Nuevo logro tecnológico para la estructura del Tronador II. Lo explicamos

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Los sistemas de puesta en órbita jamás son sencillos, pero el combo de propelentes adoptados por la Argentina para su lanzador Tronador III es particularmente endiablado, y eso requiere de algunas explicaciones, también endiabladas. Lo difícil del asunto se evidencia en el grado de sofisticación metalúrgica y el concierto de experticia necesarios para construir apenas un componente de este este cohete: los tanques de oxidante de la primera etapa del cohete. Ladies & gentlemen: el espacio no es para cualquiera. Para poner las cosas más en perspectiva, estos tanques son de un único uso: todos los modelos del sistema de satelización Tronador se diseñan para ser enteramente descartables. Ojo, también lo son todos los satelizadores livianos, medianos y pesados de los 10 únicos países en el mundo con capacidad propia de llegar a zona orbital y dejar allí una carga útil. Los cohetes, oh lectores, son escaleras al cielo que se autodestruyen con sólo subirlas. Hoy hay una única excepción (la dejo para después). Desde que esta industria nació, en 1957, el estándar es ése: un cohete-un lanzamiento, no importa si de un sólo satélite o muchos. El Taxi Espacial de la NASA, un primer intento de ochentoso de romper parcialmente ese paradigma, pese a haber sido reutilizable, y en realidad debido a ello, fue el sistema más caro del mundo medido en dólares por kilo de carga en órbita baja… mientras el programa duró. Peor aún, el Taxi tuvo una tasa de accidentes con pérdida total de la nave superior al 2%: bastó con 2 eventos adversos en lanzamiento (en 1986 y en 2003) para que murieran 14 tripulantes. Como satelizador de cargas, el Taxi fue un cuello de botella interminable y a pérdida para todos los programas espaciales estadounidenses, que debían hacer colas larguísimas para usarlo, quisieran o no. Los diseñadores de satélites científicos o de sondas de exploración del sistema solar, como el Jet Propulsion Laboratory de Pasadena, California, detestaban el Taxi. Se lo tenían que fumar por una imposición del gobierno de Ronald Reagan, quien a su vez debía mostrar al mundo que el vehículo servía para algo. El Taxi sólo pudo calificar como apto para misiones tripuladas por pura decisión política, y luego por pura inercia política, hasta que el programa murió de muerte natural (se lo consideró un éxito y no se le puso un centavo más), y más de uno suspiró de alivio. El Tronador III (un rediseño del II), en cambio, es un bicho industrial. No está para mostrar grandezas argentinas, sino para garantizar que no nos dejen con nuestros satélites en tierra aún si, como país, a veces tomamos algunas decisiones antipáticas para quienes cortan el bacalao. Es puro asunto de soberanía tecnológica, expresión poco mentada últimamente. El Tronador III podrá satelizar hasta 750 kg. de carga útil en órbita polar heliosincrónica de 600 kilómetros de altura. Este tipo de órbita hace pasar al satélite sobre ambos polos terrestres con una ligera oblicuidad. Para generar imágenes ópticas o de radar del terreno y del mar, son las que más le convienen a un país muy largo de Sur a Norte, como el nuestro. Estas órbitas dibujan un plano que, con cada giro alrededor del globo, va avanzando generalmente hacia el Este. Eso termina por dar cobertura cada 14 días de toda la superficie planetaria. Y esto abre paso a venta de «diagnóstico por imagen satelital» a terceros países y a empresas, mercado en el que la Argentina ya es un jugador chico pero valioso: la CONAE vende las imágenes de radar en banda L que generan sus satélites SAOCOM 1 Y 2, un producto de rara potencia para medir humedad subterránea y predecir catástrofes, o medirlas una vez sucedidas. Este bicho industrial, el Tronador III, al que la CONAE se va acercando tras muchas revisiones de planes y no sin algunas catástrofes (entre ellas, presupuestarias, cuando el clarín del FMI toca a ajuste), no será un cohete especialmente impresionante. Tendrá 28 metros de altura y una masa de 90.000 kilos, de los cuales sólo 6.675 kg. serán componentes sólidos: el resto (83.325 kg) es todo combustibles líquidos. Y a este aparato habrá que ir llegando de a poco. El Dr. Raúl Kulichevsky, titular de la CONAE, cree que lo primero es reactivar los Vehículos Experimentales VEx 5 y 6, para ganar experiencia en fabricación de sistemas de aviónica, propulsión y estructuras. Con muchísima suerte, el VEx 5 se podría lanzar desde el CEPI (Centro Espacial Pipinas, en la costa bonaerense del Plata), a fines de 2023. El programa sigue sin fechas, o muy tentativas, por puro realismo político: basta con un cambio de gobierno o EN el gobierno para que el Programa Espacial se quede sin plata. No tiene un fondo especial, exclusivo e intocable, como el FONDEF, creado en 2020 para el reequipamiento militar. Se proyectan estos pasos: construir el Tronador II-A para lanzar satélites de hasta 250 kilos, luego el II-B para 500 kg. y luego, finalmente, el III. Desde el VEx-6 hasta a la serie de los Tronadores, los lanzamientos saldrían de otro centro espacial más equipado que el de Pipinas: el Manuel Belgrano, a medio construir cerca del apostadero naval de la Flota de Mar, en las afueras de Bahía Blanca. En 2020, con la pandemia y con una deuda impagable heredada del gobierno anterior, la CONAE «estuvo recalculando» y abrió una instancia menos ambiciosa y más rápida: el VLE, un cohete para lanzar hasta 80 kg. a una órbitas bajas más comunes: 300 km. Para ello, su empresa constructora VENG está diseñando el motor Karut («Trueno», en el idioma de los extintos Aonik’Enk, a los que llamábamos tehuelches). Y la idea es que este motor se fabrique «de una» por manufactura aditiva, es decir impresión 3D. A esta altura de las cosas, con una demanda mundial muy expansiva de servicios satelitales y sólo 10 oferentes de puesta en órbita, y pocos de ellos bien ubicados geográficamente para satelización a polar heliosincrónica, tendría que haber un nicho para el número 11 (la Argentina). Eso si logra una tecnología que inspire confianza. Y no necesariamente en la región: en el mundo. Es un camino largo, por ahora solitario (todavía no tenemos de socios a Brasil y la India) y lleno de patinadas. Pero no parece tan distinto del que venimos recorriendo desde 1950 en materia nuclear. Empezamos con menos que nada, y hoy, y muy a pulmón, somos el exportador más exitoso del mundo en pequeños reactores multipropósito, con plantas construidas en Perú, Argelia, Egipto, Australia, Arabia Saudita, y una (la mayor de todas y la segunda mayor del planeta) en fase de ingeniería en Holanda. No es casualidad que el fundador (Conrado Varotto) y algunos dirgentes de la CONAE y de su constructora de satélites (INVAP) vengan de la CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica). Lo caro de la actividad espacial no se limita a que los cohetes son de usar y tirar, sino que la mayor parte de los mismos, en masa, es toda combustibles (los cultos dicen «propelentes»). Se usan combustibles para hacer volar más combustibles. Y es que no es fácil escaparse un poco de la gravedad terrestre, lectores: la carga útil del cuete más pintado llega, con toda la furia, al 2 o 3% de la masa del vehículo en plataforma de lanzamiento. Si un avión fuera así de ineficiente, nadie volaría. Además, en el caso del Tronador III, esos combustibles serían distintos entre sí: la primera etapa tendría 4 motores de 30 toneladas de empuje cada uno, y se propulsaría toda a RP-1 o querolox, según la jerga:  kerosene aeronáutico ultrapuro como combustible, y oxígeno líquido puro como oxidante. Sí, recordó bien, lector/a: es la misma mezcla con que en 1969 despegó la primera etapa del Saturno V, el cohete que llevó astronautas a la Luna. De cintura para abajo (muy marcada la cintura, en el Tronador III), este sería un satelizador setentoso, clasificable como «criogénico», por usar al menos un gas licuado. Es decir, la planta baja es bastante moderna. La dificultad de hacer tanques con casquetes esféricos de aluminio llenos de soldaduras tan extrañas como la que tendrá el Tronador III, obtenidas por fricción, es que adentro hay que encerrar oxígeno líquido, a mantener unos grados debajo de su temperatura de licuefacción (183 grados bajo cero). Ese frío es letal para casi todos los metales: los hace tan frágiles como el vidrio, y en el caso del aluminio, resulta especialmente destructivo para las discontinuidades, como las soldaduras comunes (nada comunes, en realidad) de la industria aeronáutica. Por eso, la carga del LOx (oxígeno líquido) se autoriza pocas horas antes del despegue. Y no quiera imaginarse lo que le hace este frío a los componentes móviles de los motores, como las válvulas y las bombas, que suelen ser de alta velocidad. Hay que ser muy baquiano en mecánica de materiales especiales para atreverse con estas piezas. La segunda etapa del Tronador III, más convencional, será probablemente un motor hipergólico de 4 toneladas de empuje movido por metilhidrazina como combustible y tetróxido de dinitrógeno como oxidante. Además de tener nombres horribles, estas sustancias son tóxicas y corrosivas y dan un «impulso específico» relativamente bajo, pero reaccionan explosivamente al sólo contacto recíproco: no hay que encenderlas, y por eso se las llama