La Secretaría de Energía de la Nación fijó nuevos precios de la electricidad
Las inversiones en petróleo y gas en Argentina crecen un 18% en 2023
Crecimiento en Vaca Muerta
El informe de la consultora que conduce el exsecretario de Planeamiento Energético, Daniel Dreizzen, destacó que «el porcentaje de inversiones en recursos no convencionales viene creciendo casi constantemente y en el 2022 alcanzó el 64% del total invertido». De manera particular estimaron que «las inversiones en no convencional continuarán representando el mayor porcentaje y se espera que las inversiones en gas aumenten hasta 36%», incentivados por las nuevas obras de transporte, en particular por la conclusión del Gasoducto Néstor Kirchner.Empresa por empresa
En cuanto a la distribución por empresas de los montos totales a invertir, al igual que lo sucedido en 2022, YPF se ubica en 2023 como la compañía operadora con mayor inversión esperada, con el 42% de los desembolsos totales previstos, por un monto estimado en u$s 3.749 millones; seguido por PAE, con u$s 1382 millones; y Total, con u$s 620 millones. La lista se completa con los compromisos asumidos por Tecpetrol -del Grupo Techint-, por u$s 615 millones; Pluspetrol, u$s 610 millones; Shell, u$s 603 millones; Vista Energy, u$s 581 millones; Pampa Energía, u$s 377 millones; Chevron, u$s 303 millones; CGC de Corporación América, u$s 265 millones; y Kilwer, u$s 246 millones.
Operación convencional
A estas se suman -en orden de monto- las inversiones en el Anticlinal Grande Chubut para las operaciones convencionales de Cerro Dragón, con US$ 600 millones; seguido por el bloque no convencional de Bandurria Sur -de la sociedad YPF, Shell y Equinor- ,con US$ 589 millones; La Calera de Pluspetrol, con US$ 506 millones; y Fortín de Piedra ,de Tecpetrol, con US$ 413 millones. También se destacan las inversiones en los bloques Aguada de la Arena de YPF, con US$ 359 millones; Bajada del Palo Este de Vista, con US$ 356 millones; El Trapial Este de Chevron, con US$ 303 millones; Aguada Pichana Este de Total, con US$ 269 millones; y Cuenca Marina en el Mar Austral de Total, con US$ 269 millones.El motor de Vaca Muerta
La concentración de las inversiones en la cuenca neuquina explican el creciente grado de participación en el total de producción nacional que en el caso del petróleo viene alcanzando en los últimos meses los 640.000 barriles diarios, con un incremento del 10% interanual, de la cual el no convencional explica el 47%.Asimismo, la cuenca neuquina, principal productora de este tipo de recurso, representa el 63% de la producción total de crudo y si se le suma la Cuenca de San Jorge -hasta hace pocos años la más productiva del país- entre ambas concentran el 95% de la producción de la Argentina.

