Trabajos del futuro: ¿qué deberían estudiar tus hijos y tus nietos?

0
Los robots avanzan y cunde el pánico. Se repite hasta el hartazgo la cantidad de trabajos que desaparecerán. La automatización amenaza con quedarse con buena parte de los empleos «humanos». Pero hay otra cara, mucho más positiva: la cantidad de trabajos que se crearán gracias a la tecnología y los cambios sociales. La pregunta, entonces, es: ¿se destruirán más trabajos de los que se crearán o, al revés, se ganarán más trabajos de los que se perderán? Lo claro es que hay ganadores y perdedores, según su mayor o menor alfabetización digital. Y como ésta es un bien educativo que no sobra… «Hacer la cuenta neta es complejo. Si nos basamos en la historia, en cada una de las revoluciones industriales, se generaron más trabajos de los que se destruyeron. Más que trabajos, se destruirán muchas tareas que van a ser innecesarias que desarrolle el hombre. Va a cambiar la naturaleza de muchos empleos y lo que sí es seguro es que los nuevos empleos van a ser de más calidad que los que desaparecerán», dice Alejandro Melamed, autor de «El futuro del trabajo y el trabajo del futuro». «A medida que las industrias migran a procesos automatizados más avanzados, se necesitan equipos capaces de impulsar esta transformación. Por eso el éxito radicará en habilidades blandas como la comunicación, la colaboración, la resolución de problemas, el servicio al cliente, el liderazgo y la gestión». Un informe de McKinsey Global Institute, de noviembre de 2017, plantea que al menos un tercio de las actividades que se desarrollan en el 60% de las ocupaciones podrían ser automatizadas. Peso a ello, dice, hay áreas estratégicas que crecerán exponencialmente hasta 2030. Los servicios para la tercera y cuarta edad serán una de ellas. Se estima que en 2030 habrá 300 millones más de personas de 65 años o más, por lo cual en servicios médicos y acompañamiento habrá entre 50 y 80 millones de nuevos empleos. La tecnología traerá entre 20 y 50 millones de trabajos que, aseguran, serán bien remunerados.
  • La construcción también se potenciará con más trabajo para arquitectos, ingenieros, electricistas, carpinteros.
Las inversiones en energía renovable, como eólica y solar, comenzarán a llegar para mitigar los efectos del cambio climático, según el informe. Crearán una demanda de entre 10 y 20 millones de empleos. Otra tendencia que analizan es la formalización de trabajos domésticos: cuidado de niños, educación infantil, limpieza, cocina y jardinería, por ejemplo, inyectarán entre 50 y 90 millones de empleos en todo el mundo. En el listado de profesiones con mejor proyección, con menos riesgo de extinción y más probabilidad de crecimiento, incluyen: proveedores de servicios de salud, profesionales tecnológicos, ingenieros y científicos, educadores, sobre todo en economías emergentes, «creativos», constructores, amén de trabajadores manuales y de servicio, pero cuya demanda vendrá desde «entornos impredecibles». Por ejemplo, enfermeros en el hogar, o jardineros. Todas las áreas vinculadas al procesamiento de la información que manejan las organizaciones serán clave y continuarán en expansión. El «data analytics» y las actividades adyacentes cobrarán cada vez mayor impulso porque las estrategias de negocio no pasarán ya por la comercialización de un producto o servicio, sino que buscarán construir ‘experiencias’ de consumo. Ahora hay desarrolladores de apps, profesión todavía bastante nueva. Los que antes eran actuarios hoy son «científicos de datos», analistas que se encargan de sistematizar las toneladas de información que recibe una plataforma y, a partir de ello, delinear estrategias. Con la explosión de las redes sociales, llegaron los «community managers» que organizan el caos confrontativo en el que degeneran rápidamente los «fronts» interactivos entre empresas y público. Es otra profesión emergente y próspera, casi inexistente hace una década. También surgieron los «influencers», personas que las marcas contratan por la atracción que despiertan en sus seguidores. La masificación de los videjuegos generó «gamers», en algunos casos, «gamers mercenarios» contratados en el Sudeste Asiático por occidentales ricos que necesitan que alguien les gane una fama vicaria en tal o cual juego. Y los gamers, a su vez, generaron instructores de videojuegos. Y se llega a que la frontera entre los videojuegos y la realidad se vuelve borrosa. En la base aérea Creech, en medio del desierto de Nevada y a una hora de automóvil desde las Vegas, EEUU, unos 500 pilotos de más de 1000 «drones» Reaper y Predator de observación, guerra electrónica, espionaje y ataque a tierra persiguen y destruyen desde distancias de más de 15.000 km. a enemigos intensamente reales del ISIS en Afganistán, Siria, el Cuerno de África y zonas de Nigeria controladas por Boko Haram. Por supuesto, su campo de acción, sobre todo en espionaje, es más vasto y más reservado. Estas personas no salen en los diarios o la TV, como sucedía con los «ases» de la aviación real, y en verdad no parecen estar ganando ninguna guerra. Pero hace 20 años estos operadores, que hoy vuelan manzanas enteras a misilazos en las antípodas del planeta, eran chicos inofensivos, expertos únicamente en matar dragones imaginarios en sus plataformas Nintendo. Ahora ganan más entre U$ 600 y 1600/mes más que los pilotos de cazas F-16 de la USAF (US Air Force), hasta hace 10 años, la élite. La USAF en estos momentos emplea a más de mil operadores de drones para llevar a cabo unas 65 