hipergólicas. ¿Ud. pregunta qué demonios es el impulso específico? El empuje dividido por la masa de propelentes. Es una magnitud que no se usa en panadería o en automovilismo, pero en cohetería da una buena idea de la eficiencia de cualquier combo de propelentes. Lo ideal es que pesen poco y empujen mucho. ¿Por qué la CONAE probablemente usará hipergólicos en «la planta alta» de su Tronador III? Por prudente. ¿Pero acaso no pesan mucho y empujan poco? Respuesta: sí, pero dormís sin frazada. Los autodenominados americanos los llaman «storables» (almacenables), porque permanecen líquidos en un gran rango térmico y de presiones. Pero sobre todo, no fragilizan ni rompen las válvulas de cierre y apertura de las cañerías, o los álabes de las bombas que alimentan las cámaras de combustión. Eso da un motor de 2da etapa que se puede apagar y volver a encender a voluntad, con relativa confianza, cuantimás. Esto permitiría llegar con 1000 kg. de distintas cargas útiles a los 600 km. de altura de esas órbitas polares que tanto le gustan a la Argentina. Y eso de apagar y volver a encender la 2da etapa es genial si uno quiere ir colocando con precisión distintos satélites en órbitas ligeramente distintas. Los hipergólicos son propelentes que en este ispa ya manejamos «de taquito». Han sido y siguen siendo los líquidos que activan los «thrusters», o motorcitos de control de altura y apuntamiento de antenas de todos los satélites argentinos desde 1996, y tenemos unos cuantos, y todos anduvieron bien. Son los propelentes que movían todos los cohetes del mundo en los años ’50 y ’60, y siguen siendo los de los satelizadores más usados por las potencias espaciales emergentes, como el Protón ucraniano, el Larga Marcha chino o el PSLV de la India, un vehículo diseñado ex-profeso para lanzamientos a órbita polar. La pregunta del millón es por qué la Argentina no la hace más fácil y usa combustibles sólidos, que no requieren de tantos miramientos y produce cohetes almacenables largo tiempo en condiciones nada ideales, y disparables a toque de botón. Después de todo, cuando la actividad espacial argentina era un renglón menor de la Fuerza Aérea, la CNIE (no confundir con la actual CONAE, que es 100% civil) nuestro país acumuló 31 años de experiencia construyendo sondas sub-orbitales de combustible sólido, con no poca colaboración de la Alemania llamada entonces Occidental. Los motores sólidos en la jerga se llaman «granos», y son mezclas bastante compactas y negruzcas de gomas quemables con aluminio pulverizado a grano talco (técnicamente, muy explosivo) y sustancias que suministran oxígeno. Son literalmente explosivos de quemado lento, y se fabrican en búnqueres. Y eso porque en el mezclado o el curado del grano nunca es imposible meter la pata, y volar por el aire sin cohete, pero con búnker y todo. Hay dos modos de entender por qué dejamos de lado una tecnología que dominamos durante 31 años sin que nadie volara por el aire: la respuesta técnica y la respuesta verdadera. La técnica es que los cohetes sólidos son de muy bajo impulso específico, y además imposibles de regular: no hay modo de bajarles la potencia, y una vez encendidos no se apagan hasta agotar todo lo quemable. Para maniobras finas de puesta en órbita son como los palos de golf para la neurocirugía. Pero eso se arreglaría con un lanzador sólido y dejando que de las maniobras peliagudas y exactas se encarguen los «thrusters» de cada satélite, que usan los siempre confiables líquidos propergólicos. Los ARSAT 1 y 2, por ejemplo, se diseñaron con 14 thrusters cada uno, y juntando polenta entre todos, hasta pueden reemplazar la etapa final de un cohete que se manca. La respuesta verdadera es que a los EEUU, entre 1960 y 1991, no les hacía maldita la gracia que desarrolláramos sondas sub-espaciales que podían fácilmente transformarse en misiles, cosas militares disparables a toque de botón. Y menos que menos con los alemanes, que no son (o eran) de dejarse correr con la vaina, en términos diplomáticos. Los EEUU se bancaron 31 años a espera de que apareciera una configuración ideal de debilidad política. Eso sí, cuando pintó fue un bingo insuperable: dominio monopolar del mundo desde Washington, y en la Argentina, una derrota militar en Malvinas, una deuda externa letal y un gobierno nacional suficientemente vendido como para cancelar el proyecto Cóndor II, cerrar la CNIE, echar a sus expertos a la calle e incluso tratar de volar a dinamita los búnqueres de fabricación de grano de la planta de Falda del Carmen, como exigió Domingo Cavallo. Menem lo hizo, y si los búnqueres no volaron es porque el Dr. Conrado Varotto (el constructor original de INVAP) se tiró de palomita, reclamó el terreno e inauguró la CONAE para diseñar satélites de lo más civiles, incluso en colaboración con la NASA. Cuando alrededor de 1999, con el condoricida Menem aún de presidente, la flamante agencia espacial argenta ya tenía algunos éxitos en la materia, no va Varotto y declara que además construiría vehículos de puesta en órbita, para lo cual fundaría la empresa VENG. Obvio, desde Alaska a Tierra del Fuego no le creyó nadie. Porque no conocen a Varotto. Pero el tipo, por su origen en el Programa Nuclear, sabe bien cuál es la utilidad última de un acceso propio al espacio: evitar boicots, que te dejen con tus satélites juntando polvo durante años en una sala limpia. O que te cobren lo que se les da la gana por lanzarlos. O que te pidan a cambio que firmes papeles raros y hagas concesiones extrañas. Y con centenares de empresas (algunas PyMES) y universidades diseñando sus propios microsatélites en el mundo y sólo 10 países con capacidad de lanzamiento, hay que ser un considerable mamerto para no ver el mercado que se nos abriría. De modo que aquí estamos, sudando la camiseta rumbo al todavía lejano Tronador III. Con combustibles absolutamente nada militares, porque tanto el LOx como los hipergólicos hay que cargarlos horas enteras antes del lanzamiento. En 1991, cuando la Primera Guerra del Golfo, los viejos misiles soviéticos Scud de Saddam Hussein en general no llegaban a despegar justamente por eso: aún dispersos en sus camiones de lanzamiento en lo más remoto de los vastos desiertos iraquíes, los aviones de la Coalición dirigida por EEUU los hacían percha en tierra mientras estaban detenidos durante horas, cargando hidrazina y tetróxido de nitrógeno con mucha paciencia y con los dedos cruzados. Ésa es la explicación última y más real de por qué hemos elegido combustibles tan difíciles para el Tronador III, cohete setentoso de cintura para abajo, y cincuentoso de cintura para arriba, pero civil de pies a cabeza. No provocan chirridos de embajadas. No provocan siquiera el interés de nuestros propios militares (hay algo de la utilidad bélica de la observación desde el espacio, muy evidente en la guerra de Ucrania, que parece que se les escapó). Lo cual no quiere decir que la elección del kerolox y los hipergólicos tenga causas únicamente de política exterior: el Tronador III tendrá un impulso específico muy decente y suponemos -deseamos- que tambén una seguridad operativa aceptable. Si el kilo de carga puesto en órbita polar sale caro o barato, dependerá de la cantidad de Tronadores que fabriquemos, y eso a su vez de cuánta demanda de puesta en órbita insatisfecha se genere en otros países. Al respecto, mientras la actividad espacial argentina no tenga el equivalente de un FONDEF para planificar sus inversiones, es difícil hacer pronósticos, especialmente acerca del futuro, como decía Niels Bohr. Y no se necesita sólo plata, sino socios con tecnología propia con los cuales poder cambiar figuritas y diseñar programas compartidos: mencioné a Brasil y la India, pero la Argentina hoy está por entrar a un club mayor que los incluye: el bloque BRICS (donde están además Rusia y Sudáfrica). ¿Es posible todo esto? Como suele decir el dueño de AgendAR: el que viva, lo verá. Los únicos lanzadores recuperables hoy son los Falcon 9 de Space-X, la empresa de Elon Musk, y al billonario sudafricano le costó 15 años de errores y catástrofes lograr un precario éxito en un aterrizaje vertical en 2013. En cuanto a los vehículos turísticos de paseo suborbital de Space-X, Virgin Galactic y Blue Origin, esos sí que son reutilizables, ya que los billonarios muertos son mala publicidad. Pero nada de ir a órbita, por ahora. Apenas si arañan la línea de Karman, a 100 km. de altura, considerado límite geográfico entre la termósfera y el espacio orbital. Hay selfies más baratas, pero el que tiene plata… Un buen programa espacial a largo plazo vale más por los «spin offs» terrestres que por lo que logra fuera del planeta. Todo el conocimiento tecnológico nuevo en soldadura, materiales especiales, sensores, aviónica, navegación y control que genere el equipo CONAE-INVAP-VENG-Universidad de la Plata probablemente nutran el Programa Nuclear y la Fábrica Argentina de Aviones. Pero es conocimiento arduo. Nuestras laboriosas dificultades para construir algo tan aparentemente simple como un tanque esférico de LOx para nuestros futuros Tronadores certifican esto: el espantoso realismo con que los estadounidenses de a pie, los inventores del «slang» de los años ’50, llamaron a la tecnología muy compleja. Inventaron una expresión que sigue vigente: «That’s rocket science!» (Eso es ciencia de cohetes). No kiddin’ there, Bro.

