El INTA consolida un rol estratégico en el desarrollo de la agroindustria del cannabis

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Con 25 proyectos distribuidos en todo el territorio nacional, el Instituto promueve la articulación público-privada para la expansión de toda la cadena de valor de cannabis medicinal y avanza con el estudio del cáñamo industrial.

Avances del proyecto del INTA Patagonia Norte con la Asociación Civil Ciencia Sativa (ACCS) –que trabajan en la inscripción de la primera variedad argentina en el INASE– y del convenio del INTA Pergamino con la empresa Pampa Hemp –quienes se enfocan en el mejoramiento de la especie para lograr un banco de semillas del cultivo– serán presentados en Expo Cannabis.

La planta de cannabis se utiliza desde hace siglos en distintas culturas alrededor del mundo para diferentes fines, entre ellos, el medicinal. La investigación médica y científica del uso medicinal del cannabis y sus derivados tiene oficialmente solo cuatro años en la Argentina, desde la sanción de la ley nacional 27.350. Y es “la Ley de Cannabis medicinal” –nombre que recibe la norma sancionada en 2017– el marco legal imprescindible para el estudio de Cannabis spp. bajo estándares de calidad y control, mediante la investigación científica y estudios agronómicos.

En este contexto, organismos de ciencia y técnica, como el INTA –perteneciente a la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación–, trabajan para la obtención de materiales vegetales, desarrollo de técnicas de manejo y metodologías específicas para la producción de la planta de cannabis y sus derivados, como el aceite medicinal, entre otros. Junto con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, el INASE y el SENASA se presentarán en Expo Cannabis los avances que ha realizado el INTA desde la implementación de la Ley 27.350 y además se brindará una charla que mostrará los principales logros del proyecto del INTA Patagonia Norte con la Asociación Civil Ciencia Sativa (ACCS). “Los avances del INTA han sido muy importantes en algunos proyectos, como el de Patagonia Norte o el de Pergamino, que han logrado articular con varios actores que trabajan con el cultivo, o que forman parte de algunas de las etapas del ciclo productivo de la planta de cannabis”, indicó Silvina Lewis, directora del Instituto de Recursos Biológicos (IRB) del Centro de Investigaciones y Recursos Naturales (CIRN) del INTA y responsable titular ante el Consejo Consultivo Honorario (CCH) de la Ley 27.350 por el INTA. “Hay otros resultados que tienen que ver con que nuestros investigadores empiezan a conocer la planta, analizarla, verla crecer y cómo se comporta”, expresó Lewis quien señaló que “ese expertise se está generando desde los grupos de trabajo y, sobre todo, desde aquellos grupos que se asocian con terceros”. Y ejemplificó: “El INTA está asociado con municipios, provincias, asociaciones civiles de cannabicultores, laboratorios, empresas públicas y privadas”. A su vez, añadió que “todos los proyectos del INTA están nucleados, asociados y trabajan en conjunto”. Actualmente se está trabajando en un documento de Red de Cannabis que incluirá todo lo que se está haciendo en cannabis medicinal y, además, líneas de trabajo relacionadas a cáñamo industrial. Ese último uso del cannabis se incluye en la Ley 27.669 promulgada en mayo de este año y es la que establece un marco regulatorio para la cadena de producción tanto de cannabis medicinal como industrial. “A partir de esta ley, la Argentina tiene la oportunidad de re-comenzar con una industria que fue muy próspera en la década del 70”, señaló por su parte Carla Arizio, investigadora del Instituto de Recursos Biológicos y referente en la temática. El cáñamo es una planta con miles de usos y justamente Argentina, con su gran amplitud de territorio y diferentes regiones agro- climáticas, tiene condiciones para su cultivo. “El desarrollo de esta industria obviamente dependerá de muchos otros factores, pero en lo que respecta a la planta tenemos las condiciones y estamos articulando fuertemente con diferentes organismos del Estado y otras instituciones para poder importar germoplasma que responda a ese uso”, especificó la investigadora. Para obtener germoplasma de calidad, el INTA considera fundamental tener una correcta trazabilidad de los procesos en el programa de mejoramiento desde la siembre de la semilla hasta obtener el producto final además de asegurar buenas condiciones sanitarias de los materiales vegetales propagados que deberán ser homogéneos y estables en sus características. “Se busca una planta que, en su composición química y perfil de cannabinoides, responda a las necesidades de salud”, explicó Arizio.