El CONICET evalúara acciones de cooperación y políticas científicas con China
Producción científica
Además, Franchi resaltó las tareas llevadas a cabo en el marco del Centro Chino-Argentino de Estudio de Políticas para la Innovación y la Tecnología coordinado por el CONICET y la Academia China de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CASTED) creado en 2021. “El proceso de innovación es un área de suma relevancia para el intercambio de experiencias exitosas de ambas partes con vías al desarrollo de nuestras sociedades. Respecto a la producción científica las producciones conjuntas entre investigadores/as y colegas de la República Popular China ascienden a más de 1.500 desde202 el año 2000 al presente en diversas disciplinas como en ciencias físicas, biológicas, de la tierra y medio ambiente pero también en matemáticas y biotecnología agropecuaria. Confío en que la cooperación seguirá fortaleciéndose porque está más que clara la voluntad de nuestras comunidades académicas y científicas de ambos países de continuar en este rumbo compartido”, agregó. En la apertura, Filmus agradeció la visita de Zhang y su comitiva y celebró la cooperación bilateral histórica hace más de 40 años “en este contexto, la posibilidad de una agenda de I+D en áreas consideradas estratégicas representa un paso importante y demuestra las iniciativas conjuntas existentes para las que hemos trabajado y hoy podemos ver sus avances. La cooperación es claramente un camino a seguir orientándola a nuestras prioridades nacionales” y puntualizó “el eje de hoy son áreas potenciales como la astrofísica, la CyT aplicada al agro, políticas de innovación y tecnología, el intercambio de recursos humanos, especialmente en jóvenes investigadores/as, el trabajo del Centro Argentino-Chino en Ciencias Sociales, entre otras. Pensamos seguir impulsando el trabajo conjunto en el futuro”.Intercambio
Filmus afirmó la importancia de “formar a nuestros/as jóvenes investigadores/as en ambos países para que puedan complementar la formación de doctorado y postdoctorado en áreas estratégicas. El futuro de la cooperación va a estar asegurado si nuestros/as jóvenes interactúan, conocen y conocen las culturas de los dos países y pueden desarrollar trabajos de investigación en conjunto”. Participaron del encuentro, por parte del MINCyT el secretario de Planeamiento y Políticas de Ciencia, Tecnología e Innovación, Diego Hurtado, la directora de Promoción de la Política Científica, Karina Pombo, la secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación, Provincia de San Juan , Marita Benavente. Además, estuvieron presentes, la responsable de Cooperación Internacional del CONICET, Eugenia Tola y autoridades y representantes de organismos de ciencia y tecnología de China. Por su parte el viceministro Zhang Yudong comentó: “China y Argentina son grandes aliados y con gran confianza mutua. Por tanto estas acciones de cooperación internacional en materia de ciencia y tecnología se han desarrollado en profundidad. Ambas partes se han comprometido con la organización de actividades a largo plazo que han reforzado los acuerdos binacionales. El Centro Binacional Chino-Argentina planifica llegar a ser una plataforma multidisciplinaria que potencialice las experiencias en innovación de ambos países”.El 49,1% de los usuarios de CABA perdieron los subsidios del gas y la electricidad
Aumentos en electricidad
Los hogares del Nivel 1 empezaron a pagar este invierno la tarifa plena de electricidad, que implicó una suba en las facturas de 473% entre agosto de 2023 y el mismo mes del año pasado. La suba está muy por encima de la inflación anual, que en junio fue de 115,6%, según el INDEC. A valores corrientes, un hogar del Nivel 1 que recibió una factura de electricidad de $ 1.963 en agosto de 2022 pasó a pagar $ 11.253 en el mismo mes de este año. El Nivel 3 (ingresos medios) tuvo un aumento interanual de 189% en agosto, porque un hogar con una factura de $ 1.963 de ese mes en 2022 pasó a pagar $ 5.677 en agosto de este año. En tanto, un usuario del Nivel 2 (bajos ingresos) que abonó el año pasado $ 1.963, este mes tendrá una factura de $ 3.970, es decir, una suba anual de 102%. Para un usuario comercial que en agosto del año pasado recibió una factura de $ 5.644, en agosto de 2023 su factura ascenderá a $ 18.940, un total de 236% en doce meses, poco más del doble que la inflación.El Pucará Fénix realizo su primer vuelo – Video
#FAdeA | La aeronave prototipo Pucará Fénix, matrícula OVX-501, de la @FuerzaAerea_Arg, realizó su primer vuelo tras haber pasado de forma exitosa los ensayos en tierra.