Daniel E. Arias

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La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y la empresa VENG S.A. alcanzaron un nuevo hito en el desarrollo del proyecto Tronador II-250, luego de haber realizado con éxito la primera soldadura por fricción sobre los gajos de aluminio que conformarán los casquetes de los tanques estructurales del lanzador, que contendrán los propelentes de primera etapa. Con esta prueba se logró generar un prototipo idéntico a los que llevará el lanzador de satélites argentino.
Este logro se realizó en septiembre de 2022 en el Centro Espacial Punta Indio (CEPI) de la agencia espacial nacional, a partir de piezas diseñadas por la empresa VENG S.A., principal contratista del proyecto, y fabricadas por la Fábrica Argentina de Aviones “Brigadier San Martín” (FAdeA).
“Es un avance muy significativo hacia los componentes del Tronador II, porque nos permite continuar con el armado de un tanque prototipo”, afirmó Daniel Rocca, gerente de Acceso al Espacio de la CONAE. “Si bien aún continuamos trabajando en una fase de desarrollo tecnológico, ahora contamos con una pieza clave, el casquete, de 2,5 metros de diámetro, liviano y que puede ser armado a partir de gajos con los materiales y la tecnología de soldadura que necesita el Tronador II”, añadió.  
. Este trabajo se enmarca en el Proyecto Inyector Satelital Para Cargas Útiles Livianas (ISCUL) de la CONAE, a través del cual se lleva adelante el desarrollo y la fabricación del Tronador II, y que esta semana tuvo un importante apoyo de las máximas autoridades nacionales y provinciales, con la visita del presidente Alberto Fernández, del ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, y del gobernador Juan Schiaretti al Centro Espacial Teófilo Tabanera (CETT), en Córdoba. La comitiva participó de la firma de un nuevo contrato entre la CONAE y VENG para avanzar en el proyecto del lanzador, que permitirá colocar en órbita satélites de entre 500 y 750 kg, a una altura de hasta 600 kilómetros de la Tierra.

Tanques estructurales

La soldadura de los gajos requiere un proceso complejo por fricción, que se realizó en la estación de domos de la Máquina de Soldadura por Fricción instalada en el CEPI de la CONAE; y demanda un trabajo de programación diseñado especialmente para este fin. Este trabajo contó con la participación de las áreas de metrología de CEPI y del CETT, proveedores especializados y el equipo de VENG. El proceso de soldadura de gajos permite la fabricación de los domos (cada uno conformado por ocho gajos) de los tanques para el lanzador Tronador II-250, el cual se suma al desarrollo ya alcanzado de soldadura longitudinal y circunferencial para los anillos centrales del tanque, con un diámetro de 2,5 metros. Luego, estas tapas se soldarán al prototipo del tanque estructural que cumple la función de fuselaje y almacenamiento de combustible de manera simultánea. “Este hito, esta soldadura, resulta importante para VENG y el desarrollo de vehículos lanzadores, ya que se trata de la primera soldadura que realizamos sobre componentes producidos por un proveedor y sobre piezas de mayor complejidad geométrica. Por otro lado, esta soldadura representa el comienzo de la campaña de calificación de esta junta, compleja desde la programación y operación; y la confirmación que el centro de soldadura por fricción está 100% operativo y, sin dudas, listo para la producción de tanques estructurales”, explicó Pablo Bidinost, líder del proyecto de fabricación de tanques con soldadura por fricción-agitación (en inglés denominada Friction Stir Welding) en VENG. Además destacó: “Este hito es un paso más en el trabajo que estamos realizando con el objetivo de poseer un lanzador nacional, ya hemos dado varios y vendrán muchos más en los meses siguientes. Es una gran satisfacción poder liderar este proyecto y ver como se superan los desafíos y se potencia la vinculación del sistema tecnológico y privados”.  
 