Dos casos exitosos

En el Centro Regional Patagonia Norte del INTA tiene sede un proyecto que nació del vínculo del instituto con la Asociación Civil Ciencia Sativa (ACCS) y tiene como objetivo la investigación y desarrollo de toda la cadena productiva de cannabis con fines terapéuticos y medicinales en la región. Este proyecto integra un programa de mejoramiento genético, banco de germoplasma y propagación de variedades nacionales en la Estación Experimental Bariloche del INTA –Río Negro–, el cultivo en la Estación Experimental Alto Valle del INTA y, dentro del mismo predio, la extracción de resina en el laboratorio Pasedati. Por último, en el laboratorio Productora farmacéutica rionegrina sociedad del Estado – Agencia Nacional de Laboratorios Públicos (Profarse- ANLAP), ubicado en la ciudad de Viedma, se prevé la elaboración del fitopreparado. “El programa de mejoramiento está en marcha desde 2021 y, en este momento, se están instalando los invernaderos de cultivo y el laboratorio de extracción en el INTA Alto Valle”, indicó Ariel Mazzoni, investigador del INTA Bariloche. En esta primera etapa, se espera registrar al menos tres variedades nacionales de cannabis, establecer una prueba piloto de cultivo de 3000 metros cuadrados para luego ajustar técnicas de extracción de resina y la elaboración de los primeros fitopreparados. En una segunda etapa, la superficie de cultivo será de dos hectáreas y se buscará escalar la producción en laboratorio. A la fecha, Mazzoni destacó como los principales logros “la articulación pública-privada para el desarrollo de toda la cadena de valor de cannabis en la región Patagónica”. Además, señaló que “junto con la Asociación Civil Ciencia Sativa, GS1 (organización dedicada al sistema de estándares globales) y KYAS (empresa de software) se desarrolló un sistema de trazabilidad de cannabis denominado Trazacann que fue puesto en marcha en el proyecto y podrá ser utilizado por otros cultivos en el país”. De acuerdo con Mazzoni, un dato relevante es que se presentó la primera variedad INTA-ACCS en el registro nacional de cultivares y el registro nacional de propiedad de cultivares del INASE, y hay dos genotipos selectos más para ser registrados en los próximos meses. “Nuestras investigaciones apuntan a toda la cadena, priorizando la participación de actores públicos y privados locales, el desarrollo económico regional y responder a las demandas de salud de la población en nuestro país”, subrayó el investigador. Para el armado del proyecto fue muy importante el vínculo con una ONG, dado que permitió seleccionar genéticas de uso medicinal que actualmente utiliza la población para tratamientos con acompañamiento médico. “Con este trabajo buscamos seleccionar las mejores genéticas estables y homogéneas para abastecer tanto a usuarios del Reprocann (Registro del Programa Cannabis) como a proyectos de investigación y producción”, concluyó. Desde la sanción de Ley de cannabis de uso medicinal, el INTA trabaja codo a codo con organismos públicos, privados, municipios, provincias, ONGs, laboratorios, Pymes y universidades para una implementación efectiva de la Ley y para la generación de capacidades institucionales que puedan dar respuesta a la demanda. También, se dedica a la evaluación, fitomejoramiento e inscripción de nuevas genéticas, a la evaluación de tecnologías de cultivo (indoor, invernáculo, campo, hidroponia), a realizar investigaciones sobre la fisiología del cultivo y su conservación y desarrollo de sistemas de trazabilidad. Por otra parte, se evalúan técnicas de extracción y cuantificación de cannabinoides, terpenos y flavonoides y provee al sistema de ciencia y técnica de material vegetal estandarizado. Además, provee al Reprocann de semilla fiscalizada, implementa Buenas Prácticas Agrícolas y de Manufactura (BPA y BPM), participa en el dictado de cursos, seminarios, diplomaturas y genera capacidades para el desarrollo de la industria del cáñamo.