— Ministerio Defensa (@MindefArg) August 9, 2023
Es en el marco de las pruebas requeridas para la certificación de la modernización de NAVCOM. pic.twitter.com/ugdXIf9g7P
Observación de AgendAR:
Este avión, que iba a ser un aparato de observación bastante interesante, va a quedar en el prototipo. En su lugar, las células Pucará que logre recuperar y remotorizar la Fuerza Aérea Argentina (tal vez 20) se van a dedicar a la función de ataque a tierra. Muy interesante si se trata de operaciones COIN, o contrainsurgencia, y si los atacados no tienen misiles infrarrojos portátiles, o MANDPADS, lanzables desde el hombro. Pero si los insurgentes están un poco mejor organizados y equipados para enfrentar aviones y helicópteros, ese ataque es un viaje de ida para el Puca. Y ni hablar de lucha simétrica, entre estados. Si lo que se ve en Ucrania es el futuro de la guerra, el ataque a infantería con un Puca está más perimido que las cargas de caballería ligera. No entiendo por qué la FAA, que por primera vez en mucho tiempo tiene un jefe excelente, se sigue equipando para las guerras de hace 40 años. El Puca OVX-501 que está testeando motores tenía, como novedad, un «pod» de observación ISR diseñado por INVAP y Fixview, con un combo de observación bastante poderoso. Tiene una articulación universal, o «gimball» que elimina vibraciones de motor y aerodinámicas, y carga por el frente con un sensor electro-óptico (en mi barrio, una cámara) e infrarrojo, además de un telémetro y un iluminador láser para marcar blancos. En el lateral del pod, que tiene más o menos la forma y dimensiones de un tanque externo auxiliar de combustible, hay un radar de apertura sintética tipo AESA que emite en banda X hacia un costado. Los AESA -de éste en particular ignoro los límites- son radares complejos, que no sólo detectan por emisión de señal y eco, sino que tienen capacidad de detección pasiva, sin delatarse, de las emisiones de otros radares, e incluso de interferirlos. Los modos de detección de este radar lateral son tres: stripmap, en que se mapea el terreno y lo que se mueve o queda quieto en él en forma de una gran «calle» paralela al lateral del avión, spotlight, en que el haz del radar se detiene en apuntamiento sobre un objeto o lugar y lo sigue, aunque el avión se mueva o maniobre, y ISAR, o apertura sintética inversa, del cual no logro que nadie me explique coherentemente en qué se diferencia del stripmap. Lo cierto es que este pod y una electrónica nueva y adecuada a bordo transforman al Puca en una patrulla armada de fronteras, o marina, o de reconocimiento del frente. Potencialmente, patrulla armada, porque el paso lógico siguiente es dotarla de misiles guiados y/o drones programables desde el asiento trasero, donde va la persona realmente importante a bordo, para ataque stand-off, a gran distancia, con la fuerza de gravedad trabajando a favor del atacante porque incrementa el alcance y la velocidad del proyectil, y sin arriesgar excesivamente a los pilotos. Para el caso, el Puca tiene una capacidad más que interesante de carga de municiones inteligentes: 1700 kg. Aún sin ese armamento propio, el Puca reconvertido a observación nos da hasta cierto punto las capacidades de un AWACS, avión de control aéreo de teatro de operaciones, que sencillamente no tenemos. Digamos que el OVC-501 es un AWACS de la pobreza, pero peor es no tener nada, como ahora. Mala idea que esto vaya a quedar en prototipo. Mala idea que las pocas células que la FAA no transformó en estatuas de plaza vayan a volverse aviones de bombardeo y ametrallamiento, pero sólo de enemigos cortesmente mal armados.Daniel E. Arias
El Mar Argentino todavía esta bien. Pero la pesca ilegal lo amenaza
Según un estudio científico sobre el estado de lechos marinos del mundo en los que se practica pesca con redes de arrastre, el Mar Argentino presenta buenas condiciones: más de la mitad del fondo de la plataforma marítima del país no presenta alteraciones y del resto sólo 5% exhibe bajos niveles de afectación, con valores de 0,8 en una escala en el que cero (0) significa una afectación máxima y uno (1) ausencia de alteraciones de su flora y fauna.