Fabricación de los gajos

Los gajos de aluminio fueron fabricados por FAdeA a través de un proceso de estirado o stretch forming, en inglés, que resultó especialmente complejo porque las piezas poseen una doble curvatura. Para ello, la empresa Argentina Molaike desarrolló matrices específicas que permitieron alcanzar la geometría requerida. “Hace un año comenzamos con el proceso de fabricación de los gajos. Ahora estamos transitando la siguiente etapa, de producción en serie”, informó Leonardo Carrizo, jefe de Programas de Aeroestructuras de FAdeA. “También estamos desarrollando el proceso de fabricación de largueros, piezas que también son parte del tanque estructural”, adelantó. «En lo personal representa un gran orgullo haber liderado este proyecto desde FAdeA. Para nosotros este hito es volver a ser partícipe de la industria aeroespacial del país. Hemos realizado un trabajo con excelente sinergia entre ambas empresas donde pusimos a disposición las capacidades desarrolladas en la industria aeronáutica. En este caso la pieza, el gajo en sí, enfrentará cargas propias del ambiente espacial, pero pudimos adaptarnos comprendiendo a la perfección el diseño propuesto por VENG», explicó Carrizo. «Estamos muy contentos de este suceso sabiendo que quedan todavía muchos desafíos por delante hacia el objetivo final de tener un lanzador que despegue y coloque satélites propios desde territorio nacional».

EE. UU. reduciría sanciones contra Venezuela para que Chevron extraiga petróleo

The Wall Street Journal publicó este miércoles que Estados Unidos «busca aliviar las sanciones contra Venezuela» y que esto permitiría a Chevron Corp., una empresa petrolera estadounidense, «extraer petróleo» en ese país.

El gobierno estadouindense negó la version, pero, significativamente, Chevron llegó a un acuerdo preliminar con PDVSA, la empresa estatal venezolana, para renovar sus empresas conjuntas, según informó Reuters.

Según el WSJ, citando a «personas familiarizadas con la propuesta», la decisión podría abrir la puerta para un eventual restablecimiento de los mercados de Estados Unidos y Europa a las exportaciones de petróleo venezolano. Chevron Corp. es el último gran productor petrolero de Estados Unidos que cuenta con presencia en Venezuela. The Wall Street Journal asegura que, a cambio del alivio de algunas sanciones, el gobierno de Nicolás Maduro estaría dispuesto a retomar las conversaciones con la oposición venezolana para debatir las condiciones necesarias para llevar a cabo unas elecciones presidenciales libres en 2024. «Si el acuerdo se lleva a cabo y se permite que Chevron junto con las empresas de servicios petroleros de EE. UU. vuelvan a trabajar en Venezuela, solo colocaría una cantidad limitada de petróleo nuevo en el mercado mundial a corto plazo», se lee en el artículo. El medio va más allá y señala que la administración estadounidense, el Gobierno venezolano y algunas figuras de la oposición habrían llegado incluso a un acuerdo para liberar cientos de millones de dólares en fondos estatales venezolanos congelados en bancos estadounidenses para importar alimentos, medicamentos y equipos para la red eléctrica de ese país, así como sistemas de agua municipales. Sin embargo, la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Adrienne Watson, dijo que Estados Unidos no tiene planes de cambiar su política de sanciones contra Venezuela «sin medidas constructivas del presidente Nicolás Maduro para restaurar la democracia». “Nuestra política de sanciones a Venezuela se mantiene sin cambios. Continuaremos implementando y haciendo cumplir nuestras sanciones a Venezuela”, dijo Watson en un comunicado publicado horas después del artículo del medio estadounidense. Las fuentes consultadas por The Wall Street Journal señalan que las conversaciones entre funcionarios de Estados Unidos y Venezuela se habrían llevado a cabo discretamente al menos desde marzo, «pero cobraron impulso cuando Venezuela liberó el sábado a seis ciudadanos estadounidenses y un residente permanente de EE. UU. que habían estado encarcelados en ese país».

Un laboratorio argentino firma con CanSino Biologics. «Sale Rusia, entra China»

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Laboratorios Richmond informa que ha firmado un acuerdo con la empresa farmacéutica CanSino Biologics Inc. para la producción y comercialización de distintas vacunas en el país, que a futuro podrán exportarse a la región latinoamericana. La primera vacuna a transferir tecnológicamente será la de COVID-19, cuyo nombre comercial es Convidecia®.
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«Este convenio potenciará el desarrollo de conocimiento científico argentino, creará 120 puestos de trabajo directos y fortalecerá el sistema sanitario argentino. A su vez, permitirá sustituir importaciones y posicionará al país como referente de vacunas para América Latina.»
“Somos una empresa farmacéutica argentina con presencia en la región que lleva varias décadas apostando a la ciencia, la tecnología y la industria como motores del desarrollo. Nos enfocamos en cuidar y mejorar la salud de las personas y este acuerdo nos permite dar un nuevo paso en este sentido”, señaló Juan Manuel Artola, CEO del laboratorio que produce productos farmacéuticos para tratamientos de enfermedades complejas.
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“Como laboratorio siempre estamos en busca de nuevos desarrollos y exploramos acuerdos y asociaciones con compañías de todo el mundo. Ahora, las plataformas tecnológicas que incorporaremos derivarán en la producción de vacunas para tratar diversas patologías. En una primera instancia, comenzaremos con la producción de la vacuna contra COVID-19 de CanSinoBIO”, agregó el directivo de Laboratorios Richmond.
Recordamos que este laboratorio había anunciado en 2021 que iba a producir en la Argentina la vacuna Sputnik, bajo licencia del Instituto Gamaleya, de Rusia, en su nueva planta de Pilar.
Desde allí planeaba abastecer el mercado local así como exportar a países de la región, el negocio más atractivo detrás del frustrado emprendimiento. Pero pasaron cosas: las consecuencias de la invasión rusa a Ucrania y la parálisis del expediente de aprobación de Sputnik en la Organización Mundial de la Salud (OMS) parecen haber truncado el proyecto.
Ahora China
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«Con este acuerdo de transferencia, incorporaremos –en varias etapas- tecnologías tales como adenovirus, proteínas recombinantes, ARN mensajero, entre otras. La producción abrirá un nuevo capítulo de crecimiento también para nuestros científicos. Somos un laboratorio que hace escuela”, afirmó Elvira Zini, Directora de Asuntos Científicos del laboratorio.
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La vacuna Convidecia® fue aprobada por la Organización Mundial de la Salud. Su eficacia fue evaluada en estudios realizados en distintos países, entre los cuales se encuentra Argentina. Los resultados del estudio principal fueron publicados en The Lancet.