Zarpa el primer barco arenero con motores eléctricos de la Argentina

En las aguas argentinas comienza a verse la evolución hacia la propulsión eléctrica. Esta vez, gracias a la botadura del buque arenero Perla del Norte, perteneciente a la empresa Nóbile de la ciudad de Reconquista, con tecnología híbrida diesel/eléctrica, para la generación e impulso del mismo, además de las bombas eléctricas para extracción de arena. En el Astillero Quintana, situado en Romang, provincia de Santa Fe, tuvo lugar la botadura de la embarcación dotada de sistemas de propulsión y bombas eléctricas. La nave tiene 37 metros de eslora y 7 de manga, con una capacidad de carga de 350 m3. Este centro de construcción de embarcaciones es de una empresa de alta tecnología y de mucha experiencia, que se encarga del diseño y la construcción. El generador es Scania, operando como grupo estacionario para los sistemas de propulsión y bombas. Perla del Norte ELECTRICO (2) El Perla del Norte llevó dos años y tres meses de trabajo; y pasó cinco meses esperando la botadura, ya que la bajante extrema del Río Paraná afectó todas las operaciones. La súbita crecida debido al aumento inusual del caudal río arriba apresuró los tiempos y se concluyeron las tareas suspendidas para que se pueda producir el encuentro con el agua. Ahora ya está listo para trabajar y navega está en su elemento.  

El lunes 6 de noviembre comienza en Egipto la COP27 ¿Qué se puede esperar?

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Ha pasado un año desde que los jefes de Estado de la mayoría de los países del mundo renovaron sus compromisos climáticos en la COP26, la histórica cumbre climática de las Naciones Unidas en Glasgow, Escocia. El lunes, esos mismos líderes mundiales, con cambios mínimos en el elenco, se reunirán en Sharm El-Sheikh, Egipto, durante la COP27 para llevar a cabo negociaciones destinadas a frenar el calentamiento global. El panorama a corto plazo es desalentador: los precios mundiales de la energía se están disparando, lo que estimula nuevas inversiones en combustibles fósiles. La buena noticia: las instalaciones de energías renovables siguen aumentando en todo el mundo y la energía nuclear -que no produce emisiones de carbono y proporciona la energía de base que complementa las fuentes renovables, que por su propia naturaleza varían- está regresando en muchos países, aún los que eran más renuentes como Alemania y Japón. La mayoría de los gobiernos que asisitrán a la COP27 han hecho nuevos compromisos climáticos este año. La opinión pública global -es decir, los sectores medios y altos de los países desarrollados- ejerce una fuertísima presión en esa dirección (El nuevo primer ministro de Gran Bretaña, Rishi Sunak, que había anunciado que no iría a Egipto por «compromisos urgentes en su país» debió dar marcha atrás). Es muy previsible que el tema central de la conferencia será quiénes y cómo pagarán la transición energética. Habrá promesas -en particular de EE.UU., donde la administración Biden está comprometida con el tema- pero no habrá aportes concretos en lo inmediato. No hasta que se llegue a un alto el fuego permanente en el conflicto en Ucrania

Para acceder a la página de la COP27, cliquear aquí.

Para acceder al artículo que Nature dedica al tema, cliquear aquí. (Ambos sitios están en inglés).

Se lanzaron cinco satélites experimentales construidos por estudiantes argentinos

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Esta competencia internacional, en la que participaron estudiantes de escuelas secundarias y técnicas de nuestro país, es impulsada por varias agencias espaciales del mundo -entre ellas, la NASA de Estados Unidos y la ESA de Europa. En nuestro país la organizan el Ministerio de Ciencia y la CONAE.

YPF aumentó un 6% en promedio el precio de la nafta y el gasoil

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La petrolera estatal actualiza sus precios por 5° vez en el año; la suba será de un 6% promedio; en la Ciudad de Buenos Aires regirán otros valores con la intención de reducir las brechas con el interior del país.

YPF anunció un aumento de 6% promedio en los valores de los combustibles, en naftas y gasoil, “en función de la evolución de las variables que inciden en la formación” de los precios. La medida rige desde la medianoche del martes 2 en todas las estaciones de servicio que tiene la firma.

El aumento de precios tendrá una menor incidencia en naftas (promediará +5%) que en gasoil (promediará +7%), dado que tanto la brecha negativa entre el costo de importación y el precio en surtidor local como el volumen importado para completar la oferta local son mayores para el gasoil que para las naftas.