El estudio fue publicado por el Journal of Marine Sciences del International Council for the Exploration of the Seas (Revista de Ciencias Marinas del Consejo Internacional para la Exploración de los Mares), con sede en Copenague, Dinamarca. El autor principal es el científico Ray Hillborn y de su equipo, que se basó en papers especializados y datos e información de las autoridades de 24 regiones marinas relevadas, participaron dos científicos argentinos, Ricardo Amoroso y Ana Parma.
El estudio afirma que la gestión de los impactos del arrastre en el lecho marino implica dar tiempo al área donde se practican arrastres para su recuperación y encontró que 15 de las 24 regiones relevadas, la mayoría fuera de Europa, tenían puntajes superiores a 0,9; esto es, más del 90% de la superficie intacta de las huellas del arrastre.
Como muestra el siguiente gráfico, las 8 regiones marinas más afectadas son europeas, comenzando por el Mar Adriático. En el extremo opuesto las aguas con mínima afectación, pese a que en ellas también se usa pesca de arrastre, son los mares en torno de Australia y el sur de Chile.

La pesca con redes de arrastre tuvo un salto después de la segunda guerra mundial; el uso del nylon (que durante la guerra se había utilizado, por caso, en la fabricación de paracaídas) permitió elaborar redes mucho más grandes que las que se podían hacer con fibras naturales y llegar al fondo marino. Actualmente explica 26% de los peces y mariscos capturados en estado silvestre en el mundo.
La proporción es mayor en el caso argentino, aunque la cuenta depende de cómo se considere la captura del langostino, principal especie en materia de exportaciones del sector pesquero nacional, cuyas ventas externas (colas y langostino entero) superaron por primera vez los USD 1.000 millones en 2016 y los USD 1.300 millones en 2018, pero en 2020 (por la pandemia) y nuevamente el año pasado (por la baja de los precios internacionales) cayó por debajo de los USD 1.000 millones. A nivel mundial, las principales especies capturadas con redes de arrastre son peces e invertebrados demersales (que viven cerca del fondo marino), como merluza, abadejo, lenguados, merluza negra, bacalao y algunas especies de mariscos.
“El artículo demuestra que las poblaciones de estos peces en todo el mundo están aumentando y en promedio están por encima de los niveles objetivo”, observó sobre el paper la consultora ambiental Resilience. Básicamente, el estudio de Hillborn dice que la pesca de arrastre de fondo puede ser una forma de producción de alimentos de bajo impacto en lugares con una gestión efectiva, pero altamente destructiva en áreas con poca capacidad para la gestión ambiental, como muchas naciones en desarrollo.
Proteínas: marinas y terrestres
La producción de alimentos explica un tercio de las emisiones de carbono del planeta, mayormente por la producción de alimentos terrestres que implican cambio de uso del suelo. Al respecto, en un análisis sobre la publicación del Journal of Marine Sciences, Max Mossler, editor en jefe del sitio Sustainable Fisheries (Pesquerías Sustentables) de la Universidad de Washington, EEUU, plantea que la captura de peces y mariscos con redes de arrastre puede tener menor impacto ambiental que otras fuentes de proteína animal. Según Mossler, la pesca de arrastre es menos destructiva que la agricultura, pues cuando se despeja tierra para cultivos o ganado, más del 90% de la biota nativa es eliminada, mientras que la mayoría de los ecosistemas de lecho marino sujetos a arrastre conservan 90% de su estado previo. Prohibir el arrastre –argumenta– tendría un impacto neto negativo, al demandar alternativas más destructivas de producción de proteína terrestre.

En el caso de la pesca no hay cambio de uso del suelo ni especies generadoras de metano (sí lo son los rumiantes terrestres); su “huella de carbono” deriva mayormente del uso de combustible, que sí se relaciona con la pesca de arrastre, que es muy demandante de energía. El énfasis allí es usar motores diésel más eficientes y, eventualmente, embarcaciones a base de hidrógeno y eléctricas.