Dudas en la redacción de AgendAR:

Nos parece interesante transcribir algunos comentarios que provocó esta gacetilla en el equipo del portal:
«-¿Hay mer.cado aquí para una vacuna más contra el covid? El Ministerio de Salud ha comprado mucha Pfizer y Moderna… Además, la de CanSino es buena, pero la gente la va a asociar con Sinopharm, que no tiene buena imagen entre nosotros. «Otra vacuna china», dirán…
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-Tené en cuenta la «palanca» de China. La OMS les aprueba todo lo que presentan (a la Sinovac, con un 51% de efectividad, 1% sobre el nivel de descalificación!). Y a los rusos, minga. La Sputnik-V es la 3ra. vacuna más efectiva del mundo, y sigue sin aprobarse.
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-Mi duda es otra. Que Richmond pueda hacer una vacuna transgénica con el equipamiento que tiene. Filtrado y llenado sí, pero fabricarla? Uds. no se dan cuenta del desafío que eso representa.»

De la Antártida al espacio: alumnos de la escuela en Base Esperanza hablaron con la estación espacial

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Trece alumnos de entre 6 y 16 años que concurren a la escuela nº 38 “Presidente Raúl Alfonsín” de la Base Esperanza, en la Antártida Argentina, participarán hoy viernes 7 de una experiencia inédita, cuando mantengan una comunicación con astronautas que se encuentran en la Estación Espacial Internacional (EEI), informaron desde el gobierno de Tierra del Fuego.

Los cinco estudiantes de nivel primario del establecimiento educativo dependiente de la provincia y los ocho que cursan el secundario a través del Sistema de Educación a Distancia del Ejército Argentino (Seadea) mantendrán una conversación de nueve minutos con el astronauta Kjell Lindgren, a bordo de la ISS.

El contacto tendrá lugar a las 12:14 mediante una comunicación originada en Estados Unidos pero que se apoyará en “telepuentes” a través de bases ubicadas en Bélgica y Canadá.

Serán 14 minutos de transmisión aprovechando el momento en que la EEI transite en su órbita sobre la Antártida. Es un hecho histórico que nos tiene a todos muy movilizados y que servirá para visibilizar la tarea de la escuela en Base Esperanza”, sostuvo Gustavo Novoa, coordinador provincial de modalidades y de escuelas rurales dependiente del Ministerio de Educación de Tierra del Fuego.

El funcionario explicó que para planificar la actividad, los docentes antárticos Soledad Otaola (además, directora de la escuela) y Denis de Jesús Barrios (su pareja) trabajaron en conjunto con la docente de inglés Ethel Revello Barovero, quien dicta clases regularmente vía remota desde Ushuaia.

Escuela en la Base Esperanza de la Antártida
Escuela en la Base Esperanza de la Antártida .

Los chicos prepararon 16 o 17 preguntas que realizarán en inglés al astronauta. Durante la conexión serán asistidos por la médica de la base, Pamela Di Marco, que oficiará de traductora. En el momento de la conexión está previsto que se interrumpan todas las demás comunicaciones con la Antártida”, detalló Novoa.

“Este viernes nos vamos a comunicar con la Estación Espacial Internacional. Nos estamos preparando para decir nuestras preguntas en inglés. Estamos muy contentos y felices de poder hablar con un astronauta”, sostuvieron algunos de los alumnos de la escuela antártica en un video que grabaron para difundir el evento.

En la misma filmación, Di Marco aclaró que el programa ARISS (Amateur Radio en la ISS) es parte de un proyecto que unió a radioaficionados voluntarios de distintas partes del mundo con las agencias espaciales para “poner en contacto a estudiantes con los astronautas”.

Por su parte, la docente Otaola le dijo que “se trata de una experiencia única tanto para nuestros hijos (en el plano personal) como para nuestros alumnos (en la faz profesional). Es algo inolvidable y maravilloso. Somos privilegiados por el solo hecho estar un año enseñando en la única escuela de la Antártida, imaginen con este plus que es la conexión con un astronauta en órbita”.

Otaola se esperanzó en que las condiciones meteorológicas permitan mañana el contacto con el espacio y que se produzca “una comunicación exitosa en la que nuestros alumnos se sientan orgullosos de lo que están haciendo”, enfatizó la docente y directora de la escuela 38.

El Gobierno fueguino aclaró en un comunicado que la iniciativa fue impulsada por la organización Ciencia, Educación y Tecnología unidos por la Radio Afición (Cetra), uno de cuyos referentes argentinos es Luis Funes, un radioaficionado de San Luis (conocido por su licencia LU8YY/Q) que ya participó de emprendimientos similares.

Funes es un docente jubilado, apasionado por las comunicaciones, que ya logró comunicar a estudiantes puntanos con Lucas Parmitano, un astronauta italiano que orbitaba la Tierra a 400 kilómetros.

El Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) y el Ministerio de Educación fueguino, entre otros organismos, sumaron también distintos tipos de colaboraciones al acontecimiento que será transmitido en vivo por canales de televisión argentinos y podrá seguirse en vivo en la cuenta de Instagram del Cocoantar.

La Base Esperanza está ubicada en punta Foca (entre las caletas Choza y Águila) de la bahía Esperanza en la península Trinidad. Junto a la chilena Villa Las Estrellas (que desde 2018 cerró su escuela F-50, por lo que la única escuela para niños funcionando es la argentina) son los únicos establecimientos de la Antártida en donde había personal temporal cumpliendo funciones militares, científicas o de servicio acompañados de sus familias
La Base Esperanza está ubicada en punta Foca (entre las caletas Choza y Águila) de la bahía Esperanza en la península Trinidad. Junto a la chilena Villa Las Estrellas (que desde 2018 cerró su escuela F-50, por lo que la única escuela para niños funcionando es la argentina) son los únicos establecimientos de la Antártida en donde había personal temporario cumpliendo funciones militares, científicas o de servicio acompañados de sus familias .

El programa ARISS fue creado y gestionado por un consorcio internacional de organizaciones de radioaficionados y agencias espaciales, incluyendo la NASA en Estados Unidos con el objetivo de despertar el interés por las disciplinas científicas, como la ingeniería o las matemáticas.

La EEI es un gigantesco satélite tripulado en forma permanente que se encuentra a unos 400 kilómetros sobre la superficie de la tierra y completa una órbita cada 90 minutos viajando a 28.800 kilómetros por hora.

Considerado uno de los objetos más caros construidos por el hombre (entre 150 mil y 200 mil millones de dólares), es mantenido y administrado por las agencias espaciales estadounidense, europea, rusa, japonesa y canadiense, además de los países que colaboran en forma esporádica.

Lindgren, el astronauta que hablará con los alumnos de la Base Esperanza, es norteamericano aunque nacido en Taiwán, tiene 49 años y en 2009 fue seleccionado como miembro del grupo de los 20 astronautas de la NASA.