En esta oportunidad el ajuste de precios en CABA será de +5,9% en naftas y +7,9% en gasoil, levemente más alto que el ajuste promedio, a fin de reducir las brechas de precios entre CABA y el interior del país, en particular con las provincias del NOA, que subirán 1 p.p. menos que CABA.

YPF aumenta sus precios.
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En un comunicado, precisaron que la devaluación acumulada desde el último ajuste de los combustibles, que ocurrió en octubre, es de 6,8%.

También, indicaron que se sigue registrando una muy importante diferencia de precios de combustibles con los países limítrofes, que promueve la salida del combustible hacia esos países y tracciona el consumo por parte de los vehículos de patente extranjera, generando un significativo incremento de la demanda de naftas y gasoil, que en las provincias del Litoral Norte supera en 25% las cifras de 2019.

“YPF continuará realizando sus mayores esfuerzos productivos y logísticos para sostener el abastecimiento del mercado nacional en un contexto de sostenidos récords históricos de demanda estacional”, argumentó la empresa.

YPF, que controla más del 55% del mercado minorista de los combustibles, justificó la decisión en función de la suba de las distintas variables que integran el costo de producción de los combustibles.

Se presume que en las próximas horas el resto de las compañías replicarán la medida.

Elon Musk cobrará hasta 20 dólares por mes a las cuentas verificadas de Twitter

Elon Musk anunció que mantener la insignia azul de verificación se cobrará de cinco a 20 dólares mensuales como parte del servicio premium Twitter Blue. El billonario adquirió la red social la semana pasada.

Twitter revisará su proceso de verificación de usuarios, dijo Elon Musk en un tuit este domingo, después de adquirir una de las plataformas de redes sociales más influyentes del mundo. «Todo el proceso de verificación está siendo renovado ahora mismo”, dijo Musk en su tuit sin dar más detalles. Twitter está considerando cobrar por la codiciada marca azul que verifica la identidad del titular de su cuenta, informó el domingo el boletín de tecnología Platformer, citando a dos fuentes cercanas a Musk. Los usuarios tendrían que suscribirse a Twitter Blue a 4,99 de dólares al mes o perder sus insignias «verificadas» si el proyecto sigue adelante, según el informe. El dueño de Tesla no ha tomado una decisión definitiva y el proyecto aún podría desecharse, pero según Platformer es probable que la verificación pase a formar parte de Twitter Blue.
La cuenta verificada de Elon Musk en TwitterLa cuenta verificada de Elon Musk en Twitter

Twitter Blue: acceso a funciones premium

El medio especializado The Verge informó que Twitter aumentará el precio de la suscripción a Twitter Blue, que también verifica a los usuarios, de 4,99 dólares al mes a 19,99 dólares al mes, citando correspondencia interna corroborada por dicho medio. Twitter Blue se lanzó en junio del año pasado como el primer servicio de suscripción de la plataforma, que ofrece «acceso a funciones premium» mediante una suscripción mensual incluyendo la opción de editar tuits. La función de editar tuits también se puso a disposición a principios de este mes, después de que Musk lanzara en abril una encuesta en Twitter preguntando a sus millones de seguidores si querían un botón de edición. Más del 70 por ciento dijo que sí. Musk también ha pedido que los usuarios que hayan cerrado la sesión y visiten Twitter sean redirigidos a la página Explorar, que muestra los tweets que son tendencia, según un informe de Verge citando a empleados.