En cualquier caso, dice el estudio, la gestión efectiva del arrastre parte de asegurar que las “especies objetivo” no estén sobreexplotadas, no haya “exceso de esfuerzo pesquero”, se acote el descarte de especies no objetivo y se respeten las cuotas de captura permisible.
Gestión y sostenibilidad
El arrastre de fondo bien gestionado es sostenible, es la principal conclusión del estudio de Hillborn, que revisó docenas de artículos científicos. La respuesta no es prohibir el arraste, subraya, sino fortalecer la capacidad de gestión pesquera donde es deficiente. En cambio, sí reconoce que la pesca de arrastre de fondo puede tener un impacto severo en especies como corales y esponjas de aguas profundas, cuya recuperación demanda décadas o siglos, por lo que en áreas con esas especies el arrastre debería prohibirse.
Según la consultora Resilience, las pesqueras locales están sujetas a evaluación de poblaciones, monitoreo permanente y cuotas de captura y hay zonas de veda para proteger procesos reproductivos, áreas de cría y ecosistemas vulnerables. También hay reglas de “cambio de zona de pesca”: los buques deben cambiar de lugar si hay demasiada “captura incidental” o afectan hábitats sensibles.
“La aplicación en el Mar Argentino de un sistema de Cuotas Individuales Transferibles de Captura para merluza y otras especies ha contribuido mucho en ese sentido. Pero aún resta aplicar dicho sistema en otras pesquerías importantes, como la de langostino o calamar”, explicó Otto Axel Wohler, cofundador de Resilience. Lo más importante del estudio del Journal of Marine Sciences es que es parte de un proyecto global sobre la “huella ecológica” de la pesca de arrastre y demuestra que la misma “es un arte de pesca sostenible, dependiendo del contexto y respetando frecuencia, áreas y regulaciones, como sucede en el Mar Argentino”, dijo Wohler. Según el consultor, la conclusión es importante “teniendo en cuenta los embates de grupos que cuestionan la práctica con afirmaciones amarillistas y sin base científica”. En el Mar Argentino, resumió, “la pesca en general se mantiene en volúmenes razonables, pero hace ruido la parte económica”.
El Mar no tiene alambrado
Sin embargo, el cuidado de la “Zona Económica Exclusiva”, hasta 200 millas de la Costa, no va más allá de ese límite difícil de fiscalizar y en torno del cual pescan sin control centenares de barcos extranjeros, mayormente chinos, que llegan cada año hacia fines de la primavera y pescan hasta mediados del año siguiente. Después de asolar las aguas frente a Ecuador, Perú y Chile pasan del Pacífico al Atlántico por el estrecho de Magallanes y hacen lo mismo en las narices (y a veces adentro) del “Mar Argentino”.

“El mar no tiene alambrado”, resumió la cuestión Antonio Solimeno, de la firma Luis Solimeno, una de las más tradicionales del sector, que este viernes, en el muelle del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep) en el puerto de Mar del Plata, presentó dos nuevos buques: el Luigi (por su padre, que llegó a la Argentina en 1935), ya listo para pescar, y el “Anita” (por su madre, que llegó en 1937), que, ya bautizado, será terminado en los próximos meses por el astillero SPI, con el que Solimeno decidió a fin de 2018 encarar la construcción de las dos nuevas embarcaciones para reemplazar a los buques Polarberg II y Ur Ertza.
“Tenemos un congelador que estamos aggiornando a nuevo, queda solamente el motor, cambiamos todo. Tenemos experiencia en reparación. Podía encargar esto afuera, pero ¿qué garantías podemos dar y cómo hago para pagar? Por eso optamos por construir acá. Elegimos la propulsión, los guinches y le dimos el trabajo a SPI. Nadie se había animado a hacer esto: son los dos barcos de pesca más grandes construidos en la Argentina en los últimos 60 años Visitamos muchas ferias y sabemos qué comprar: reductor más línea de eje con hélice y todo y le marcamos los 12 guinches al astillero. El barco (por el Luigi) es multipropósito: marisco, merluza, calamar y especies pelágicas. Es todo de última generación: ecosondas, censores de red, guinches automáticos”, explicó Solimeno en diálogo telefónico.