CONAE: información satelital, para optimizar el uso del agua en Catamarca

Con el objetivo de optimizar el uso del agua y favorecer el desarrollo de los humedales de montaña denominados «Vegas», un equipo de investigadores de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) trabaja en el altiplano de la provincia de Catamarca con el objetivo de implementar productos de análisis satelital de aplicación sencilla que faciliten la toma de decisiones en temas de áridos y semiáridos argentino, con información de los satélites de la constelación Saocom y de otros sensores. Los estudios se concentran en la localidad de Antofagasta de la Sierra y participan del equipo interdisciplinario Miguel Rodríguez Maiztegui, Santiago Bustos Revol y Sofía Teverovsky, quienes pertenecen a la Subgerencia de Aplicaciones y Productos de la Misión Saocom, de la Gerencia de Observación de la Tierra (GOT) de la Conae. ¿Qué son los «Vegas»? Son humedales de montaña, como pequeños “oasis” que se encuentran inmersos en una matriz con características de aridez extrema y proveen de distintos servicios ecosistémicos fundamentales para la supervivencia de las poblaciones, respondió en diálogo con Télam-Confiar Rodríguez Maiztegui.
Además, son reservorios de biodiversidad, reguladoras en el aporte y almacenamiento del agua entre otros tantos
«El contexto ambiental los hace sistemas muy frágiles ante cualquier cambio o disturbio (ya sea de índole natural o antrópico) y, por ende, su recuperación es muy lenta. Podríamos decir que las vegas, dentro del paisaje árido que caracteriza a la cordillera, es el ecosistema de mayor interrelación entre lo natural y humano», completó. Como el recurso agua es la problemática general en la zona, el equipo investigó cómo abordarla desde distintas técnicas satelitales y de ahí surgió comenzar a trabajar calibrando el mapa de humedad del suelo, monitorear nieve y glaciares, además de otros indicadores para el análisis de las vegas. El Mapa de Humedad del Suelo aporta información sobre el contenido de humedad en el perfil del suelo. Algunas de las variables de la superficie que condicionan el modelo son: la constante dieléctrica, la presencia de vegetación y rugosidad de la superficie. El investigador dijo que en este momento se encuentran en la etapa de calibración y validación del mapa de humedad de suelos para las zonas áridas semiáridas de la Argentina. Qué va a permitir la investigación La investigación tiene diversos fines, explicó Rodríguez Maiztegui: por un lado, permitirá en los territorios aportar técnicas y herramientas satelitales que favorezcan la toma de decisiones en ciertos temas de interés en el árido y semiárido argentino. «Podremos generar información que nos indique a través de mapas de humedad en qué periodos y con qué frecuencia se presenta la humedad en una zona determinada», en especial en la región de Antofagasta. Además, se podrá determinar mediante índices satelitales el comportamiento de la vegetación dentro de las vegas, siendo otro factor de análisis sobre su estado. Otro de los aportes, contó el investigador, será el de «determinar zonas con presencia de humedad que no estaban identificadas como tales, simplemente por no observarse a simple vista o por su dificultad de acceso al territorio», lo que constituye una «ventaja fundamental de los sensores satelitales», al contar con información a priori. En tanto que el estudio de la nieve y glaciares de la zona permite estimar el caudal de los ríos, es decir, el agua disponible que se tendrá durante la temporada de fusión. Qué información proporcionarán los satélites La constelación Saocom 1A y 1B con sus instrumentos SAR en banda-L full polarimétrico que operan en el rango de las microondas, permite obtener diversa información de la superficie y objetos con los que interactúan las ondas. Como característica principal y por su condición de sensor activo, el equipo puede estudiar el área de interés sin importar la luminosidad, es decir, si es de día o noche; y a su vez, en condiciones de nubosidad la onda de radar puede traspasar sin que esto sea un condicionante. Algunas de las aplicaciones que puede generar es el Mapa de Humedad de Suelo, y con esta información se determinan las zonas con diferentes gradientes de humedad. «A su vez, con la información polarimétrica que brinda el Saocom obtenemos información sobre la cubierta de nieve y glaciares cubiertos de roca que se encuentran en la zona, lo cual es importante porque la nieve y los glaciares alimentan de agua a las vegas y ríos en estas regiones áridas», resaltó el investigador. El trabajo de campo La idea de un Mapa de Humedad es «novedosa y única para nuestra Puna, es poder reconstruir un mapa que nos permita tener identificadas las fuentes de agua y evaluar todo lo que son glaciares y nieves, que en general son lugares inaccesibles», destacó Sergio Caletti, director de Ambiente de la Municipalidad de Antofagasta de la Sierra. El directivo remarcó que «hay altísima expectativa» en la zona sobre este trabajo, pero que al mismo tiempo buscan explicar con claridad de qué se trata: «A veces, la gente tiene la expectativa de «acá está el agua y hay que hacer el pozo”, por ejemplo. Pero hay que explicarle que saber dónde está el agua o dónde hay mayor humedad, no siempre va a ser una herramienta suficiente para hacer un pozo. «Lo que sí va a a ser es una herramienta de gestión indispensable, porque no es lo mismo decir ‘hagamos un pozo acá para ver’, que ‘hagamos un pozo porque ya tenemos los indicios que va a haber humedad'», aclaró. Caletti enfatizó que la información sirve tanto como para el mapa de humedad del suelo y como para tomar decisiones a partir de eso: «Hay casos que pueden interesar las zonas donde hay menos humedad. Por ejemplo, para hacer un dique o un reservorio, es necesario evaluar aquellos lugares donde el agua se infiltre menos hacia los costados». «Son todas cuestiones técnicas que se van evaluando y por las cuales generan muy buenas expectativas, la recepción ha sido muy buena en las villas».

El Ministerio de Salud informó que ya está comprada la mayoría de las vacunas para 2023

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La jefa de Gabinete del Ministerio de Salud, Sonia Tarragona, adelantó que esa cartera “ya ha comprado la mayoría de las vacunas para atender las necesidades del año que viene, en lo que tiene que ver con el calendario tradicional y con el Covid”.

Tarragona expuso los lineamientos principales del Ministerio de Salud ante los legisladores que integran la comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, debido a que la titular de la cartera, Carla Vizzotti, se encuentra en un viaje oficial a la Antártida. La nota completa, en Periferia.

Comienza la construcción de nuevo oleoducto Bahía Blanca-Vaca Muerta

El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, anunció que la empresa Oleoductos del Valle (Oldelval) comenzará este mes la instalación de los caños del nuevo oleoducto que llevará la producción de Vaca Muerta a Puerto Rosales, en la localidad bonaerense de Bahía Blanca.

“Oldelval, que ya tiene la concesión de 2027 a 2037, tiene los caños y en octubre empieza a enterrarlos para darle inicio a la obra del nuevo oleoducto, que duplicará la capacidad de transporte del petróleo que surge de Vaca Muerta”, aseguró Gutiérrez. Durante una recorrida de obras ejecutadas en la ciudad de Neuquén, junto al intendente, Mariano Gaido y al vicegobernador, Marcos Koopman, indicó que “los trabajos se realizarán desde Bahía Blanca hacia Vaca Muerta”. La empresa Oldelval lanzará el llamado a licitación a las operadoras interesadas en trasportar petróleo a través del nuevo oleoducto. La recepción de ofertas culminará el 18 de octubre próximo, en tanto los contratos serán por los volúmenes a trasportar desde 2024 en adelante. Gutiérrez anticipó que la compañía provincial, Gas y Petróleo del Neuquén (G&P) “va a participar de la licitación, para que la producción tenga garantizado su transporte”.