Recuperando el Riachuelo

Varias veces hemos publicado en AgendAR extensas notas sobre la contaminación en la cuenca Matanza-Riachuelo, y los esfuerzos por combatirla. Es que ese río -«con menos agua que efluentes», para abusar de un verso de Borges- es un símbolo de los problemas emblemáticos de la Argentina que se arrastran por décadas. Aparece una esperanza: Matías Alonso, de la agencia TSS de la UNSAM, participó de una navegación junto con personal de ACUMAR para registrar los cambios y las medidas y tecnologías que se aplican para el control de la contaminación proveniente de efluentes sin tratamiento. Ya se vuelvan a ver animales en sus aguas y el aprovechamiento de sus costas… «El Riachuelo ha sido protagonista principal de la historia de nuestro país y también sirvió como eje de su actividad industrial y exportadora. Sin embargo, su uso intensivo también hizo que se convirtiera en uno de los ríos más contaminados de América Latina. La primera orden para limpiarlo se dictó en 1811 y, con los brotes de fiebre amarilla de 1871, se decidió suspender temporalmente toda la actividad de los saladeros y curtiembres que lo convertían en un foco de infección muy importante. Entre 1880 y 1980, el Riachuelo fue el epicentro de la actividad industrial metropolitana y se hicieron grandes obras como el cambio de su desembocadura, por una más amplia y rectificada, la Vuelta de Rocha para el atraque de buques y la rectificación de toda la traza hasta puente La Noria para facilitar el comercio por barcos. Lamentablemente, para cuando se terminó esta obra –en 1940– muchas industrias ya no usaban el río sino camiones para el transporte, por lo que se mudaron a la zona norte del conurbano. La caída de la actividad industrial en la cuenca, sobre todo a partir de los años 70, produjo un abandono muy importante en la zona que llevó a que el control ciudadano del río no se hiciera y las empresas que estaban en sus márgenes tuvieran rienda suelta para contaminar sus aguas.
Además de la limpieza tradicional, se están diseñando sensores automáticos conectados a Internet para tener acceso a los parámetros de medición en tiempo real. Foto: ACUMAR.
Hoy, las industrias que todavía quedan a la vera del río son curtiembres, metalúrgicas y galvanoplásticas. Las primeras serán mudadas a un parque industrial en Lanús para tener un mejor control de sus efluentes, que deberán ser tratados con una planta de tratamiento específica. En el caso de las industrias que todavía están en la cuenca, debieron inscribirse en un registro y unificar todo su vertido de efluentes en un solo lugar con acceso, para que inspectores de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) puedan tomar muestras y controlar que se cumplan con los parámetros fijados. También se están diseñando sensores automáticos conectados a Internet para tener acceso a los parámetros de medición en tiempo real. Durante una navegación del río que hizo TSS con autoridades de ACUMAR, Matías Parra, coordinador de Ciencia y Tecnología del organismo, explicó: “Firmamos un convenio con la universidad de Almirante Brown para que nos asista para la presentación de un proyecto FONTAR para automatizar el monitoreo de los efluentes de las empresas, porque hoy se hacen con controles manuales puntuales y eso nos da una foto de lo que pasa. Nosotros queríamos ver la película, hacer el seguimiento de la industria para ver si están dentro de los parámetros o si se salieron de ellos en un momento puntual. Nos juntamos con la universidad y se formó un consorcio público-privado a través del FONTAR, con tres empresas de CADIEEL (la Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas)”. Este proyecto implica el uso de tres tipos de sensores: uno para colocación in situ en la empresa, otro similar pero un poco más complejo y caro y, otro móvil, que es una especie de trailer que llevarán las camionetas de ACUMAR y pueden dejarse varios días monitoreando las aguas”.
Con los avances en la limpieza comenzaron a aparecer pájaros y tortugas en las aguas del Riachuelo. Foto: ACUMAR.
