fitness de China”, y funciona así:

China comienza con un énfasis en la educación STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Cada año, el país produce unos 3,5 millones de graduados en STEM, aproximadamente el mismo número de graduados de programas de grado asociado, licenciatura, maestría y doctorado en todas las disciplinas en Estados Unidos.

Cuando se cuenta con tantos graduados en STEM, se puede aportar más talento que nadie a cualquier problema. Como informó el año pasado Keith Bradsher, jefe de la oficina del Times en Pekín : “China cuenta con 39 universidades con programas para formar ingenieros e investigadores en la industria de las tierras raras. Las universidades de Estados Unidos y Europa, en su mayoría, solo han ofrecido cursos ocasionales”.

Y aunque muchos ingenieros chinos no se gradúen con habilidades del MIT, los mejores son de clase mundial, y hay muchos. Hay 1400 millones de personas allí. Eso significa que en China, cuando eres un talento excepcional, hay otras 1400 personas como tú.

Igualmente importante, las escuelas profesionales chinas gradúan a decenas de miles de electricistas, soldadores, carpinteros, mecánicos y fontaneros cada año. Así, cuando alguien tiene una idea para un nuevo producto y quiere montar una fábrica, esta se construye rapidísimo. ¿Necesitas un botón rosa de lunares que cante el himno nacional chino al revés? Alguien aquí te lo traerá mañana. Y además, te lo entregarán rápido. Más de 550 ciudades chinas están conectadas por trenes de alta velocidad que hacen que nuestro Amtrak Acela parezca el Pony Express.

Y cuando digitalizas y conectas todo con todo sin descanso, puedes entrar y salir de tu habitación de hotel rápidamente con solo reconocimiento facial. Los mendigos expertos en tecnología que llevan impresos códigos QR pueden aceptar donaciones rápidamente con solo escanear un celular. Todo el sistema está configurado para la velocidad, incluso si desafías el gobierno del Partido Comunista, en cuyo caso, serás arrestado rápidamente, dadas las cámaras de seguridad por todas partes, y desaparecerás rápidamente.

Si no construimos un club de fitness similar tras un muro arancelario, solo tendremos inflación y estancamiento. No se puede acceder a la prosperidad mediante aranceles, especialmente en los albores de la IA.

También estuve en China hace apenas cuatro meses. Desde entonces, los innovadores chinos en IA han demostrado su capacidad para desarrollar su propio motor de IA de código abierto, DeepSeek, con muchos menos chips estadounidenses especializados. Podía sentir el impulso en la comunidad tecnológica. Era palpable. El mes pasado, el primer ministro Li Qiang declaró en la ceremonia inaugural de la Asamblea Popular Nacional que el gobierno chino apoya “la aplicación extensiva de modelos de IA a gran escala”.

Un auto eléctrico de la nueva marca Zeekr en Ningbo, China
Un auto eléctrico de la nueva marca Zeekr en Ningbo, ChinaGILLES SABRIE – NYTNS

Un joven ingeniero automotriz chino que trabajó para Tesla me dijo: «Ahora todos compiten por la cantidad de IA que se está implementando. Ahora presumen de la cantidad de IA que implementan. Todos están comprometidos. «Usaré IA, aunque no sepa cómo ahora mismo». Se están preparando para eso, incluso si están en una simple línea de producción de refrigeradores. «Tengo que usar IA, porque mi jefe me lo dijo»“.

Atención, compradores de Kmart: cuando ya se tiene un motor de fabricación tan potente y conectado digitalmente como el de China y luego se le infunde IA en todos los niveles, es como inyectar un estimulante que puede optimizar y acelerar cada aspecto de la fabricación, desde el diseño hasta las pruebas y la producción.

No es un buen momento para que los legisladores estadounidenses eviten visitar China por temor a que los llamen “abrazadores de pandas”.

Como me explicó Han Shen Lin, estadounidense que trabaja como director nacional de China para el Grupo Asia, durante un desayuno en el Hotel Peace de Shanghái: “DeepSeek no debería haber sido una sorpresa”. Sin embargo, continuó, con todas las nuevas restricciones estadounidenses a la inversión extranjera y los desincentivos para la colaboración, ahora ignoramos los avances tecnológicos de China. China está definiendo los estándares tecnológicos del futuro sin la participación de Estados Unidos. Esto nos colocará en una grave desventaja competitiva en el futuro.

Pekín no quiere una guerra comercial

A pesar de todas sus fortalezas, China no desea una guerra comercial con Estados Unidos. Mucha gente de clase media en China está descontenta actualmente. Durante más de una década, muchos chinos invirtieron su dinero en comprar departamentos en lugar de depositar sus ahorros en bancos que prácticamente no pagaban intereses. Esto creó una enorme burbuja inmobiliaria. Mucha gente la aprovechó y luego la deprimió cuando el gobierno restringió los préstamos inmobiliarios en 2020.

Una fábrica de VolksWagen en China
Una fábrica de VolksWagen en ChinaShutterstock – Shutterstock

Así que están acumulando dinero porque sus ganancias inmobiliarias se han esfumado, pero los pagos de pensiones y atención médica del gobierno son escasos. Todos tienen que ahorrar para imprevistos.

Como acaba de informar mi colega Keith Bradsher, la desaceleración económica está privando al gobierno de Pekín de los ingresos fiscales que necesita para estimular la economía y subsidiar “las industrias exportadoras que impulsan el crecimiento económico pero que podrían verse perjudicadas por los aranceles”.