misiones/día y tiene una demanda insatisfecha permanente que no logra cubrir. Razón por la cual parte de los operadores de Creech son pilotos «en serio» que se bajaron de sus aviones reales y hoy hace la guerra por video. Es más aburrido, pero más barato para la USAF, y las posibilidades de ser misileado para el piloto… son menores. Los diseñadores gráficos también se orientan hacia el diseño web o incluso 3D. Hay también empleos civiles vinculados a drones: pilotos, mecánicos, fotógrafos. El marketing digital, con el llamado «growth hacking», se volvió un rol central en las empresas, y un motivo de furia para los usuarios de Internet cuyos hábitos de navegación y uso son sistemáticamente captados y vendidos. En recursos humanos se crearon cargos como «gerente de felicidad» para potenciar el buen clima laboral. La creciente preocupación por el medioambiente dio lugar a «gerentes de sustentabilidad». Por fuera de la tecnología, nadie imaginaba hace 10 años, por ejemplo la explosión de la zumba (el «fitness» casero). «Lo que más vemos son trabajos relacionados a tecnología de la información: programación, informática, sistemas. La alta demanda encuentra candidatos, sobre todo, en el ámbito freelance. Profesionales que quieren trabajar en proyectos puntuales, como desarrollo de páginas webs o aplicaciones para start-ups, pero que no compran el discurso de trabajo de 9 a 18. Las empresas que buscan empleados full-time la llevan más difícil», planteó Siseles. Un informe del Center for the Future of Work proyectó algunos puestos de trabajo que surgirán en los próximos diez años. Todos ellos cubren áreas diversas, pero comparten «tres C». El coaching: la ayuda a otras personas; el cuidado: mejora en la salud y el bienestar; y la conexión entre el hombre y la máquina, entre lo físico y lo virtual. Algunas profesiones parecen cercanas, otras más propias de ciencia ficción. Dentro del listado, están los «detectives de datos», una superación de los científicos de datos, encargados de desentrañar los «misterios» que se esconden en la Big Data, con conocimientos en investigación, matemática y leyes. Hace un par de décadas, estos cargos solamente existían entre los llamados «analistas» de las grandes agencias de espionaje. Hoy el espionaje es la vida misma, y los espiados, todos nosotros. También se proyecta la existencia de «oficiales de abastecimiento ético». Tendrán la función de garantizar la distribución del ingreso en el personal, e investigar los deseos de la empresa. Deberá tener capacidades en comunicación, análisis y negocios. ¿Qué tipo de diálogos tendrá un oficial de abastecimiento ético con un gerente de felicidad? La inteligencia artificial pisará fuerte en el futuro inmediato. Las compañías que la expriman tendrán, de acuerdo al informe, gerentes de desarrollo de negocios IA, expertos en «machine learning» y ventas. La realidad aumentada también avanzará con determinación y se estima que habrá constructores de viajes ficticios, ya sea históricos o actuales, a cargo de profesionales del cine, desarrolladores de videojuegos y gente con experiencia en 3D. Sólo los viajeros «en serio» se aburrirán interminablemente en los aeropuertos, entre vuelos cancelados o atrasados. En las próximas décadas, la gente vivirá más. Se necesitarán, entonces, los llamados «walkers» y «talkers» (caminantes y hablantes) con dotes en comunicación y empatía. En la aristocrática «Belle Époque», eran las damas de compañía de los muy ricos y muy longevos, dos grupos entonces muy coincidentes, pero entonces un mercado minúsculo. Por el mayor cuidado del cuerpo, habría consejeros de compromiso de «fitness» (buen estado aeróbico y nutricional) para asesorar y motivar a las personas, con saberes en nutrición, psicología y tecnología vestimentaria, los famosos «wearables», informática embedida en ropas y accesorios. Las ciudades del futuro, se especula, recopilarán datos de sus ciudadanos para garantizar su seguridad y bienestar. Harán falta «analistas de ciberciudades», en lugar de los viejos arquitectos urbanistas, como Le Corbousier. Los datos personales ya son un bien valioso, pero su precio se disparará al punto de crear «agentes de datos personales», brokers que vendan datos privados a las empresas y partidos, y ayuden a maximizar las ganancias  económicas y electorales. El fundador y dueño de Facebook podría jurar sin mentir que esta profesión ya existe. La biotecnología, la irrupción de la edición genética, creará la necesidad de expertos en comercializar las nuevas soluciones. Los «directores de cartera genómica» necesitarán experiencia en laboratorios y marketing. Con una población cada vez más vieja, creen que habrá «curadores de memoria personal», que crearán entornos virtuales a partir de los recuerdos de los clientes, jardincitos privados de memoria en soporte duro. Así, cuando llegue la decadencia cognitiva, sería menos traumática. La última área que explora el documento son los negocios online. Por un lado, se proyecta la figura del «sherpa de tienda virtual», un asistente que oriente, escuche y entienda las demandas de los clientes dentro de una oferta online cada vez más amplia. A su vez, plantean que habrá un «sastre digital» en los locales de ropa; un modisto que vaya por vía informática a la casas de los clientes y les diseñe su vestimenta, según talla y gusto, mediante software «ad hoc». Uno se queda con la sensación de que los pronósticos de McKinsey en realidad son descripciones. De las que se han eliminado los inevitables aspectos negativos, sin duda.