“Tony”, como lo llaman en el sector, contó que estuvo en el muelle en 900 arribos de buques de su empresa, que tiene doce. “Los que hicimos con SPI, dijo “no tiene nada que envidiarle a los barcos que llegan de España; los argentinos somos capaces. Tengo 76 años y sigo haciendo proyectos. Vi nacer la industria de la conserva de Mar del Plata en los 50 y 60, y en los 70 la del fileteado de merluza; mire si vi pasar pescado por mis ojos”.
La flota de Solimeno incluye 4 buques “tangoneros”, un tercio de su flota, para captura de langostino, y 850 empleados, entre personal de pesca y en plantas de tierra. “El caladero está bien. La Argentina tiene 120.000 km2 vedados, frente a Chubut y un pedacito de Río Negro. Hay lugares de veda hasta 150 kilómetros de la costa. Es un vergel, controlado por la Secretaría de Pesca, Prefectura y la Armada. Y todos los bancos tenemos GPS y AIS (sistema de identificación automática de cada buque) siempre prendido. Cada tanto se tendrían que abrir algunas áreas, pero mientras se trabaja hay que verlas como una reserva”, dijo el empresario.

Adentro y afuera
¿Cuáles son los principales problemas del sector?, le preguntó este medio. “Una cosa es la pesca en la Milla 201 y otra los problemas internos: atraso cambiario, inflación, costo de mano de obra, bajos precios internacionales, en especial del langostino en el último año, y retenciones del 6% sobre el Valor Agregado: tripulación, material de embalaje, de fábrica, etc. Y no poder importar insumos”, listó Solimeno, que además debe tratar con 7 sindicatos para personal embarcado y otros 6 para personal y operaciones en tierra.
La pesca en la Milla 201 “claro que afecta, porque las especies son migratorias”, explicó Solimeno. “En cada uno de los últimos 20 años aumentó la flota extranjera, con muchos buques chinos. Y no se trata solo de los que pescan en la Milla 201, también están los 70 permisos que Malvinas otorgó a buques de Taiwán y Corea”. El de los buques extranjeros, subrayó. “Es un tema complejo, tiene que haber una política exterior de los países ribereños, el Mar no tiene alambrado”.
De hecho, un reciente estudio del “Círculo de Políticas Ambientales” en base a datos satelitales de la Plataforma Global Fishing Watch calculó que entre 2013 y 2022 el “esfuerzo pesquero aparente” de buques extranjeros (mayormente chinos) frente a las costas sudamericanas se multiplicó por ocho y el número de embarcaciones se quintuplicó.
El problema no es nuevo. En 2012, un estudio del Banco Mundial, con el sugestivo título Sunken billions (referencia a miles de millones hundidos o perdidos) había estimado la pérdida para los países costeros en desarrollo en USD 83.000 millones. Se trata de verdaderas “ciudades en el mar”. Juan Redini, presidente de la Cámara de Armadores Poteros Argentinos (CAPA), dedicados a la pesca del calamar, denunció varias veces la “competencia desleal” de la flota china, que goza de combustible subsidiado por el Estado, paga salarios bajísimos y con la cual -dijo- “no se puede competir”. Eduardo Pucci, director de la Organización para la Protección de los Recursos del Atlántico Sur (Opras) estimó en su momento la pérdida de exportaciones pesqueras argentinas entre USD 2.000 y 3.000 millones anuales.