Otro gran problema de la cuenca era la gran cantidad de basura que se encontraba flotando sobre el espejo de agua. Para evitarlo se abrió el camino de sirga que ya está completo en la margen de provincia de Buenos Aires en la cuenca baja y casi en su totalidad en la Ciudad de Buenos Aires, con algunas zonas de la villa 21-24 que todavía no pudieron ser liberadas por resistencia de los vecinos a mudarse a los edificios adonde deben ser reubicados. En ese lugar, entre 1890 y 1920 funcionó el basural conocido como La Quema, que luego fue mudado a Villa Soldati hasta su cierre. Como parte del programa de limpieza se eliminaron los basurales que había cercanos al río y se hicieron trabajos para mejorar la recolección de residuos para su vertido en el CEAMSE. El mayor problema de contaminación que todavía persiste está relacionado con el vertido de efluentes cloacales. El crecimiento no planificado de las ciudades al margen del río hizo que no se diseñaran sistemas de cloacas para la nueva población y por eso fueran tirados al río sin tratamiento. Para evitarlo se está construyendo el sistema Riachuelo, que permitirá duplicar el transporte de residuos cloacales de la zona. Incluye la construcción del Colector Margen Izquierdo, que es un río subterraneo de 30 kilómetros que se hizo con una tunelera, una planta de tratamiento de efluentes, que hoy está en un avance de obra del 62%, y un emisario que se interna 12 kilómetros dentro del río de la Plata y sus difusores para distribuir los líquidos tratados. (www.aysa.com.ar/sistema_riachuelo/sistema_riachuelo). Se espera que el año próximo se encuentre funcionando todo el sistema, lo que generará un cambio importante en el río. También el arroyo Cildáñez sufrió un cambio notable en estos últimos meses, tras la mudanza del Mercado de Liniers al parque industrial de Cañuelas, con lo que el río dejó de recibir grandes cantidades de bosta de vaca que por momentos llegaban a formar una capa homogénea sobre el río. Esto hacía que bajara la cantidad de oxígeno disuelto en el Cildáñez, que desemboca en el Riachuelo.
Un gran problema de la cuenca era la gran cantidad de basura que se encontraba flotando sobre el espejo de agua. Para evitarlo se abrió el camino de sirga que ya está completo en la margen de la Provincia de Buenos Aires en la cuenca baja. Foto: ACUMAR.
La recuperación también incluye aspectos sociales del uso del río, por lo que la Corte Suprema, en el fallo Mendoza, de 2008, exigió recuperar algunas obras de infraestructura histórica como el transbordador. “El puente transbordador, que está restaurado como pieza histórica y es un modelo de tecnología portuaria para cruce de ríos, funciona igual que como lo hacía originalmente y hay proyectos para reactivarlo con fines turísticos. Es una estructura que da idea de la actividad comercial que había en la zona. Llegó a transportar 17.000 personas por día y había dos más río arriba, además de todos los botes que cruzaban constantemente”, le dijo a TSS Carlos Gradín, integrante del área de Cultura y Patrimonio de ACUMAR. También hay proyectos que incluyen aspectos controversiales, como la libre navegación del río. Hoy solo la Prefectura Naval y ACUMAR están autorizadas a navegar y hasta los remeros del Club de Remo Almirante Brown deben sacar una autorización especial para usar el río. Ésto se debe a que la navegación produce que se remuevan los barros del fondo del río, que son los que tienen acumulados más de 200 años de contaminación. Por otro lado el uso del río es parte de la conexión de la sociedad con el mismo y produce el interés en mantenerlo con buena salud. “Se hizo un pedido de autorizar la navegación abierta tanto desde el Ministerio de Turismo de la Nación como de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y por ahora no conocemos actores en contra, seguramente surgirán cuando se haga la audiencia que seguramente se anuncie para el 5 de diciembre”, explicó Inés Markevich, del área de Prensa de ACUMAR. A lo largo del río también hay estaciones de monitoreo automático y se hacen ensayos constantemente sobre la calidad del agua del río, el agua de consumo de los vecinos y la calidad del suelo. Para ampliar la capacidad de testeo se está construyendo un nuevo edificio de laboratorios. “Hoy tenemos un laboratorio en conjunto con la Municipalidad de Avellaneda pero estamos construyendo uno propio de ACUMAR. Eso nos permitirá hacer ensayos y estamos evaluando si se podrían hacer estudios de calidad de suelos para no tener que tercerizarlos, tanto estudios de sedimentos del río como del suelo del parque curtidor, y de basurales. Eso está en evaluación todavía. También tenemos un centro de monitoreo automático que toma una muestra de agua con una bomba, la circula por dentro del laboratorio, analiza variables del agua y reporta los datos a través de Internet. Esta es una de las estaciones pero habrá cuatro y la idea es integrar todo con la información de los sensores para tener acceso instantáneo y alertas”, agregó Parra».  