Se aprobó la comercialización de la primera papa transgénica

0
La Secretaría de Alimentos y Bioeconomía, dependiente del Ministerio de Agroindustria de la Nación, autorizó a la firma Tecnoplant SA a vender la semilla de una papa recombinada para resistir el virus PVY,  así como los productos y subproductos derivados de aquella. En carpetas, la presentación de la empresa de biotecnología se llama «evento TIC-AR233-5″. Dado que se trata de un desarrollo nacional de una empresa criolla y a la luz de las renuencias de Agroindustria a dar «luz verde» a especies recombinantes argentinas, ésta es una noticia sorprendente y bienvenida por partida triple. El virus PVY es endémico en Balcarce, Mar del Plata, Miramar y demás zonas de cultivo tradicional. En no pocas ocasiones, logró ocasionar pérdidas de hasta el 70% de la cosecha. Como noticia, tiene un cuarto valor agregado que la destaca: es buena para el productor local. Hay mlás: en la compra de Biosidus por fondos de inversión de los EEUU, firmada en otoño de este año, Tecnoplant parece haber quedado del lado argentino, es decir el grupo farmoquímico Sidus, propiedad de Marcelo Argüelles. Lo cual daría un quinto motivo para celebrar. Tras un licenciamiento desesperantemente largo, la papa de Tecnoplant finalmente está «bien de papeles», amparada para uso a campo por la resolución 2018-65-APN-SAYBI de Agroindustria, publicada en el Boletín Oficial, y con la información complementaria necesaria para cumplir con todos los criterios técnicos establecidos en una resolución anterior del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA). Tecnoplant fue fundada por la Dra. Bettina Panick a fines de los ’80 como firma dedicada a una tecnología entonces novedosa, la clonación de plantines cuyo «original» tenía características agronómicas perfectas. En 1992, Panick logró la hazaña de poder clonar Illex paraguaensis, es decir yerba mate, una especie que pese a siglos de cultivo seguía «genéticamente salvaje» (con un genoma muy variable). La yerba se había resistido una década entera a intentos de propagación clonal por los laboratorios de diversas empresas. En 1993 y debido a este desarrollo, Tecnoplant fue adquirida por la empresa de biociencias Biosidus, entonces parte del grupo farmaquímico Sidus, que la especializó en la dirección de los cultivos transgénicos. El «pack tecnológico» de resistencia al virus «Y» de la papa parece haber sido, al menos originalmente, un desarrollo del sistema científico argentino: era el tema de los Dres. Alejandro Mentaberry y Alejandro Bravo Almonacid, investigadores de carrera del CONICET en el INGEBI, un instituto porteño dedicado a ingeniería genética que a fines de los ’90 estaba en tratativas con Biosidus. Mentaberry y Bravo Almonacid también tenían otro «pack» en desarrollo contra el virus PLRV, especie con un prontuario aún mayor entre los productores argentinos. Si la información de AgendAR es correcta (y lo es), este proceso licenciatorio del PVY ha tomado casi dos décadas. Esto es una constante. El estado argentino genera los recursos humanos para que el país se vuelva una potencia en biociencias, empresas nacionales corajudas compran las patentes a su riesgo, y las autoridades regulatorias de la Nación se toman tiempos geológicos para autorizar las novedades, lo que genera pérdidas en toda la cadena que va desde los laboratorios hasta los productores. Tendencia que aparentemente ha seguido incólume a lo largo de muchos y muy distintos gobiernos nacionales. Andrés Murchison, secretario de Alimentos y Bioeconomía, señaló: «El SENASA es el encargado de evaluar la toxicidad, alergias y que no se deterioren los atributos nutricionales del cultivo, este último eslabón era el que faltaba».
  • Además dijo que se seguirá optimizando los procesos regulatorios de todo tipo de productos agrobiotecnológicos. 
«Es probable que se concreten más liberaciones antes de fin de año y ojalá todos ellos sean motor de nuestra bioeconomía», destacó. En este contexto, el funcionario informó que simultáneamente con la papa «hemos liberado un maíz de Monsanto que tiene una androesterilidad inducible (cuando se pulveriza con glifosato, en el momento específico de desarrollo de la planta, frena el avance del polen), y se controla mejor la genética para los semilleros». Traducido a idioma de productores, esto significa que la Monsanto (que hace medio año no existe oficialmente, dado que fue comprada por Bayer) logrará -o tratará de lograr- que el hombre de campo argentino no pueda quedarse con semilla propia para resiembra, la popular «bolsa blanca». El funcionario añadió: «Tenemos en cartera un algodón modificado, otros maíces resistentes a herbicidas y una soja resistente a la sequía». No aclaró cuáles son las empresas propietarias de tales eventos. Murchison parece tener alguna dificultad para diferenciar cosas que pueden alegrar al productor criollo de otras que probablemente no tanto, y también firmas argentinas de