En resumen, el club de fitness de China es fantástico, pero Pekín todavía necesita un acuerdo comercial con Trump que proteja su motor exportador.

Nosotros también. Sin embargo, Trump se ha convertido en un actor tan impredecible, cambiando políticas a cada hora, que los funcionarios chinos se preguntan seriamente si podrán llegar a un acuerdo con él que respete.

Michele Gelfand, experta en negociación de la Universidad de Stanford, afirmó: “Los defensores de Trump argumentan que su imprevisibilidad desequilibra a sus oponentes. Pero los grandes negociadores saben que la confianza, no el caos, es lo que genera resultados duraderos. El enfoque de Trump, basado en ganar-perder, para negociar es un juego peligroso”. Añadió: “Si continúa tratando imprudentemente a los aliados como adversarios y a las negociaciones como campos de batalla, Estados Unidos se arriesga no solo a malos acuerdos, sino a un mundo en el que no nos quede nadie con quien negocia”.

En mi opinión, el único acuerdo beneficioso para todos es el que yo llamaría: “Hecho en Estados Unidos, por trabajadores estadounidenses, en colaboración con tecnología, capital y expertos chinos”. Es decir, simplemente revertimos la estrategia que China utilizó para enriquecerse en la década de 1990, que era: “Hecho en China, por trabajadores chinos, con tecnología, capital y socios estadounidenses, europeos, coreanos y japoneses”.

Así me lo explicó Jim McGregor, consultor empresarial que vivió en China durante 30 años: “Las grandes multinacionales estadounidenses solían ir a China y crear una empresa conjunta con una empresa china para entrar en el mercado chino. Ahora, las empresas extranjeras vienen a China y les dicen a las multinacionales chinas: si quieren entrar en Europa, creen una empresa conjunta conmigo y traigan su tecnología”.

En un cruce de calles de la ciudad de Xiangyang, una pantalla exhibe a los conductores imprudentes, localizados con tecnología de identificación facial
En un cruce de calles de la ciudad de Xiangyang, una pantalla exhibe a los conductores imprudentes, localizados con tecnología de identificación facialGilles Sabrie/NYT – NYTNS

Deberíamos combinar cualquier arancel a China con una bienvenida a las empresas chinas para que ingresen al mercado estadounidense mediante la licencia de sus mejores innovaciones manufactureras a empresas estadounidenses o asociándose con ellas y creando fábricas de manufactura avanzada en empresas conjuntas al 50%. Sin embargo, se debería exigir a las empresas conjuntas chinas en Estados Unidos que aumenten progresivamente la proporción de piezas que obtienen localmente, en lugar de simplemente importarlas indefinidamente.

Esto, por supuesto, requeriría un esfuerzo enorme para reconstruir la confianza, que ahora está casi totalmente ausente en la relación. Es la única manera de lograr un comercio razonablemente beneficioso para ambas partes. Sin ella, nos encaminamos a una situación de pérdidas. Por ejemplo, el 19 de marzo, el Senado de Texas dio la aprobación inicial a un proyecto de ley que prohibiría a los residentes y organizaciones con sede en China, Irán, Corea del Norte y Rusia poseer propiedades en Texas. Incluir a China en esa lista es una tontería: prohibimos la entrada de algunas de las mentes más brillantes del mundo en lugar de ofrecerles incentivos y condiciones para invertir en Texas.

¿Cuándo nos asustamos tanto? ¿Y cuándo perdimos de vista el mundo en el que vivimos? Pueden denunciar el globalismo todo lo que quieran, pero eso no cambiará el hecho de que las telecomunicaciones, el comercio, la migración y el cambio climático nos han unido, y nuestros destinos, a nosotros.

Me gusta cómo lo describe Dov Seidman , autor del libro How: Why How We Do Anything Means Everything. Me dijo que, en lo que respecta a Estados Unidos y China —y al mundo en general—, “la interdependencia ya no es nuestra opción. Es nuestra condición. Nuestra única opción es forjar interdependencias sanas y prosperar juntos, o mantener interdependencias no sanas y fracasar juntos”.

Pero sea lo que sea, lo haremos juntos.

Los líderes de ambos países lo sabían. Con el tiempo, lo aprenderán de nuevo. La única pregunta que me surge es: para entonces, ¿qué quedará de la otrora economía global unificada que generó tanta riqueza para ambas naciones?»

Thomas Friedman

ooooo

Comentario de AgendAR:

Los aranceles que dispuso Trump esta semana pueden ser, serán renegociados, país por país. Pero el sistema de comercio (relativamente) libre que Estados Unidos y sus aliados europeos sostuvieron a partir de 1945, está herido de muerte. No volverá.

Friedman resume su visión: el único acuerdo beneficioso para todos es el que yo llamaría: “Hecho en Estados Unidos, por trabajadores estadounidenses, en colaboración con tecnología, capital y expertos chinos”.

Un acuerdo como ese puede ser beneficioso para EE.UU. y para China. Para Argentina… la relación entre las economías de cualquiera de esas dos potencias y la nuestra es como la de un elefante y un caniche. Es casi inevitable que el caniche sea aplastado.

Una relación con ambas es ineludible. EE.UU. es el hegemón hemisférico, China es un cliente fundamental, y ambas son fuentes de inversiones.

Construir esas relaciones inteligentes son tareas claves y difíciles para cualquier gobierno argentino. Fantasías ideológicas o golpes publicitarios no pueden reemplazarlas.

Abel B. Fernández