Historia de nunca acabar
En diciembre de 2022 la Cámara de Armadores de Pesqueros y Congeladores de la Argentina (Capeca) rechazó enfáticamente la construcción de un puerto multipropósito en Río Grande (Tierra del Fuego) para prestar apoyo logístico a la flota china, proyecto alentado por el gobierno fueguino.
“Desde Capeca se quiere dejar en claro que la presencia en aguas adyacentes a la Zona Económica Exclusiva nacional de una flota de más de 500 buques extranjeros resulta fuertemente negativa para la conservación de las especies transzonales, tanto para el calamar, como para otras especies que tienen el hábitat en el área y migran entre las aguas bajo jurisdicción nacional y las aguas de alta mar. Esta flota, principalmente integrada por buques de bandera china, opera sin ningún tipo de regulación ni consideración a elementales normas de conservación, demostrando un desprecio por los intereses y derechos pesqueros argentinos, así como por los principios de pesca responsable y sustentable”, dijo entonces la Cámara.
“Los buques con banderas de terceros países operan en forma indiscriminada desde el mes de noviembre de cada año, hasta que ya no quedan recursos en la zona. No respetan las fechas de apertura y cierre de la temporada de captura ni épocas de veda de calamar establecidas por la autoridad pesquera en base a la información científica suministrada por el Inidep. Esta situación implica indefectiblemente, la afectación biológica de las especies de interés comercial, con la consiguiente generación de problemas sociales y económicos en nuestro país”, enfatizó la Cámara de Pesqueros y Congeladores.
Y resaltó que además de operar de forma ilegal, los buques chinos lo hacen “en muchos casos, de manera subsidiada” y sus productos “compiten con los nuestros en los mercados internacionales, a los cuales entran sin el arancel que se aplica a nuestros productos o a precios de dumping, desplazando las exportaciones argentinas”.
Desde fines de la próxima primavera, esa historia parece condenada a repetirse.
Moody’s rebaja la calificación de grandes bancos estadounidenses. Cae Wall Street
Cae el índice de los bancos
En ese contexto, el índice de bancos cayó el martes, al igual que el índice KBW Regional Banking.8 paises sudamericanos se comprometen a salvar la selva amazónica
MinCyT y Fundación Sadosky premian 19 proyectos de innovación en software. ARSAT y el Balseiro entre los premiados
Energía revisará las importaciones de Vaca Muerta. Denuncian irregularidades
La Aduana expuso irregularidades de una empresa que reclama
«Hay cuestiones puntuales de alguna empresa vinculada a la actividad en Vaca Muerta que, bueno, ha recibido multas y penalidades por parte de Aduana y eso hay que revisarlo también«, expresó Royón. El tiro por elevación tiene como destino los movimientos de DLS, una de las empresas que más viene exponiendo dificultades para operar por efecto de la falta de insumos importados. Hace poco más de una semana, directivos de esa firma advirtieron que no podrían activar un nuevo equipo por falta de insumos. Y que eso redundaría en un recorte de al menos 50 puestos de trabajo. El reclamo proveniente de la empresa redundó en un comunicado de la Aduana, organismo señalado por el sindicato petrolero y distintas cámaras del rubro como el responsable de «trabar» los productos requeridos que no ingresan al país, señalando que DLS debe al menos 1.160 millones de pesos por importaciones irregulares efectuadas en 2014.
El peso del cepo
Mientras tanto, las empresas con participación en esa área señalan que en las últimas tres semanas sólo les habilitaron el 7 por ciento de los pedidos. A raíz de la posibilidad cierta de que las perforadoras frenen la actividad, provincias como Neuquén solicitaron tomar participación en las negociaciones para destrabar estos productos. Esto ocurre mientras las energéticas advierten que, por la misma causa, podría resentirse la oferta de electricidad con vistas al verano. A principios de la semana pasada, desde el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa cargaron directamente contra la Aduana, exponiendo al organismo como el gran responsable del freno a la entrada de materiales y tecnología indispensable para la extracción de hidrocarburos.