multinacionales. El Ministerior de Agroindustria parece estar respondiendo elípticamente a cuestionamientos de su lentitud y renuencia para licenciar eventos transgénicos nacionales que no hayan sido autorizados regulatoriamente en EEUU. El caso de libro es el genoma HB4 de Bioceres. Según AAPRESID, la poderosa Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa, el HB4 podría haber salvado 4,5 millones de toneladas de soja de la sequía del pasado verano. A la hora de ponerle costos a esta pérdida (y a la de trigo), Ignacio Crippa, de Indear, la empresa de I&D de Bioceres, dijo que el licenciamiento oportuno del HB4 en soja y trigo podría haber evitado pérdidas por casi 2000 millones de dólares entre ambos cultivos. Pero por lo que informó el sábado 11 de agosto La Nación Campo, el Ministerio seguirá «pisando» la autorización para pasar a campo de un trigo con la misma modificación, con el original argumento de que sería el primer trigo resistente a sequía del mundo. Lo cual, aparentemente, es malo (?).  Sería la primera vez que un vocero regulatorio argentino confiesa de un modo explícito que el Ministerio prefiere no autorizar eventos transgénicos que no tengan un licenciamiento externo. En buen castellano: los generados por las multinacionales de biociencias. Entendemos que a los funcionarios argentinos nada los tranquiliza más que cubrirse las espaldas. Tienen preferencia por hacerlo con un dictamen regulatorio estadounidense que certifique que un trigo con algunos genes de girasol, como el HB4, no perjudica al medio ambiente ni se come a los chicos. Pero licenciar primero en EEUU es carísimo, y se supone que el Ministerio de Agroindustria es nacional, independiente y técnicamente competente. ¿En dónde deja su notoria timidez a los científicos, biotecnólogos, empresas y productores argentinos? Con respecto al trigo transgénico HB4 resistente a extremos hídricos, Murchison dijo que en el Ministerio han evaluado la cuestión «pero la valoración de la Secretaría de Mercados, una de las tres patas para la aprobación junto a CONABIA y el SENASA, no fue positiva» Y agregó : «No hay un trigo modificado aprobado en el mundo». Lo dicho. Al parecer, ser el primero con un «game changer» tecnológico es contraproducente: Thomas Edison, su rival George Westinghouse, Henry Ford, Steve Jobs y Robert Swanson y Herbert Boyer (fundadores de Genentech) tal vez estarían en desacuerdo. Pero a admisión de parte de un funcionario argentino vivo, relevo de pruebas. Al evento finalmente autorizado, en Tecnoplant lo llaman «la papa vacunada contra el PVY». Para Murchison el impacto en la producción y comercialización será importante «porque estos cultivos (creemos que se refiere a la papa) son susceptibles a contraer muchas enfermedades provocadas por agentes fitopatogénicos (virus, bacterias y hongos), que provocan pérdidas de hasta el 70% de la producción». Interpretamos del galimatías anterior que la papa resistente a virus XVY de Tecnoplant-Sidus podría, efectivamente, infectarse con bacterias y hongos, pero tal vez menos que una previamente atacada por una infección primaria del virus. Probablemente sucede como con las gripes humanas con virus epidémico A: pueden hacer a una persona más susceptible a una sobreinfección bacteriana que lleve a una bronquitis o una neumonía. Esta técnica permite al productor de papa bajar costos de manejo y optimizar la calidad del producto final. El virus PVY que afecta al cultivo de la papa es el segundo más destructivo, luego del PLRV. Se almacena en los tubérculos infectados y se transmite por áfidos (pulgones, en el campo), pero también a través de maquinarias y herramientas contaminadas, lo que lo hace muy difícil de atacar. Hubo empresarios biotecnológicos argentinos que intentaron cultivar papas en zonas vírgenes de virus PVY y PLRV, tierras desérticas ribereñas del Río Colorado con bajo costo de oportunidad. Su idea era ir bajando por las orillas a medida que la tierra se iba contaminando «inevitablemente» de esta plaga viral debido al cultivo. Para ello, en su momento el Dr. Hugo Yanosky trató de persuadir a INVAP, la firma de tecnología nuclear y espacial barilochense, de que desarrollara una turbina hidráulica «de pasada», capaz de montarse y desmontarse rápidamente, para irla moviendo a lo largo de las orillas del Colorado y así dar electricidad a un cultivo trashumante. Así de tentador es el negocio de la papa, y así persistente es este virus. Ahora el desarrollo de Tecnoplant rompe al menos el eslabón central de la cadena de transmisión: los tubérculos dejan de ser un reservorio fácil. Nuestras felicitaciones a los argentinos que armaron esta jugada. El proyecto de este tubérculo fue desarrollado por científicos del Instituto de Investigaciones en Ingeniería Genética y Biotecnología dependiente del CONICET, que lograron la resistencia al virus PVY (Potato Virus Y), cuya licencia del uso del evento estará a cargo de la empresa Tecnoplant, del grupo Sidus.