El video completo de la entrevista de Roberto Navarro a Sergio Massa

Este reportaje fue hace dos días, pero como despertó mucho interés entre los que miran con atención la marcha de la economía (¿y quién no?), lo reproducimos aquí para los que no están acostumbrados a la búsqueda en Youtube.
 

La Fundación Leloir cumple 75 años de vida

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La Fundación Instituto Leloir es un centro de investigación argentino dedicado a la bioquímica, farmacia y biología celular y molecular. El Instituto y sus colaboradores han recibido múltiples premios y reconocimientos a la excelencia científica tanto en Argentina como en el exterior. El 3 noviembre de 1947 se inauguró en una vieja casona del barrio de Palermo el por entonces Instituto de Investigaciones Bioquímicas Fundación Campomar. Su primer director fue un joven Luis Federico Leloir, quien lo comandaría hasta su muerte en 1987. Allí realizó las investigaciones básicas que lo llevaron a obtener el Premio Nobel de Química en 1970. Hoy, 75 años después, la institución que ahora lleva su nombre funciona en un amplio edificio frente al Parque Centenario de la Ciudad de Buenos Aires, donde los 250 científicos que conforman sus 24 laboratorios trabajan cada día para seguir su legado de hacer ciencia del más alto nivel. En la Fundación Instituto Leloir (FIL) se estudian, entre otros temas, los mecanismos moleculares detrás de enfermedades como el Parkinson, el Alzheimer y el cáncer para colaborar en la búsqueda de posibles terapias; se investiga cómo se adaptan las plantas a su entorno con el fin de encontrar soluciones frente al cambio climático; se indaga sobre el dengue y el Zika para intentar desarrollar herramientas que permitan prevenir el impacto de estos virus que pueden ser letales para el ser humano; y durante la pandemia sus investigadores lideraron desarrollos clave para conocer la situación epidemiológica del país, como el test COVIDAR, que permite detectar en una gota de sangre la presencia y la cantidad de anticuerpos contra el SARS-CoV-2. “Además, otro de sus grandes objetivos es formar recursos humanos. Así es que se fomenta el ingreso de científicos jóvenes, que provienen de diferentes universidades del país, para que realicen aquí pasantías o sus tesis de grado o posgrado. De esa manera aspiramos a que nuestro trabajo impacte de manera positiva y directa en la sociedad”, aseguró Ángeles Zorreguieta, directora de la FIL.

Del laboratorio a la comunidad

La Fundación Instituto Leloir cuenta con un brazo de transferencia tecnológica llamado INIS Biotech, cuyo objetivo es convertir los avances científicos que producen sus investigadores en herramientas y tecnologías que ayuden a la prevención, diagnóstico y tratamiento en distintas áreas de la salud, y que aporten soluciones al sector productivo, tanto en el agro como en la industria. En sus instalaciones también funciona la Biblioteca Cardini, declarada de referencia nacional en su especialidad por la Cámara de Diputados de la Nación. Además, dada la importancia de la transmisión del conocimiento científico a la sociedad, en la Fundación Instituto Leloir se realizan desde 1986 cursos de introducción al Periodismo Científico, orientados a capacitar profesionales que puedan transformar la producción científica en notas periodísticas destinadas al público en general. Y desde 2006 alberga a la Agencia CyTA-Leloir, la primera agencia de noticias exclusivamente científicas de la Argentina: desde allí se difunde de manera gratuita a medios de comunicación del país y de la región contenido sobre aportes relevantes de la ciencia local. La Fundación Instituto Leloir es una entidad de interés público y gestión privada. Los investigadores perciben sueldos del CONICET, pero el resto de su funcionamiento se financia a través de donaciones, aportes de organismos oficiales y de la renta que se obtiene de legados y de un fondo a perpetuidad. “Gracias al rol esencial de organismos oficiales de ciencia y tecnología, y al generoso aporte de fundaciones e individuos, seguiremos creciendo y renovándonos con la incorporación de nuevos jefes de laboratorio que lideren proyectos relevantes e innovadores en biociencias, y también mejorando la infraestructura y el equipamiento, lo que, sin dudas, favorecerá nuevos desarrollos y el avance del conocimiento”, concluyó Zorreguieta.

Primer lanzamiento de una vacuna inhalable contra el Covid

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Algunos residentes de Shanghai, China, ya están inhalando sus refuerzos para el COVID-19.

La vacuna, producida por la firma de biotecnología CanSino Biologics, es una neblina que se aspira a través de la boquilla de un vaso sellado, en lo que podría llegar a ser el primer lanzamiento masivo de una vacuna COVID-19 sin aguja. “Fue como beber una taza de té con leche”, dijo una persona en un video publicado por un medio de comunicación estatal. “Cuando lo respiré, sabía un poco dulce”. Los desarrolladores esperan que las vacunas que preparan las células inmunitarias en las membranas mucosas que viven en la nariz y la boca, donde el SARS-CoV-2 ingresa al cuerpo, detengan rápidamente la propagación del virus, evitando incluso los casos leves y bloqueando la transmisión. Más de 100 vacunas orales o nasales están en desarrollo en diferentes países del mundo.