El aumento del precio del transporte en el AMBA, y una economía de subsidios

El ministro de Transporte, Alexis Guerrera, confirmó ayer que las tarifas de trenes y colectivos (en el Área Metropolitana de Buenos Aires) volverán a aumentar en diciembre. «Estamos analizando cuál va a ser ese porcentaje de aumento, pero aproximadamente podemos hacer un promedio de 40%, adelantó. En el AMBA el boleto mínimo de colectivo cuesta menos de un tercio que en Córdoba y Santa Fe.

Será el segundo ajuste en lo que va del año luego del incremento aplicado el 1 de agosto. En el caso del colectivo, el mínimo se iría de 25,2 a 35,28 pesos, acumulando un incremento de 95,5 por ciento, en línea con la inflación interanual que se proyecta para fin de año. “La suba no va a ser exactamente igual para todas las líneas de ferrocarril ni para todas las modalidades», sostuvo el ministro. En Transporte por ahora no dan mayores precisiones sobre lo que viene. El anuncio se produce en medio de una creciente tensión con las provincias por el reparto desigual de los subsidios destinados al transporte público de pasajeros entre el Área Metropolitana de Buenos Aires y el resto del país. Guerrera recordó que «en el pacto fiscal de 2018 había un compromiso por parte de las jurisdicciones de abandonar el mecanismo de compensaciones por parte del Gobierno nacional, pero esto no se ha cumplido producto de la Covid». «Ese fondo compensador de interior se refortaleció y hoy seguimos con la discusión sobre cuál es el nivel de participación que tiene que tener el Gobierno federal en lo que es el transporte automotor de jurisdicción provincial o municipal».

Tensión con las provincias

Transporte publicó el 14 de julio la resolución 443/22 que destinó 24.700 millones de pesos mensuales al transporte automotor de pasajeros del AMBA. Al mismo tiempo, destinó 16.050 millones al Fondo de Compensación al Transporte Público de pasajeros urbano y suburbano del interior del país durante el cuatrimestre julio-octubre. Si se mensualiza, la cifra equivale a unos 4.000 millones de pesos para todo el transporte del interior, seis veces menos que los 24.700 millones que recibe el AMBA por mes. Autoridades de distintas jurisdicciones provinciales enviaron el mes pasado una carta a Guerrera donde le pidieron una mejora en el reparto de los subsidios y alertaron sobre la “falta de recursos para afrontar el incremento de costos”. En Ciudad de Córdoba, por ejemplo, las tarifas de colectivo ya subieron tres veces en lo que va del año. El último ajuste se produjo el sábado 24 de septiembre cuando el boleto mínimo trepó a 85 pesos, un 70,4 por ciento por encima del valor que tenía en enero. “Responsabilizamos al Gobierno nacional por esta suba del transporte público del interior, fundamentalmente al ministro de Transporte, Alexis Guerrera, por no habernos atendido pese al pedido de audiencia que realizamos”, aseguró el secretario de Transporte municipal Marcelo Rodio. El lunes 26 de septiembre aumentó la tarifa de los colectivos de Rosario y este viernes 7 de octubre subirá el boleto en la ciudad de Santa Fe. En ambos casos también trepa a 85 pesos, un 237 por ciento más de lo que cuesta el boleto mínimo en el AMBA. El Jefe de Gabinete, Juan Manzur, se refirió a esas diferencias cuando presentó su informe de gestión en Diputados a mediados del mes pasado. “Hay una asimetría en la asignación de los recursos vinculados al interior con el AMBA. Esto se viene corrigiendo, pero no lo vamos a corregir de un día para el otro porque llevan mucho tiempo”, respondió ante la consulta de un legislador de Neuquén. En el gobierno remarcan que a fines de 2019 las jurisdicciones del interior recibían 6000 millones en subsidios al transporte público, en 2020 esa cifra trepó a 16.000 millones, en 2021 a 28.000 millones y este año el compromiso es llegar a 46.000 millones. A su vez, subrayan que está previsto continuar con el traspaso de las líneas a la Ciudad de Buenos Aires para reducir así el monto que se le asigna al AMBA en subsidios ya que la Ciudad debería aportar como lo hace el resto de las jurisdicciones. La UTA, por su parte, publicó un comunicado en el que anunció un paro de colectivos de 48 horas para la semana que viene, en el interior del país. Los servicios se verán afectados el miércoles 12 y el jueves 13 de octubre, como parte del reclamo por aumento de salarios. “Hemos agotado todas las instancias de negociación”, advirtieron. Guerrera aclaró por las dudas que el aumento que se viene en el AMBA «no tiene que ver con la negociación de la UTA en el Ministerio de Trabajo porque el transporte interior, que es la discusión en este momento, no es jurisdicción del Gobierno nacional, más allá de que las provincias siempre ponen la presión sobre los subsidios nacionales». «Es jurisdicción de los gobiernos provinciales y municipales establecer las tarifas, los recorridos, las paradas, y lo que hace el Gobierno nacional es un mecanismo de subsidios», subrayó.

Presión de las empresas

Además de la presión que vienen ejerciendo las jurisdicciones provinciales, el gobierno nacional debe lidiar también con las empresas de colectivos del AMBA, que a fines de agosto protagonizaron un lockout en reclamo de subsidios atrasados. La situación se descomprimió coyunturalmente, pero la cuestión de fondo continúa sin resolverse. “El servicio se va a ir normalizando en la medida que se vaya recibiendo los pagos y el Gobierno vaya cumpliendo con sus compromisos hasta fines de octubre. Es el máximo esfuerzo que puede hacer el sector empresario”, indicaron desde la Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros a comienzos de septiembre. El anuncio de un nuevo aumento de tarifas que anticipó Guerrera no está directamente relacionado con esa negociación, pero puede ayudar a descomprimir.

Biden acusa a la OPEP de “alinearse con Rusia” por el fuerte recorte de la producción de petróleo

El aumento en el precio del petróleo en todo el mundo que provocará la decisión de la OPEP de reducir el bombeo en dos millones de barriles diarios  a partir de diciembre representa un golpe muy duro para el presidente Biden, a un mes casi exacto de las cruciales elecciones legislativas en noviembre.

WASHINGTON.- Bajo una ola de críticas, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, viajó a Arabia Saudita en julio de este año, forzado a encontrar soluciones para bajar el precio de la nafta, chocó puños y se sentó en una mesa frente al príncipe Mohamed ben Salman –acusado por la inteligencia estadounidense de haber mandado a matar al columnista de The Washington Post Jamal Khashoggi– y a quien Biden había prometido convertir en un “paria”.

Poco tiempo después, la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP), dominada por Arabia Saudita y Rusia, decidió aumentar levemente su producción diaria de petróleo. Pero este miércoles, en un fuerte giro, la OPEP anunció ahora un marcado recorte en su producción diaria de crudo, mucho más amplio del que esperaba el mercado, una movida que fue fuertemente criticada por la Casa Blanca, que denunció un nuevo alineamiento entre Riad y Moscú.

“Está claro que con la decisión de hoy la OPEP+ se alinea con Rusia. Y lo dejaré ahí”, dijo la vocera presidencial, Karine Jean-Pierre, a los periodistas a bordo del avión presidencial Air Force One.

Antes de su declaración, la Casa Blanca había difundido un comunicado del asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y el director del Consejo Económico, Brian Deese.