El único sector de ventas al consumidor que ganó mercado

0
El canal de los mayoristas es uno de los menos afectados por la retracción del consumo. Mientras los supermercados y almacenes en conjunto arrastran datos negativos en las ventas, este año empresas como Makro, Diarco, Yaguar o Vital “vienen surfeando la ola”, describe Diego Gizzi, analista de la consultora Nielsen. En lo que va del año, los mayoristas vendieron 3,6% más en volumen respecto del mismo lapso del año anterior, con una facturación que aumentó 22,8%. Ese dato, no obstante, fue inferior al 29,5% de la inflación registrada en ese período. Si se tiene en cuenta la evolución del negocio, sólo en junio, la suba fue del 0,3% frente a una facturación del 25,1%. Alberto Guida, titular de la Cámara de Distribuidores Mayoristas (CADAM), explica las ventajas del sector respecto de los otros canales de comercialización: “En principio, la estrategia de posicionarse con precios más bajos que el resto del mercado los fortalece en este contexto recesivo”, dice. Pero además, la buena performance que tuvo el sector en 2016 y 2017, “los encontró -este año- mejor parados”, completa Gizzi. Con todo, las estrategias para seguir seduciendo clientes no se detienen para estos comerciantes. Por eso, durante el último congreso del sector que se hizo el miércoles pasado, el tema central fue cómo venderle a los millennials y cómo reaccionan estos frente a una misión de compra. «No sólo son la generación del presente sino también la del futuro”, enfatiza el titular de CADAM. Hoy, el 50% de los consumidores locales pertenece a esta generación, que tiene entre 21 y 37 años (millennials). Y hacia 2025, sumados a los centennials, se estima que serán el 75%”, dice Catalina Pirola, ejecutiva de Retail Services, de Nielsen. Frente a este escenario, las empresas están en transición, cuentan los analistas: «Mientras antes pensaban que el tema de la sustentabilidad era un plus para sus productos, ahora ya es obligatorio”, aseguran. Básicamente porque “el 51% de estos compradores se toma el trabajo de mirar las etiquetas, de testear que los productos no sólo tengan beneficios para ellos, sino también para la comunidad y el medio ambiente. Y además están dispuestos a pagar más por esto eso”, explica la analista. Otras diferencias, según cuentan los analistas de Nielsen son: ​
  • Su mayor conexión con la tecnología (el 70% consulta en las redes sociales antes de comprar algo),
  • Su propensión a la «economía compartida»;
  • Su mayor interés por los productos nuevos,
  • La necesidad de estar el menor tiempo posible en la tienda de compra.

Nuevos planes para desarmar la bomba de las Lebacs antes de fin de año

0
El equipo económico analiza modificaciones para reducir el stock de Lebacs que no está en poder de los bancos, esto es, fondos comunes de inversión, empresas, organismos oficiales, inversores extranjeros y minoristas. La idea sería ofrecer a los tenedores de estos títulos del Banco Central que al momento del vencimiento opten por comprar dólares o ir a pesos. Para estos últimos (caso fondos comunes de inversión, empresas u organismos oficiales), podrían acudir al mercado para constituir plazos fijos, fideicomisos financieros, fondos comunes, letras del tesoro por ejemplo. La movida forma parte de una secuencia que analizan el equipo económico y el Banco Central para reducir gradualmente el stock de las Lebac. Hubo un planteo al Fondo Monetario de parte de las autoridades locales respecto a la utilización de las reservas para encarar este proceso. Según funcionarios argentinos, usar estos dólares permitiría lograr el objetivo -bajar las Lebac que no están en poder los bancos-, de manera más veloz que si el Tesoro tuviera que pedir prestado esas divisas en el mercado. “Probablemente así lo terminaríamos para fin de año”, contó un miembro importante de la conducción económica. Fuentes de la Rosada, Hacienda y Finanzas y el Banco Central confirmaron que la medida está bajo análisis. Hay versiones distintas en cuanto a si el Fondo autorizará o no está arriesgada medida. Otros, tomando en cuenta los datos de la situación financiera y la baja en la recaudación, señalan que el fin de año está muy lejos, y que hay eventos anteriores que pondrán en jaque estos planes. Por ejemplo, el próximo «supermartes».

Según Macri en «Turismo» se crearon 280 mil nuevos empleos en 2018

0
Durante la cena anual del gremio gastronómico a la que asistió Maurio Macri, afirmó que el turismo es esencial para el desarrollo del país». Y «es pura potencia y es esencial para el desarrollo del país» Lo interesante es que sumó cifras: «este invierno hubo una «ocupación excelente» en hoteles de San Carlos de Bariloche y otros destinos del sur, que el Tren de las Nubes salteño recibió un pleno en cantidad de pasajes y unas diez mil personas asistieron en forma diaria al Parque Nacional de Iguazú.
  • Aseguró además que se registraron «280 mil nuevos empleos este año» en el sector del turismo.

EE.UU: la justicia condenó a Monsanto a pagar casi US$ 300 millones por ocultar la toxicidad del glifosato

0
Un tribunal de San Francisco, EE.UU. ha determinado que el herbicida glifosato, producto estrella de la multinacional anteriormente Monsanto, ahora Bayer, produce cáncer. Y la compañía deberá indemnizar con US$ 289 millones a Dewayne Johnson, un jardinero y agricultor norteamericano que contrajo la enfermedad luego de pulverizar con el plaguicida entre los años 2012 y 2014. El tribunal de San Francisco consideró que existe evidencia suficiente para vincular a las etiquetas comerciales de glifosato RoundUp y RangerPro con el cáncer terminal que hoy aqueja a Johnson. La resolución de la Justicia estadounidense representa la primera gran condena contra el gigante de los transgénicos y los pesticidas, en este momento en pleno proceso de absorción por parte de la alemana Bayer. El pronunciamiento judicial llega tras una demanda elevada por Johnson, quien en el lapso de dos años efectuó reiteradas aplicaciones del herbicida en distintos predios de escuelas ubicadas en California. Según el tribunal, Monsanto actuó con malicia dado que conoce la elevada toxicidad del agrotóxico pero se ocupó de nunca advertirlo de forma adecuada. Además de la sanción económica, la condena a la multinacional hiere de muerte a todas las campañas publicitarias que Monsanto sostiene desde hace años con el objetivo de anular cualquier cuestionamiento sanitario al glifosato. ¿Qué es el glifosato? El glifosato, según la definición de CASAFE -una de las cámaras que nuclea a los fabricantes de pesticidas en la Argentina-, «se utiliza para eliminar la competencia de malezas en los cultivos por luz, agua y nutrientes». El herbicida, autorizado por primera vez en Norteamérica en 1974, combina elementos quí-micos que inhiben el trabajo de enzimas que permiten a las plantas llevar a cabo procesos esenciales para la supervivencia. Si bien Monsanto es la responsable de su creación, lo cierto que la patente del plaguicida expiró en el año 2000. Hay centenares de fabricantes de glifosato en el mundo, hoy, y ninguno demasiado asustado de un juicio de patentes. Pero el fallo judicial que acaba de ocurrir en San Francisco los expone, por primera vez, a otro tipo de acciones legales.

Cambio de rumbo en el turismo: caen los viajes al exterior

0
La noticia es buena, aunque limita uno de los placeres más apreciados por la clase media argentina: durante junio, y por primera vez desde febrero de 2015, hubo caída de los viajes de argentinos hacia el exterior. La caída interanual es del 2,6% en las salidas turísticas, a pesar que fue el mes del Mundial de Rusia. La corrida cambiaria que arrancó en abril y siguió en mayo aparece como la principal explicación, ya que generó una suba en el dólar que encareció a los viajes. El turismo viene siendo, mes tras mes, una de las explicaciones clave para el rojo de cuenta corriente que viene aquejando a la economía local y que fue creciente en los últimos años. Sin ir más lejos, durante el primer trimestre del año, los viajes explicaron el 56% de las salidas de divisas por la cuenta servicios, que presentaron en ese período un déficit de US$ 3.517 millones. El rojo en la cuenta corriente fue una de las explicaciones clave de la aversión al riesgo argentino que derivó en la corrida cambiaria y en la propia devaluación. La reversión de la dinámica negativa en turismo era esperable. Por el lado de los ingresos de turistas extranjeros las noticias no fueron tan positivas: por primera vez en 15 meses, desde febrero de 2017, dio caída interanual. Fue una merma de 0,8%, tras un 2017 y un primer semestre de 2018 de buenos resultados. Ahí estará la clave, igual que como sucede con las exportaciones de bienes: para lograr una mejora sostenida, que no dependa del vaivén del tipo de cambio será clave que Argentina atraiga turistas extranjeros.