El presidente está decepcionado por la decisión miope de la OPEP+ de recortar las cuotas de producción mientras la economía global lidia con el continuo impacto negativo de la invasión de Ucrania por parte de Putin. En un momento en que mantener un suministro global de energía es de suma importancia, esta decisión tendrá el impacto más negativo en los países de bajos y medianos ingresos que ya se están recuperando de los elevados precios de la energía”, dijo la Casa Blanca.

Representantes de la OPEP, hoy, en Viena
Representantes de la OPEP, ayer, en Viena .

El gobierno de Biden lanzó una ofensiva para bajar los precios de los combustibles en Estados Unidos, una variable a la cual los norteamericanos reaccionan con enorme sensibilidad. Desde la invasión de Rusia a Ucrania el precio se disparó y le asestó un golpe a la popularidad del presidente. Además de tender un ramo de olivo a los saudíes para conseguir más petróleo, Biden liberó una parte de las reservas estratégicas de crudo del gobierno federal y presionó a las petroleras para que aumentaran su producción y bajaran los precios.

La ofensiva dio resultados: desde el comienzo del verano boreal, los precios promedio del combustible en Estados Unidos han bajado más de un dólar, y el precio más común en las estaciones de servicio para el galón de combustible –alrededor de cuatro litros– es de US$3,29, indicó la Casa Blanca.

Pero la movida de la OPEP+ amenaza con echar por tierra esos avances, justo cuando Estados Unidos se mete de lleno en la campaña para las elecciones legislativas que se realizarán a principios de noviembre, en las que se juega el control del Congreso.

A la par de la caída de los precios de los combustibles, Biden había logrado un repunte de su popularidad, una medida que es decisiva para la suerte de los demócratas en los comicios. Los republicanos confían en poder capturar, cuando menos, el control de la Cámara de Representantes, donde los demócratas tienen una pequeña mayoría.

Tras la decisión de los países productores de petróleo, Biden mantendrá el rumbo. El Departamento de Energía entregará otros 10 millones de barriles de la Reserva Estratégica de Petróleo al mercado el próximo mes, continuando con las entregas ordenadas por Biden en marzo de este año, indicó la administración demócrata. Y la Casa Blanca hizo “un llamado a las compañías de energía de EE. UU. para que sigan bajando los precios de las gasolineras cerrando la brecha históricamente grande entre los precios de la gasolina al por mayor y al por menor, de modo que los consumidores estadounidenses paguen menos en las gasolineras”, indicó el comunicado.

Biden también consultará con el Congreso sobre “herramientas y autoridades adicionales para reducir el control de la OPEP sobre los precios de la energía”, agregó el mensaje oficial, que pone el acento, además, en la importancia de “acelerar la transición hacia la energía limpia y, al mismo tiempo, aumentar la seguridad energética, aumentando nuestra dependencia de las tecnologías energéticas y de energía limpia fabricadas y producidas en los Estados Unidos”.

Rafael Mathus Ruiz

El Nobel de Química 2022: por el desarrollo de la “química click” y la “química bioortogonal»

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Por el desarrollo de la “química click” y la “química bioortogonal”, la Academia Real de Ciencias de Suecia otorgó el Nobel de Química 2022 a Carolyn Bertozzi y K. Barry Sharpless, de Estados Unidos, y Morten Meldal, de Dinamarca.

Sus conocimientos se utilizan para desarrollar nuevos productos farmacéuticos, para mapear el ADN, crear materiales innovadores para la industria y otras aplicaciones. Sharpless, del Centro de Investigación Scripps, en Estados Unidos, y Meldal, de la Universidad de Copenhague, fueron reconocidos por haber sentado las bases de la “química click”, una forma funcional de la química que habilita que moléculas o “bloques de construcción moleculares” se unan entre sí de forma rápida, simple y eficaz para crear nuevos compuestos orgánicos. Esta técnica se usa ahora a nivel global en laboratorios de investigación y de la industria.
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“Sharpless y Meldal descubrieron que dos moléculas, azidas y alquinos, reaccionan eficientemente cuando se agregan iones de cobre. Ahora esta reacción (o herramienta de construcción) muy sencilla se está empleando a nivel global en el campo de la investigación y para el desarrollo de nuevos fármacos, materiales poliméricos novedosos, compuestos para delivery de drogas y otras aplicaciones. Simplemente sirve para unir moléculas diferentes y crear así nuevos compuestos orgánicos”, indica Carola Gallo doctora en Química, profesora de Síntesis Orgánica y Química de Carbohidratos e investigadora del CONICET en el Centro de Investigación en Hidratos de Carbono (CIHIDECAR, CONICET-FCEN-UBA). .
Por su parte, Bertozzi, de la Universidad de Stanford, llevó la “química click” a un nuevo nivel desarrollando así la “química click bioortogonal”. Utilizó los hallazgos de Sharpless y Meldal para desarrollar esa misma reacción dentro del sistema vivo de manera que no fuera tóxica y no afectara a la célula.  Así pudo “pegar” moléculas a determinadas partes de la célula con la ayuda de microscopía de avanzada, “iluminar” y mapear glicanos, biomoléculas que en las superficies de las células cumplen importantes funciones biológicas para la vida. Bertozzi, también pionera y referente del colectivo LGTB en las ciencias, “contribuyó notablemente a desarrollar la glicobiología química, que es el área que estudia qué hacen los glicanos en el ser vivo. Los glicanos están formados por carbohidratos complejos (azúcares) y son fundamentales en los procesos biológicos, por ejemplo, en cáncer, infecciones por virus y bacterias”, indica Gallo. Ciertos glicanos se encuentran en la superficie de las células cancerosas y de alguna manera protegen a esos tumores.  “Bertozzi tuvo la genial idea de pegar anticuerpos contra esos glicanos con enzimas que descomponen a esos glicanos y así, de esa manera, poder atacar el tumor”, explica Gallo. En esa línea, los trabajos de Bertozzi han sido útiles para el desarrollo de nuevos fármacos contra el cáncer que ahora se están testeando en ensayos clínicos. Poco se sabía sobre los carbohidratos complejos y su acción. “Bertozzi pudo incorporar a la célula un azúcar con una azida y a partir su desarrollo de la química click bioortogonal pudo pegar moléculas fluorescentes a la célula y así seguirlas con el microscopio. Realmente es muy acertado decir que la investigadora laureada iluminó la célula y comenzó una nueva era”, destaca Gallo. Muchos especialistas en Química se han visto impulsados por el deseo de construir de manera artificial moléculas cada vez más complicadas en farmacéutica e investigación con propiedades medicinales y de otro tipo, pero lo han hecho por medios que generalmente requieren mucho tiempo y son muy costoso de producir. Los trabajos de Bertozzi, Sharpless y Meldal facilitan que estos procedimientos sean más sencillos, económicos y directos.   “Sus hallazgos son muy importantes para el desarrollo de fármacos porque aportan diversidad en las últimas etapas. Generalmente, los medicamentos poseen una estructura líder que se va refinando colocando distintas partes diferentes en la molécula, y así tener muchas moléculas diversas para poder probar contra micoorganismos que generan enfermedades. La reacción click te permite hacer eso”, indica Gallo. Y concluye: “En nuestro instituto trabajamos sobre estos temas, entendemos la importancia de los glicanos, y estamos muy contentos con este premio porque la química orgánica ha permitido generar grandes avances en la glicobiología.”