Reinvenciones: de presidente de ARSAT a fabricante de whisky artesanal

0
Entre telescopios caseros y cohetes de plástico, sus primeros años en Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires, marcaron su futuro. Pablo Tognetti era, por aquel entonces, un niño repleto de curiosidades. Anillos de saturno, satélites de júpiter y manchas solares. Cada encierro en su habitación significaba el inicio de un ritual: sacar el telescopio, apuntar hacia el cielo, y empezar a dibujar. «En cuarto año decidí que iba a estudiar física. Me dedicaba a la astronomía pero de manera muy amateur. Muchas cosas me llamaban la atención, entonces lo que veía lo dibujaba. Me sorprendía lo que podía hacer con un telescopio muy chico», explica el hombre, de 71 años. Se terminó de decidir en 1965, durante su viaje de egresados a Bariloche. «Había una conocida en mi ciudad que se estaba por recibir de Física en Bariloche, precisamente en el Instituto Balseiro. Cuando viajé, tuve la oportunidad de visitarlo y quedé maravillado. Terminé la secundaria y a los 19 años me vine a vivir aquí», recuerda. El Instituto Balseiro, fundado en 1955, funciona en las instalaciones del Centro Atómico Bariloche, en un convenio que tiene como protagonistas a la Universidad Nacional de Cuyo y la Comisión Nacional de Energía Atomíca (CNEA). «Estudiar en Bariloche fue muy duro. Me dieron una beca y alojamiento en los pabellones de la universidad. Ahora es diferente, los chicos reciben el dinero de la beca y alquilan un lugar junto a otros compañeros. Sí recuerdo la exigencia de una carrera que duraba tres años y medio y sólo permitía un aplazo. Al segundo, volvías a tu a casa. Sin vuelta atrás», explica Tognetti. En enero y julio eran sus vacaciones. «Después eran 10 meses de mucho sacrificio. Fueron épocas duras, pero por el estudio, no por otras cuestiones. Pero a mí no me importaba porque quería venir a vivir acá. Para estudiar Física al nivel que hay acá, incluso ahora, en Latinoamérica diría, no hay sitio mejor que este para aprender. Posee mucha continuidad y estar lejos de Buenos Aires ayuda. Lo digo porque todos los problemas que pasan allí se alivian a la distancia. Acá no se producen cambios permanentes, los directores duran mucho tiempo y tenés esa tranquilidad», cuenta el físico. «Dejando de lado los grandes institutos y universidades, todos los investigadores que salen de acá salen mejor formados que en cualquier otro sitio del extranjero. Cuando me recibí, me fui a vivir a Manchester, en el Reino Unido, durante tres años. Allí fui a realizar mi tesis», rememora Tognetti, quien se especializó en el circuito integrado a través de la implantación de iones con una máquina de acelerador de partículas y había que conocer eso para después armarlos. «Surgió por una beca y por la insistencia de otro físico, Conrado Varotto, impulsor del INVAP (Investigación Aplicada) y también su primer gerente general. Él tenía 28 años y quería armar cosas que sirvieran. Recuerdo que lo querían matar, porque decían que a ‘la ciencia básica no hay que perturbarla’. Hoy, a la distancia, estamos orgullosos de continuar con una universidad que gradúa a ingenieros de primer nivel», dice Tognetti. En el Reino Unido nació otra de sus pasiones: la fabricación de cerveza artesanal. «Fue casual. Veía un cartel cuando volvía manejando el auto a casa desde la universidad. ‘Homebrewing’, decía, todo junto. Averigüé qué significaba y al siguiente sábado bajé y me llevé un kit para hacer 20 litros de cerveza. Me quedé impactado porque esa cerveza era de un nivel que sólo en un buen pub podía tomar. Claro que mi formación como físico experimental me ayudó. Pero te tiene que capturar». Cuando regresó al país, siguió trabajando como investigador. «Luego visité Ecuador, Perú, Colombia y muchos países más; ahí me daba cuenta que el nivel universitario que tenemos, aún con todas las crisis que vivimos, es admirable. Es muy valioso y uno lo ve cuando se va afuera. Y a pesar de que tenemos la tecnología y la capacidad humana para realizar todo tipo de investigaciones y creaciones, a otros países le es más fácil comprar afuera por los créditos que les dan. Nosotros no podemos financiar», explica Tognetti. A la crisis que atraviesa el INVAP en la actualidad, el físico la explica de manera sencilla: «INVAP vive de lo que vende. Nosotros tenemos una ventaja que muchos países no tienen. Para vender afuera primero tuviste que haberlo hecho en tu país. El primer reactor, el primer radar y el primer satélite lo hicimos. Por eso hay que vender sí o sí para poder pagar los sueldos». Actualmente, Tognetti se desempeña, desde 2013, en el área de Marketing Internacional. Previo al inicio de este cargo, fue presidente de ARSAT durante siete años. «Fue una experiencia muy linda, con muchísimos proyectos cumplidos. Justo me fui un año antes del lanzamiento del ARSAT 1, que ya estaba listo. El ARSAT 2 estaba encaminado, le faltaban algunos detalles, pero fue un honor. Fue una lástima que el ARSAT 3 no se haya concretado». «Me queda poco tiempo de trabajo, por eso ya empecé desde hace un tiempo con otro proyecto: creé la primera destilería artesanal de whisky del país. Venía haciendo cerveza y desde hace un año y medio lo dejé para volcarme al whisky, que también lo conocí en el Reino Unido y me gusta mucho», relata el hombre que, en un proyecto familiar, armó la primera destilería junto a su yerno, con quien disolvió su sociedad desde hace un tiempo para lanzarse sólo al mercado con Madoc, un single malt. «Mi hijo me ayuda con la destilería. En Estados Unidos hay más de 1200 destilerías artesanales, que son ocho veces más grandes que acá. Mi formación académica y profesional me ayudó mucho en lo que es el laboratorio, reproducir recetas. Hice un proceso de escala piloto preparando whisky, que es un destilado de una cerveza, de ahí que el salto no es tan complicado», dice Tognetti. Él mismo diseñó los equipos, que tienen que ser de cobre. Su destilería, en Dina Huapi, produce un poco más de 6000 litros de whisky al año. «Es un proyecto que me interesa hacer, un desafío personal y comercial. Tengo mi jubilación, me estoy prácticamente retirado de INVAP y quiero sumar componentes para conocer nuevas realidades. Siempre innovando en hacer algo mejor».

El gasto mensual de una familia porteña de clase media ya supera los $ 50.000

El costo de la canasta de alimentos y servicios, para una familia tipo que vive en la Ciudad de Buenos Aires, tuvo en julio un valor de $ 50.015,12, según un informe que realiza todos los meses el Centro de Educación Servicios y Asesoramiento al Consumidor (CESyAC).
  • Del total de la canasta, el 78% se debe destinar a los gastos de servicios básicos para el hogar mientras que el 22% restante, es para los productos de consumo masivo.
Este tipo de productos tuvieron un incremento del 3,26% mientras que los servicios básicos, crecieron un 11,45%. La variación de precios interanual fue del 41,55% y la mensual, de 3,98%. Dentro de los productos de consumo masivo, los aumentos más relevantes fueron las bebidas (7,35%), los artículos de limpieza (4,03%) y las carnes (3,51%). En tanto que, en el rubro servicios básicos, los incrementos que tuvieron mayor impacto fueron combustibles (9,49%) y colegios (6%). El relevamiento incluye, entre varios ítems, el alquiler de vivienda, los gastos de un auto de 10 años de antigüedad, el abono de medicina prepaga, la cuota de un colegio privado de dos niños y el abono familiar en un club. De los elementos relevados se desprende que una familia necesitó en julio $ 1.667,20 diarios para afrontar los gastos mensuales: $ 360,27 son para adquirir productos de consumo masivo y $ 1.306,93 para contratar los servicios básicos del hogar. Las tres zonas relevadas por esta asociación en el ámbito porteño son: zona norte (ejes Av. Libertador, Figueroa Alcorta, Av. Santa Fe), centro (ejes Av. Rivadavia, Av. Corrientes, Av. Belgrano) y Sur (eje territorial de las Comunas 4 y 8).

YPF volvió a subir la nafta en el interior: $ 40 el litro de Premium

El ajuste se aplicó en Córdoba, Salta, Neuquén y Santa Fe. Es la segunda suba en la misma semana. En algunas ciudades, el incremento en lo que va del año alcanza el 42%. Esto ocurre a apenas cuatro días después de haber ajustado poco más del 5% las naftas. En la ciudad de Córdoba la versión Súper pasó de $ 31,83 a $ 33,28 el litro, mientras que el Diesel Infinia subió de $ 31,78 a $ 32,28 y el 500 de $ 27,20 a $ 27,50. En la ciudad mediterránea la Premium no sufrió modificaciones y se mantiene en torno a los $ 38,23. En Salta la Súper aumentó 51 centavos y llegó a $ 33,88 el litro. La Infinia se encareció 60 centavos y cruzó la frontera de los $ 40, al alcanzar los $ 40,47. En tanto, el Diesel Premium pasó de $ 34,08 a $ 34,38, unos 30 centavos más caro. El Diesel 500 sigue sin cambios a $ 29,29. Con este nuevo incremento, en una sola semana, YPF subió hasta 6,5% el valor de los combustibles en la provincia norteña. En lo que va de 2018, acumula 33,8% y 50% desde octubre del año pasado, cuando el Gobierno nacional liberó el mercado de naftas. En Neuquén el ajuste de este viernes fue de entre 1% y 2%, que se suma al 4% del lunes pasado. Las planillas de YPF en esa provincia indican que la Súper trepó de $ 24,23 a $ 24,71 y la Premium, de $ 29,08 a $ 29,66. El gasoil más económico escaló a $ 26,36 y el de mayor calidad se ubicó en $ 31,75. Desde el primero de enero pasado, la Infinia ya acumula 42% de alza. En la ciudad de Rosario YPF agregó 1,3% más a la suba del principio de mes, que fue de 6,5%. En os ocho meses de 2018 subieron 33,9%.